El impacto económico del enoturismo se incrementa un 20,5%

Esta cifra se calcula teniendo en cuenta el precio de la visita estándar y el gasto medio por visitante en las bodegas y museos asociados a las Rutas del Vino de España. En 2018, el precio medio de la visita a bodegas aumentó hasta los 9,79 euros, igual que el gasto del visitante, que se incrementó a los 19,98 euros de media.

El precio medio descendió ligeramente en los museos, de 4,68 euros a 4,07 euros, pero también subió de manera importante el nivel de gasto, pasando a 7,24 euros, frente a los 5,35 euros del año anterior.

Visita a una bodega de Rioja Alavesa.

El informe analiza las visitas a bodegas y museos y el gasto realizado en las tiendas de estos establecimientos, pero no tiene en cuenta alojamientos ni restaurantes ni otros conceptos como catas especiales, alquiler de espacios, comidas y otros servicios. La cifra total de negocio generada por el enoturismo en las citadas ruta alcanzaría los 240 millones de euros si se tuvieran en cuenta todos estos elementos, según apunta el estudio.

Cambios de rutas

El informe señala que este crecimiento se registró a pesar de que dos rutas abandonaron el pasado año el club de producto, la de Txakoli y Empordà -ésta es una de las que contaba con mayor afluencia turística-. Al mismo tiempo, nuevas rutas se incorporaron al club el pasado año: (Rioja Oriental, Arribes y La Mancha, pero sólo se han tenido en cuenta los datos de la primera para el informe. La información reflejada en la nueva publicación corresponde a 26 rutas de las 30 que actualmente componen el club de producto.

Con estos cambios, el pasado año se registró una caída en la cifra de visitantes. Se contabilizaron más de 2,9 millones, cuando el año anterior se superaron los tres millones.

Prácticamente todas las rutas del club presentaronn crecimientos en la cifra de visitas, un 4,4% más respecto al año anterior

Las Rutas del Vino y el Brandy del Marco de Jerez y la Ruta del Vino y el Cava del Penedès Enoturisme Penedès continúan en los primeros puestos, con 582.351 y 441.467 visitantes, respectivamente.

Les siguen las rutas de Ribera del Duero, Rioja Alta, Calatayud, Rioja Alavesa y Rías Baixas (donde se superan los 100.000 visitantes anuales) y Somontano, Utiel-Requena, Garnacha-Campo de Borja y Lleida (que perciben cifras entre los 50.000 y los 100.000 visitantes).

Las épocas preferidas para practicar enoturismo son el otoño y la primavera, aunque agosto vuelve a ser, por segunda vez, uno de los meses de más afluencia

Los meses de septiembre (315.684) y octubre (334.430) siguen los primeros en el ranking general, debido en gran parte a la atracción de la temporada de vendimia, cuando el visitante puede disfrutar de propuestas especiales que no se dan en otros momentos del año.

En cuanto a la procedencia de los visitantes, el mercado nacional vuelve a estar muy por encima del internacional y presenta un crecimiento del 0,2%