Grupo Piñero: compromiso con la plantilla más allá de la relación laboral

Para el grupo turístico –integrado por firmas como el turoperador Soltour, los hoteles Bahia Principe Hotels & Resorts o el receptivo Coming2- es prioritario la contratación de personal local como vía para contribuir al desarrollo de las comunidades donde opera. De hecho, el 90% de la totalidad de su plantilla, integrada por más de 15.000 empleados, pertenece a los destinos donde están establecidas sus empresas.

Además de darles una oportunidad laboral, la compañía ha ido tomando medidas para mejorar su calidad de vida en el trabajo y ofrecerles opciones de desarrollo personal y profesional. Como parte de esa iniciativa, ha construido alojamientos para sus empleados en los destinos del Caribe -muchos de ellos se desplazan cientos de kilómetros desde su lugar de origen para incorporarse a su centro de trabajo- y hace tres años puso en marcha el programa denominado “Empresa saludable”, destinado a fomentar el bienestar físico, mental y social de los colaboradores y sus familias y promover entornos de trabajo saludables, según señala Antonia del Toro, directora de Responsabilidad Social Corporativa de la compañía.

Para la compañía turística es prioritario la contración de personal local y fomentar la realización personal y profesional de sus más de 15.000 empleados.

Se han ampliado y mejorado así los citados inmuebles, en algunos de ellos ahora disponen de más espacio propio y de áreas de esparcimiento. En la misma medida, se han modernizado las cocinas destinadas a los colaboradores, con mejor equipamiento e iluminación y se han introducido menús más saludables.

Las cifras nos dan una idea del empeño que Grupo Piñero ha puesto en esta mejora. En 2016, invirtió más de cuatro millones en adecuar los entornos de trabajo y las residencias de sus empleados de la división hotelera Bahia Principe Hotels & Resorts, y en 2017, el desembolso alcanzó los 2,3 millones de euros.

Se ha impulsado también la formación y se han puesto en marcha campañas sanitarias y prácticas saludables –con actividades como el yoga o programas de ayuda para quienes quieran dejar de fumar-, o el acompañamiento a los padres mediante programas de educación familiar -en casos de conflictividad en el hogar o problemas como el alcoholismo-, entre otras medidas. El objetivo es que todos los empleados puedan crecer profesional y personalmente dentro del grupo, señala la responsable de RSC.

La compañía ha realizado importantes inversiones para conseguir un entorno de trabajo saludable, con mejoras tanto en las residencias de los empleados como en las cocinas.

El factor humano es un elemento esencial en este grupo turístico desde que inició su actividad hace más de 40 años. “Está en el ADN del Grupo Piñero. Es una empresa familiar con unos valores muy marcados, que el propio presidente nos ha transmitido a todos”, afirma Antonia del Toro. Aunque no fue hasta 2014 cuando la sostenibilidad se integró en sus políticas de gestión empresarial y a partir de ese momento se estableció un sistema y una metodología de trabajo.

Compromiso integral

Por otro lado, la compañía se ha comprometido también a minimizar el impacto ambiental de su actividad y a contribuir a la preservación de la biodiversidad. Hace apenas un año se sumó como socio al Pacto Mundial de las Naciones Unidas.

Al mismo tiempo, el grupo turístico considera que debe ser un actor activo en el desarrollo sostenible de las comunidades locales donde opera y contribuir a mejorar la calidad de vida de la sociedad. En este sentido, colabora con entidades de estos países y destina ayudas a causas enfocadas en mejorar la vida de la infancia y la juventud.

Otra forma de contribuir a generar riqueza en estos países es consumir productos de proveedores locales, siempre que se pueda, y trabajar con distribuidores de la zona, según indica la directora de Responsabilidad Social Corporativa de la compañía.

Sin olvidarse de otros aspectos como la defensa activa de los derechos humanos y de los derechos del menor, así como la protección y el fomento de la cultura local.

En esta línea, el Grupo Piñero pondrá en marcha una línea de colaboración con el Museo de la Ballena de Samaná, una provincia situada en el norte de República Dominicana donde la firma española cuenta con cuatro hoteles. Este destino es conocido por la presencia de ballenas entre diciembre y abril, un gran atractivo para muchos turistas, y dicho centro es uno de los principales espacios de interés de la zona por la completa muestra que alberga sobre este cetáceo. La empresa española quiere contribuir a potenciar las visitas, mejorando las instalaciones, la zona donde se sitúa o los carteles que informan sobre su ubicación.

Pero en todos los casos, desde la compañía se considera esencial la implicación del personal y de los agentes de las sociedades locales. Creen que es importante que se sensibilicen también con los objetivos sociales y medioambientales del grupo turístico y los consideren como algo propio para aplicarlo en su entorno.

El Grupo Piñero colabora con entidades locales de los destinos en los que trabaja y destina ayudas a causas enfocadas en mejorar la vida de la infancia y la juventud.

Vídeo del Grupo Piñero sobre su política de compromiso con los trabajadores y la RSC.