Santander destino inteligente como laboratorio urbano

Santander se ha consolidado como referencia internacional en ciudades inteligentes. El reto ahora es consolidar la plataforma Santander Smart City, base para la gestión integral de la ciudad transformando los servicios municipales para mejorar su eficiencia. Éste es un proceso gradual a largo plazo que pasa por la incorporación de la tecnología de manera paulatina, añadiéndola a los pliegos de condiciones de los concursos públicos según se han ido convocando.

De este modo han ido aplicándola al ciclo del agua, identificando dónde tenían pérdidas en el suministro y facilitando sensores, de momento a 2.000 abonados, que les avisan de consumos desorbitados; al riego de parques y jardines con sensores de riego inteligente; y a la gestión de residuos, de nuevo con sensores que informan del llenado de los contenedores, del estado de las papeleras y del itinerario y actividad realizados por los vehículos de limpieza.

A todo ello se suma la gestión del alumbrado público, donde el cambio a tecnología LED se ha traducido en un ahorro del 80% del gasto energético municipal y un 35% de los costes de mantenimiento. Además el sistema permite gestionar cada punto de alumbrado de manera independiente. La misma eficiencia energética se ha aplicado a los edificios públicos, que ha supuesto una inversión de 2,4 millones de euros aportados por fondos propios y que se amortizarán en sólo unos años. La tecnología también se aplica a la gestión del tráfico y movilidad.

Miriam Díaz Herrera, concejala de Turismo, Comercio, Mercados y Relaciones Institucionales de Santander, en su presentación en el Encuentro sobre destinos turísticos inteligentes que se está celebrando esta semana en la UIMP.

Todos los datos proporcionados por esos sensores de internet de las cosas, hasta 12.000 instalados en tres años, según ha explicado la responsable de implantación del proyecto, Verónica Gutiérrez, “se integran, junto con los de los servicios municipales y fuentes externas, en esa plataforma de la ciudad en la nube. De esta manera que se genera inteligencia de ciudad para la toma de decisiones y mejora de los servicios a los ciudadanos, gestionándolos de manera más eficiente”.

Santander Smart Citizen

Ante esta transformación del destino a partir de la integración de los datos que, en palabras de la concejala, “nos ha permitido acceder a una realidad turística que desconocíamos”, la mayor dificultad, según ha reconocido Gutiérrez, “reside en la gestión del cambio más que en la aplicación de la tecnología disponible”.

Para ello, ha añadido, “esa tecnología también se pone a disposición de un nuevo modelo de relación con el ciudadano, proporcionándole una plataforma de participación, una herramienta para que reporte incidencias. Porque nos hemos dado cuenta que se aplica mucha tecnología para la prestación de servicios pero no enfocada al ciudadano. Por ello hemos creado Santander Smart Citizen, con una inversión de 6,67 millones de euros, de la que Red.es aporta el 60% a través de fondos FEDER y el Ayuntamiento el 40% restante”.

Esta inversión se ha traducido, entre otras iniciativas, en una tarjeta ciudadana para visitantes, turistas y ciudadanos; una app única de la ciudad de la que el usuario puede elegir en cada momento qué tiene a su disposición en ella y en un futuro cercano va a poder ser utilizada para pagar; un nuevo modelo de atención multicanal; terminales de satisfacción de todos los servicios; o el servicio del 010 a través de otros canales como las redes sociales.

Asimismo, 15 espacios interactivos se encargan de acercar la tecnología al usuario, en los que además puede recargar su móvil; o beacons para proporcionarle información de todos los servicios como nuevo canal de comunicación. “A través de un CRM ciudadano se le podrán ofrecer servicios más personalizados”. De este modo “el ciudadano se convierte en un experimentador más”.

Toda esta estrategia, como ha admitido Gutiérrez, “no permitirá gestionar la ciudad de manera automática, pero sí mejorar su gestión. Pero es un proceso gradual cuyos resultados no son fácilmente perceptibles por la ciudadanía, por lo que organizamos acciones de divulgación y horas de formación para los usuarios en el Enclave Pronillo, promovido por el Ayuntamiento y Telefónica con la colaboración de la Universidad de Cantabria, transparente y con datos en abierto”.