Los hoteles de Barcelona se recuperan pero no llegan a los niveles de 2017

En su primera rueda de prensa como nuevo presidente del Gremio de Hoteles de Barcelona, Jordi Mestre ha resaltado que este verano ha sido "relativamente bueno" en cuanto a ocupación, que se ha mantenido similar a la del año anterior, en un 90,4%, en precio medio, que ha aumentado un 3,9%, y en facturación, que ha crecido un 4,7%.

Sin embargo, Mestre ha lamentado que estos datos todavía están lejos de los alcanzados en el verano de 2017 --previo al referéndum por la independencia de Cataluña del 1 de octubre-- y suponen un 8% menos de precio y facturación que entonces, y ha lamentado que los turistas gasten menos que en 2017.

El problema de la seguridad

Mestre ha apuntado que hay asuntos extrahoteleros que les afectan y que este verano han vuelto a estar de actualidad, como la seguridad, con un verano marcado por "incidentes", y las huelgas en el Aeropuerto de Barcelona, que ponen en "riesgo" la imagen y la calidad del destino.

Ha celebrado el nombramiento de Albert Batlle como teniente de alcalde de Seguridad del Ayuntamiento de Barcelona y ha recordado que, junto a Foment del Treball y otros agentes, los hoteleros propusieron una serie de medidas para intentar atajar el problema, como la reforma del Código Penal, crear juzgados especiales de instrucción para la seguridad ciudadana e impulsar políticas de seguridad y prevención.

El presidente de los hoteleros barceloneses ha calificado las huelgas que se han producido en el Aeropuerto de Barcelona este verano de hecho "inadmisible que priva a la gente de su libertad de movimiento" y ha advertido de los "importantes competidores" que tiene Barcelona como destino turístico, tanto dentro como fuera de España.

Turismo en positivo

Durante la rueda de prensa, Mestre ha celebrado el "cambio de mensaje" del Ayuntamiento respecto a la actividad turística, ya que ha asegurado que se ha "revertido la situación y volvemos a hablar de turismo en positivo", y ha apostado por un trabajo conjunto entre sector público y privado para la promoción de la ciudad.

Tras las sentencias del pasado verano sobre el Plan Especial Urbanístico de Alojamientos Turísticos (PEUAT), Mestre ha dicho que ya se han reunido con el Ayuntamiento de Barcelona, donde han encontrado "una respuesta positiva para revisarlo", porque ha llegado el momento de concretar una respuesta "a las necesidades reales del sector hotelero en al ciudad".

La ocupación de los hoteles de Barcelona este verano ha sido similar a la del año anterior, por encima del 90%.

Ha dicho que tanto el Ayuntamiento como los hoteleros creen que la situación de la ciudad ha cambiado respecto a cuando se creó este plan hace cuatro años y ha asegurado que el problema viene dado, no por los hoteles y los edificios de apartamentos turísticos, sino por los pisos turísticos ilegales, ya que sus usuarios tiene una conducta diferente que la que tienen en un hotel.

El gremio apuesta por hacer un traspaso "de volumen de turismo a calidad de turismo", por lo que su propuesta para la reforma del PEUAT pasa por que, al reformar los hoteles, no pierdan habitaciones o por sustituir plazas de hoteles de menor calidad por otras de una calidad superior en el centro de Barcelona.

Mestre se ha mostrado optimista respecto a cómo continuará comportándose el turismo este año y en 2020, pese a que el sector se verá afectado por el Brexit y por la situación política en Cataluña y en España, además de otros factores como la quiebra de Thomas Cook, que, de una manera u otra, también afectará a Barcelona.