Alpitour sobre la turoperación: “una empresa tuvo problemas, no el modelo"
Publicada 15/10/19
- "La idea es conocer mejor al cliente, saber qué quiere y empezar a organizar mejor el producto que vendemos", plantea Burgio
- Es fundamental que las empresas del grupo dialoguen entre sí, dice Alpitour, pero buscando ser rentables en forma independiente
- Apostar a la innovación y al desarrollo tecnológico facilita el feedback con el cliente final
Gabriele Burgio, presidente y consejero delegado de Alpitour sostuvo que la quiebra de Thomas Cook no marca el fin de un modelo de negocio, pero sí plantea la necesidad de ser flexibles como empresa y de pensar en el cliente.
“Con las dudas que ha sembrado Thomas Cook hemos tenido miles de llamadas de bancos, proveedores, todos esperando que el modelo tenga un problema, mientras que yo he defendido y sigo pensando que es una empresa la que ha tenido el problema y no el modelo”, dijo Burgio al comenzar su conferencia en el Club Diario de Mallorca, en el marco del Foro Turismo+ 2019.
En una exposición de media hora el presidente y consejo delegado de Alpitur planteó la necesidad de invertir en tecnología, “de hacer un esfuerzo” por ir de la mano con el desarrollo tecnológico, principalmente para conocer al cliente que es, en definitiva, quien manda.
“Un grupo como el nuestro de casi 3.000 millones de facturación no conocía a su cliente final, porque la mentalidad de la turoperación siempre ha sido finalizada a las agencias. Ahora se está haciendo y está dando buenísimos resultados. La idea es conocer mejor al cliente, saber qué quiere y empezar a organizar mejor el producto que vendemos”, dijo Burgio, resaltando que esto “nos permite tener feedback, saber si el cliente está contento o no, y este dialogo, con la tecnología, se puede hacer mucho mejor y muchísimo más rentable para la empresa”.
El uso de tecnología, explicó, le ha permitido a Alpitour “trabajar con la flexibilidad”, fabricar lo que el cliente quiere, porque “el paquete de la semana ya no existe, el catálogo es un mundo que se está perdiendo”.
Así, también, se logró avanzar en la creación de precios dinámicos, porque “antes dábamos más premios a quien compraba al final y no a quien, comprometido, compraba con anticipación”. “Hemos construido el algoritmo que calcula los precios de las vacaciones utilizando varios conceptos para construir el precio: antelación a la fecha de salida, la velocidad con la que estamos llenando, qué están haciendo los competidores y las series históricas”, detalló.
Por último señaló que si bien el plan es que todas las líneas de negocio de Alpitour “hablen entre si”, lo que se busca es que cada una de las filiales del grupo “tenga que aguantar su vela, que sea competitiva en el mercado y que intente tener presión de mercado”, ya que “si fueran solo empresas que trabajan con el grupo, la sensación es que podrían perder la actividad”.
Para comentar, así como para ver ciertos contenidos de Hosteltur, inicia sesión o crea tu cuenta
Inicia sesiónEsta noticia no tiene comentarios.