South African Airways, al borde de la quiebra

La mayoría de las cancelaciones son trayectos nacionales, con rutas entre Johannesburgo, Ciudad del Cabo y Durban (las principales urbes del país), pero también hay una ruta internacional afectada que conectaba Johannesburgo y Múnich.

Las cancelaciones confirmadas se distribuyen, según un comunicado difundido este martes por SAA, entre el 20 y el 24 de enero.

South African Airways también aseguró que se va a reubicar a los pasajeros afectados y no descartó nuevas cancelaciones para los próximos días.

La noticia casi se esperaba en Sudáfrica desde este fin de semana, fecha en la que se vencía el plazo para que llegase desde el Gobierno una inyección prometida de capital de unos 2.000 millones de rands (unos 138 millones de dólares). De no producirse, los sindicatos ya habían advertido de que habría cancelaciones e incluso retrasos en el pago de los salarios.

Esos 138 millones de dólares, de momento, no han llegado y la situación tiene a la compañía bajo la amenaza de colapsar, lo que supondría la destrucción de unos 10.000 puestos de trabajo.

El ministro de Finanzas, Tito Mboweni, había afirmado en un encuentro con empresarios la semana pasada que se estaban buscando fuentes de capital adicionales para la aerolínea, en un país en el que las gigantescas deudas de las empresas públicas -tras años de corrupción y mala gestión- se han convertido en uno de los mayores riesgos para la economía nacional.

Con importantes problemas estructurales en sectores estratégicos como el de la generación de electricidad, un gasto fiscal muy elevado y un crecimiento muy débil (estimado en el 0,5% para 2019), Sudáfrica, pese a ser la economía más desarrollada del continente, se arriesga a caer este año hasta el estatus de bono basura.