Cataluña: nuevo megacongreso para 2021 y luz verde a hogares compartidos

Cataluña ocupó muchas portadas en 2019, pero no por el turismo ¿Qué balance hacen del ejercicio?

Positivo. Tenemos indicadores que lo confirman. Nuestro plan estratégico pone el énfasis en la descentralización, la desestacionalización, la diversificación de la oferta y el aumento del gasto turístico. Y en 2019 hemos logrado un crecimiento del gasto aproximado del 4,8% y un aumento del 5,3% en el gasto diario. También sube un 4,4% el número de llegadas por vía aérea.

¿Cómo ha afectado entonces la tensión que ha habido en la calle tras conocerse la sentencia del Procés?

Si vemos las cifras de octubre, Cataluña registró un crecimiento del 9,7% en gasto turístico, mientras que el aumento medio en España fue del 2,5%. Y por lo que respecta a llegadas de turistas, el crecimiento en Cataluña fue del 1,6%, mientras que en el conjunto de España se observó una caída del 0,3%. Esto fue en octubre, a pesar de todo la repercusión que decían que tendríamos.

¿Afectaron los sucesos de octubre a la captación de congresos para próximos años?

Barcelona acogerá 33 congresos de gran volumen, de más de un millar de delegados, para 2020, entre ellos el Mobile World Congresss (MWC), que atrae cerca de 100.000 visitantes. Y hemos sido capaces de atraer el evento Integrated Systems Europe (ISE), de 80.000 visitantes, un congreso dedicado a las tecnologías de audio y vídeo, que ahora se celebra en Amsterdam y que a partir de 2021 llegará a Barcelona. Ya estamos trabajando ahora para que el ISE sea un éxito, tal como lo es el MWC. Yo me quedo con esto, con que seamos capaces de retener y atraer estos grandes congresos. Y no solo esto, seguimos creciendo.

"Barcelona acogerá 33 grandes congresos en 2020 y hemos sido capaces de atraer otro gran evento, de 80.000 visitantes, que llegará a partir de 2021"

¿A qué se refiere?

A cómo estamos trabajando la colaboración público-privada y la colaboración entre administraciones. Por ejemplo, nos hemos puesto de acuerdo con Fira de Barcelona para el incremento del espacio ferial. Estamos compitiendo en la primera división de congresos europeos. Esto da una idea de lo involucrados que estamos todos para seguir tirando adelante este modelo y de hecho nos estamos planteando nuevos salones más innovadores para posicionarnos en la economía 4.0 vinculada al comercio y al turismo. Nos estamos adaptando a los nuevos tiempos en todos los formatos.

¿Y qué ha pasado con los viajes del Imserso, ha habido una caída de las contrataciones?

Hay dos lotes: uno que va en el último trimestre del año y otro en el primero del ejercicio. Nosotros siempre hemos tenido la punta de reservas más focalizadas en el período enero-marzo. Además, debemos considerar la dimensión de la oferta.

¿Por qué lo dice?

En primer lugar, llegó tarde la contratación debido a los problemas de reclamaciones y el lío judicial entre hoteleros y turoperadores. De hecho, los hoteleros catalanes tienen una visión no muy favorable a la operación del Imserso porque los precios de contratación son extremadamente contenidos y bajos, lo que no gusta. ¿Todo esto en qué se tradujo? Pues que en el mes de noviembre sólo teníamos un hotel programando Imserso en la Costa Dorada, algunos más en la Costa Brava. En cambio, para el primer trimestre de 2020 esperamos que los volúmenes sean superiores: en el caso de Costa Dorada habrá seis hoteles, mientras que la Costa Brava se mantendrá en una tónica similar a la que tenía.

"Estimamos que Cataluña podría llegar a los 28 millones de turistas hacia el año 2030. El turismo va a crecer sí o sí debido a las tendencias globales. Por tanto, decidamos cómo, con qué turistas, de qué mercados...”

Àngels Chacón fue nombrada consejera de Empresa de la Generalitat en mayo de 2018. Es licenciada en Derecho y tiene formación especializada en comercio exterior. Fue directora general de Industria de la Generalitat.

Antes ha hecho referencia al Plan Estratégico de Turismo. ¿Qué resultados esperan lograr para los próximos ejercicios?

A nivel mundial hay un crecimiento del turismo, en viajes internacionales y actividades. Siguiendo esa tendencia, prevemos que Cataluña llegará a los 21 millones de visitantes hacia el año 2022. Y en 2030 podríamos llegar a los 28 millones. En 2018, Cataluña recibió 19 millones de turistas extranjeros. Por tanto, ya que sí o sí va a crecer el número de turistas, vamos a decidir cómo, qué turistas, de qué mercados.

¿Y eso traducido en cifras?

En 2022 esperamos llegar a un gasto diario por turista de 190 euros. Y el objetivo es que el 37% de los viajeros nos visiten fuera de la temporada de verano. Igualmente queremos aumentar un 10% de los turistas alojados en destinos de interior. En cualquier caso, dada la tendencia irreversible del crecimiento turístico a nivel global, nos interesa un modelo sostenible desde el punto de vista del territorio, la sociedad y el medioambiente. Y lo estamos haciendo a través de muchas iniciativas, una de ellas por ejemplo es el nuevo Cluster TIC de Turismo, que se puso en marcha en el verano de 2019. Está formado por empresas y startups que tienen modelos de negocio híbridos entre tecnología y turismo, junto con universidades y centros tecnológicos.

Antes se ha referido a las tendencias de crecimiento del turismo a nivel mundial. Precisamente Barcelona se ha convertido en una marca a nivel global, pero existen otras marcas turísticas de Cataluña que gozan de reconocimiento internacional: Costa Brava, Costa Daurada, Salou, Lloret de Mar, Sitges… ¿Cómo encajar este puzle de marcas para que todos salgan ganando?

Primero debemos tener claro si estamos a favor del turismo como sector o no. Hay opciones políticas que no están a favor del turismo. Desde esta Consejería lo estamos. Para mí, una industria que representa más del 12% del PIB y un 14% de la ocupación en Cataluña es un sector a proteger, en lugar de infravalorar y querer reducir. Segundo: ¿qué tipo de turismo? Para esto hacemos el Plan Estratégico y el Plan de Marketing. Y a partir de aquí, iremos integrando estrategias. Si hablamos de nuevos hábitos de consumo, tienes que dar experiencias.

Es decir...

Los turistas deben asociar experiencias a marcas, pero estamos trabajando el producto deportivo, familiar, gastronómico, etc, porque la gente quiere saber qué le ofrecen, qué sentirá. Es cierto que el asunto de las marcas turísticas ha generado debate históricamente, y es un asunto sensible, pero en la Consejería creemos que hemos encontrado un modelo donde todo el mundo se encuentra adecuadamente encajado. Es un modelo de geometría variable: hay mercados muy lejanos donde la referencia a Barcelona es un factor extraordinariamente útil, y hay otros mercados más próximos que pueden identificar clarísimamente otras marcas como Costa Brava o Costa Daurada. Cuanto más te alejas de Cataluña, menos puedes utilizar marcas locales y más tienes que apoyarte en las experiencias que ofreces. Si vas a promocionarte entre influencers de Japón, por ejemplo, como me ocurrió hace unas semanas, les vendes que eres capaces de conjugar playa, con una gran ciudad, gastronomía, cultura, etc.

En suma, ¿las marcas deben ser flexibles?

Claro. En resumen, se trata de exponer muy claro qué diversidad de experiencias pueden vivir en Cataluña. En cualquier caso, hemos desplegado un sistema integrado de marketing mediante el cual marcas como Costa Brava, Costa Daurada, etc, son partícipes de la gestión global.

"Hay opciones políticas que no están a favor del turismo. Para mí, una industria que representa el 12% del PIB y el 14% del empleo en Cataluña es un sector a proteger"

Àngels Chacón, con los responsables de las delegaciones de la Agencia Catalana de Turismo que operan en diferentes países del mundo.

Pasemos ahora a hablar de la ordenación de la oferta turística. Hace tres años que se está anunciando en Cataluña una nueva normativa para regular las viviendas compartidas de uso turístico. Parece ser que en 2020 esta regulación ya verá la luz… ¿Qué principales novedades veremos?

En primer lugar, debo decir que hay gente que nos discute la mayor, en el sentido de que esto no debería estar regulado. Nos encontramos ante una realidad que tenemos contabilizada: en Cataluña hay un total de 14.000 anuncios de viviendas compartidas de uso turístico, de las cuales 9.000 se localizan en Barcelona. De las grandes plataformas que monitorizamos, solo es Airbnb quien está comercializando este tipo de oferta. Pienso que es un ejercicio de responsabilidad regularlo.

¿Cómo?

Desde el año 2011, en Cataluña ya tenemos regulado el alquiler de viviendas enteras de uso turístico. La nueva normativa introducirá el concepto de “hogar compartido”, es decir, un domicilio habitual donde el residente alquila una parte, pero sigue viviendo allí.

¿Puede concretarlo un poco más?

El diseño de la normativa, pendiente de aprobación, es el siguiente: la persona que alquila tiene que vivir en ese domicilio, es decir, no podrás alquilar una habitación en un lugar en el que no vivas. Esa persona podrá ser el propietario de esa vivienda que vive ahí o bien el inquilino -que paga un alquiler- y cuenta con la autorización del propietario para realizar esa actividad. La persona que habita en esa casa podrá alquilar hasta un máximo de cuatro plazas. Deberá tener la célula de habitabilidad y debe residir de manera habitual. Sabemos que no podemos introducir muchos más condicionantes porque en otras partes, cuando han intentado introducir según qué tipo de exigencia, esa normativa decae porque se presentan recursos, apelaciones a directivas europeas de servicios, etc.

"La nueva normativa de viviendas compartidas permitirá disponer una modalidad más de alojamiento turístico regulado, bajo control"

Entonces ¿la persona que reside en una casa y recibe a un turista al que alquila una habitación, también pasará la noche allí?

Sí, claro. Es tu casa, que compartes. Debes vivir allí. Lo que no permitiremos es que alguien, propietario de varias viviendas, despliegue una especie de red de pensiones, alquilando sus habitaciones. Eso no. Debes residir donde haya la vivienda compartida.

¿Y para poner en marcha esta actividad, qué se requerirá?

La presentación de una declaración responsable. Pero esto no vendrá regulado por el decreto, sino por la ley catalana que establece cómo se accede a una actividad económica.

¿Y qué capacidad de decisión tendrán los municipios para establecer si quieren o no quieren este tipo de oferta?

Los ayuntamientos tendrán la misma facultad que tienen con las viviendas de uso turístico reguladas desde 2011. De hecho, la nueva normativa no entrará en vigor el día que se apruebe el decreto, sino pasará un año para dar tiempo a completar una normativa específica -a modo de ordenanza- que acabe de modular algunas de las características del mínimo que determinaremos. Por ejemplo, a partir de las competencias municipales en temas de carácter urbanístico, los ayuntamientos podrán establecer zonas -fijando exclusiones o topes máximos- para las viviendas compartidas.

Por tanto ¿los Ayuntamientos podrán poner límites a este fenómeno?

Sí. Igual. Porque será una modalidad más de alojamiento regulado. Precisamente por eso hemos querido situar la vivienda compartida como una modalidad más. Porque sino estas cosas, al final, no tienen la misma capacidad de ser gobernadas.

Sin embargo, la Confederación Empresarial de Hostelería de Cataluña ha dicho que las viviendas compartidas, aunque se regulen, se acabarán convirtiendo en pensiones fraudulentas…

Insisto: tenemos una realidad que está ahí. Ahora tenemos 14.000 viviendas compartidas. De aquí a unos años podríamos tener 20.000, por decir una cifra. Pues hay que controlar este fenómeno. Si hay picaresca, se perseguirá. Y con la nueva normativa podremos hacerlo mejor. No tendremos un vacío legal como hasta ahora.

En cualquier caso, el boom de los pisos turísticos es uno de los fenómenos que ha contribuido a generar una imagen negativa del sector. Se culpa al turismo, por ejemplo, del encarecimiento de la vivienda. ¿Qué opina sobre esto?

Nosotros defendemos al sector turístico por la riqueza que genera, los puestos de trabajo que implica y el intercambio con otras sociedades y culturas. Y hemos definido de manera muy clara qué modelo turístico queremos. Un modelo sostenible y de calidad que se focalice en el gasto generado, no tanto en el número de turistas. Ese modelo es el que defendemos, sin complejos. No compartimos en absoluto la visión de quienes atribuyen al turismo todas las plagas de Egipto. Además, el turismo es clave para potenciar y dar a conocer otra realidad de Cataluña más allá de Barcelona.

A pesar de todo eso, hay movimientos que propugnan el decrecimiento turístico ¿Cómo contrarrestar ese discurso anti-turístico que cala en la sociedad?

Poniendo en valor justamente los beneficios que nos aporta el turismo: ingresos, puestos de trabajo y la oportunidad de conocer Cataluña de manera sostenible. Podemos debatir sobre los inconvenientes que existen en una parte del territorio y estar de acuerdo que esos casos no son el mejor de los modelos que queremos. Pero nosotros decimos muy claro qué modelo de turismo queremos, hemos definido una hoja de ruta y las herramientas.

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Esta entrevista ha sido publicada en la revista HOSTELTUR de enero-febrero de 2020, que puede descargarse como PDF haciendo click en el siguiente botón