Cómo será el día después en el sector alojativo

Los expertos apuntan al 7 de junio como fecha para, como ha explicado Sanjuán, “la apertura paulatina de los hoteles, aunque no abrirán todos. Las cadenas con varios en un mismo destino en principio abrirán uno en cada lugar porque a lo mejor lo que no tenemos es clientes”. Lo cierto es que los empresarios ya se han concienciado de que “este año todos estaremos en pérdidas. Lo más importante es dotar de liquidez a las empresas”.

Todo dependerá, en palabras de Preciados, de cuatro factores: “De cuándo se produzca la apertura del estado de alarma; cuándo se recupere de manera efectiva la movilidad; cuándo recobremos la fiabilidad como destino seguro de cara a la demanda; y cuándo se recupere la demanda de tal manera que genere los suficientes ingresos para reabrir los hoteles”.

Incluso en estas circunstancias habrá una determinada oferta alojativa que sufrirá menos, según ha subrayado Sanjuán. Por ejemplo “los hoteles pequeños urbanos, aparthoteles y apartamentos turísticos donde el cliente no va a tener que cruzarse con otros huéspedes. También los enfocados a menores de 40 años, que son los que muestran menos miedo a la hora de plantearse viajar. Los hoteles más grandes o los que impliquen tener que coger un avión para llegar son los que van a sufrir más hasta que no haya vacuna”.

De izq. a dcha y de arriba a abajo, Rafael Rivelles, de Tarkett; Carlos Díez de la Lastra, de Les Roches Marbella; Javier Suárez, del Hotel Princesa Yaiza; José Ángel Preciados, de Ilunion Hotels; y Juan Carlos Sanjuán, de Casual Hoteles.

Y es que ésa, según Preciados, “va a ser la prioridad esta temporada. Estamos a la espera de que la Administración establezca los protocolos de seguridad que vamos a tener que seguir en el diseño de los flujos turísticos en nuestros hoteles, distancias mínimas, etc. Y el sector volverá a demostrar su capacidad de adaptación”.

“Estamos en medio de una tormenta tremenda, en unas circunstancias lamentables, pero dentro de un año, cuando hayamos pasado esta experiencia traumática, habremos aprendido a funcionar de otra manera, con la tecnología y la seguridad sanitaria como baluartes”, como ha indicado Preciados

Nuevo paradigma

Lo cierto es que, según ha reconocido Javier Suárez, director general del Hotel Princesa Yaiza, “estamos ante un nuevo paradigma social y económico que afecta al turismo, por lo que el sector, tal y como lo conocíamos hasta ahora, basado en la libertad de movimientos y en la globalización, va a cambiar radicalmente”. Así, aparecen “nuevos conceptos, como el de higienización; se redefinirán muchos de los servicios, como el bufé; y se aplicarán nuevas normativas”.

Por ello ha citado tres medidas cuya aplicación considera necesaria:

- Promover entre todos los agentes del sector “un plan de rescate similar al que se aplicó a la banca en 2009”, como ya han solicitado otras voces según ha publicado HOSTELTUR noticias de turismo en Exceltur eleva a más de 124.000 M € las pérdidas en turismo por la COVID-19.

- “La apertura turística deberá hacerse de manera coordinada con Europa porque el turismo depende de la movilidad internacional. El mercado nacional y local no pueden suplir los 15 millones de turistas que ha recibido Canarias en el último año”.

- “Deberán adoptarse nuevas medidas en los aeropuertos, como ya se hizo tras el 11-S, y también en las entradas de los hoteles. Pero esas medidas tienen un coste y no sé si la cadena de valor lo va a poder soportar”.

Oportunidades para el turismo español

No obstante, en medio de un año definido por Preciados como “totalmente destrozado, hay que aguantar el tirón del negocio porque todo es solucionable y todos tenemos que dar ejemplo de ponernos a trabajar para salir de esta”. Una situación muy complicada en la que sin embargo se vislumbran oportunidades, como “la capacidad sanitaria del país, que ha demostrado ser una de sus grandes fortalezas por su imagen de solvencia y seguridad a pesar de haber sido uno de los más afectados, pero también en el ámbito de la logística y de producto, para recuperar la confianza del cliente”.

Además Preciados también ha destacado que “habrá otros destinos que se van a recuperar más tarde que España, como Asia, norte de África, Caribe o Latinoamérica, por no estar tan bien dotados. Por lo que nuestro país debe saber gestionar y ofrecer esa imagen de seguridad como fortaleza porque otros destinos tardarán más en poder hacerlo”.

Es una cuestión de, como ha afirmado Suárez, “recuperar la confianza de la demanda. Tras el 11-S se generalizó el miedo a volar pero se terminó recuperando y con la confianza pasará igual, pero es importante volver a la normalidad”. Una normalidad en la que Rafael Rivelles, director de Producto de Tarkett, ha asegurado que “la gestión del miedo es clave. La salubridad y desinfección de los hoteles van a pesar a la hora de elegir establecimiento, que cada vez más van a apostar por aplicar estándares sanitarios a su diseño y por comunicárselo debidamente al cliente. Esta tendencia gana importancia entre alojamientos y destinos”.

En este sentido José Ángel Preciados apuesta por “incorporar al sector todo lo que está haciendo la competencia, incluso en otros ámbitos como en hospitales, turoperadores, aerolíneas, con el objetivo de trasladar al cliente el mejor servicio posible porque es lo que nos va a exigir, por encima de las inversiones a las que nos obligue la legislación”.

Cambio radical una vez que haya solución

Porque, en opinión de Sanjuán, “una vez que haya solución a la pandemia, ya sea en forma de vacuna o tratamiento, se va a producir un cambio radical en la demanda, tan rápido como la caída. Lo que está claro es que tendremos que aprender a convivir con ello”.

Carlos Díez de la Lastra, director general de Les Roches Marbella y moderador del debate organizado por el Grupo Vía, ha incidido en los primeros brotes verdes para la industria: “El bajo precio del petróleo y las ayudas del Gobierno, que facilitarán que las empresas puedan operar por debajo de costes”. Porque, según sus propias palabras, “cuanto más rápida sea la recuperación, más confianza generará”.

Preciados, por su parte, ha pedido a las empresas “no frenar los pagos a proveedores, refinanciarlos o renegociarlos pero no pararlos para no provocar más dramas en la sociedad, porque hay muchos sectores que dependen del turístico. En Ilunion continuamos con nuestras inversiones previstas en obras e incluso acentuando las tecnológicas”.

Y es que, ha añadido, “es el momento de que los responsables de las empresas demos la cara y cojamos el liderazgo de los equipos para asegurar la estabilidad de todos los puestos de trabajo. Nuestros 1.200 empleados volverán con una velocidad u otra, pero no vamos a prescindir de ninguno porque son nuestro elemento diferencial”.

Suárez y Sanjuán han apostado por la formación de los equipos durante este parón “para estar preparados para los nuevos escenarios que vienen” (Meliá formará a todos sus empleados durante la crisis sanitaria); mientras Sanjuán ha recordado el papel que juega el turismo como “eje vertebral de la economía española, por lo que la Administración no lo puede dejar caer porque si no el país se iría a la quiebra”. Además, ha concluido Díez de la Lastra, “si el turismo funciona bien ejerce de multiplicador de la confianza”.