"Habrá concentraciones en el sector hotelero y venta de activos"

Punto para España

Según apuntó Bruno Hallé, la COVID-19 va a generar para España, de nuevo, la sensación de destino refugio que ya se generó hace unos años con la inestabilidad del norte de África y los destinos de la ribera mediterránea. "Aunque hoy la marca España tiene ciertas dificultades de posicionamiento por la gestión de la pandemia en el país", aseguró. Al respecto, puede verse el informe de Mabrian Technoliges publicado por HOSTELTUR, La percepción de España como destino seguro se hunde.

Sin embargo, Hallé considera que frente a los destinos de la orilla mediterránea, "va a ser más competitivo venir a España", sobre todo por la seguridad sanitaria. Eso sí, cuando se abran las rutas aéreas. Entonces, "dará más confianza España que Túnez".

Operaciones en unidades y no en carteras

Según el experto, sigue habiendo "mucho apetito por entrar en el sector hotelero español entre los fondos". Y recordó cómo en 2017 las transacciones habían sido de 5.000 millones de euros, gracias a las operaciones de Blackstone sobre HIP y de éste sobre la cartera de Hispania posteriormente, en 2018.

Para este año y el año que viene, a pesar de la situación, "seguirán las llamadas de los inversores", asegura. "El mensaje que les transmitimos es diferente al de 2008. Entonces la crisis era financiera y muchos activos acabaron en manos de bancos, entonces se vendieron carteras completas de hoteles o cadenas, a precios baratos, por debajo de mercado porque los bancos se los querían quitar de encima", recuerda.

En cambio, ahora venimos de unos años 2017, 18 y 19 donde el sector hotelero "se ha reposicionado muy bien, ha invertido muy bien, tenemos una planta hotelera magnífica y han sido años de bonanza con más de 80 millones de turistas en España"

Esto "nos ha permitido tener caja, y permite en cierto momento cerrar los hoteles como está pasando, pero la dificultad es la visibilidad, qué visibilidad tenemos a futuro, hasta cuándo hemos de aguantar con el hotel cerrado". Es cierto que parte del sector hotelero habrá recurrido a los bancos y a los créditos ICO para "conseguir oxígeno", pero eso no garantiza el futuro, ya que "no sabemos cuándo podremos reabrir los hoteles".

Hay interés y habrá ventas, dice Hallé, pero "no vamos a ver momentos de venta de carteras, ventas masivas de grupos hoteleros porque no va a haber necesidad, se van a vender unidades cuando se necesite cash flow, cuando ya no tengan líneas de financiación, sacarán al mercado hoteles a la venta para captar tesorería... veremos más transacciones a este nivel hasta que podamos recuperar una curva operativa de gestión hotelera razonable que nos pueda permitir alimentar la caja de la cuenta de explotación", reflexiona.

¿Y en cuanto a la recuperación? "No será ni en V ni U corta, y esperemos que no sea en L", explica.
"Es muy importante controlar la tesorería, los gastos, aguantar, renegociar alquileres, alargarlos, aplazar pagos en la medida que se pueda, aguantar y fidelizar personal en la medida que se pueda, mantener los ERTE para después estado de alarma, dar salida a los fijos discontinuos... es momento de estar bien asesorado en consultoría hotelera y jurídica", añade.

Asegura que cabe esperar un descenso del valor de algunos activos en torno al 15 o al 30%, según sus ubicaciones. Bruno Hallé considera que no es buen momento para vender: "Sólo venderá el que le apriete el zapato. Si te falta tesorería tendrás que ir con líneas de crédito o tendrás que buscar financiación alternativa, como la venta de activos. Por supuesto, el mejor momento para vender un activo es cuando está entrando en bajada de rentabilidad, entonces es buen momento para vender pero hoy estas previsiones no sirven. Es necesario replantearlo absolutamente todo".

La concentración que viene

Bruno Hallé considera que seguramente, en un año o año y medio, también se verán integraciones en el sector hotelero. "Concentración sí que veo, ya hablamos con varias compañías que tienen interés en fusionarse para ser más fuertes, reducir costes y mejorar servicios". Es algo que el experto considera que traerá también la "nueva normalidad", la idea de "trabajar más juntos, compartir más información, es algo que nos está enseñando esta crisis. Al sector hotelero le ha costado mucho. Ha habido un cambio generacional en los últimos 10 años que ha empezado a hacerlo posible, pero todavía queda un camino importante por recorrer".

Las integraciones que veremos "serán de grupos medianos de entre 8 y 10 hoteles en propiedad, con otros 8 o 10 en alquiler, que se integrarán para posicionarse en el Top 15 del sector"

Según el experto, también en esto de las integraciones cuenta el ADN: "serán operaciones que tendrán lugar más en grupos apersonales, sin ADN, o sea, grupos hoteleros de tercera generación difícilmente se van a fusionar con otros iguales, con 10, 20 hoteles, porque importa su ADN, por la personalidad de los presidentes y propietarios... eso costará más. Pero hay una cantidad de grupos medianos que no tienen ambición de ADN y que ven posibilidad de integrarse".

También ve claro que habrá "hoteles pequeños integrándose en cadenas, porque ellos no van a poder soportar algunos servicios centrales necesarios, y no sólo van a integrarse en cadenas hoteleras al uso sino también en grupos de comercialización. Esa será una línea de crecimiento muy importante".

Y habrá también una nueva visión, que algunos ya han empezado en los últimos años, y que va a relanzarse: "hay grupos interesantes que van a aprovechar esta nueva situación para dar un salto muy significativo, como lo que está haciendo Abel Matutes en Palladim con Bless, Ushuaïa... Es una nueva visión del negocio que recobrará todo su sentido tras la crisis".

Bruno Hallé, en la masterclass de HTSI.

El papel de la banca

Las crisis son crisis, pero no tienen por qué parecerse en todo. Hallé recuerda que la crisis de 2008 fue financiera, mientras que ahora es sanitaria, operativa porque muchos hoteles están cerrados, legamente, todos. "El papel de la banca es distinto en esta situación, viene muy saneada, tiene tesorería para apoyar a las empresas con las líneas ICO por ejemplo". Aunque, destaca, "el oxígeno dura lo que dura, no sabemos hasta cuándo tendremos que aguantar".

Destaca que también en esa ocasión parece que habrá entrada de tesorería desde el Banco Central europeo, y que la Administración ha puesto sobre la mesa medidas para aliviar los alquileres, derivar pagos de rentas a futuro... "aunque esto genera un problema para el propietario, en una especie de efecto dominó". De nuevo, el gran problema es "la falta de ventana para saber hasta cuándo durará esta situación".

Incerteza sobre las nuevas normativas

Algunos destinos, algunos hoteles, ya se están preparando para las nuevas exigencias higiénicas y sanitarias post COVID-19. Pero... ¿qué nuevas normativas? "No sabemos cuáles nos van a implantar para ofrecer el servicio en restaurantes, hoteles... para redimensionar espacios, o poner mamparas, o reducir el número de personas en comedores... no sabemos nada, estamos viendo vídeos de otros países como China, pero no sabemos si son esos ejemplos los que queremos para nosotros o si nos van a servir".

En este sentido, ver: Aquí la industria turística. ¿Hay alguien al otro lado?

La externalización

Según Bruno Hallé, la externalización de servicios se ha convertido en importante para muchas empresas y va a serlo cada vez más: "y más ahora, cuando se valorará más que nunca la profesionalidad de los equipos en todas las áreas, en revenue, en house keeping... le veo un futuro positivo".

Incertidumbre y capacidad de gasto

La incertidumbre de este momento lo está complicando todo, también la renegociación de contratos entre operadores y hoteles, que los están negociando pero "no se están firmando, porque no sabemos cuándo vamos a volver a tener ingresos en los hoteles, ni qué tipo de ingresos".

Y recuerda que España depende de la demanda internacional en un 55-60%, que "podemos confiar en la demanda nacional pero veremos qué capacidad de gasto tenemos". Esta demanda doméstica "al final cubrirá cierto número de pernoctaciones pero no llegará a las de 2017, 18 y 19, con más de 80 millones de turistas en España".

Hallé considera que hablar de destinos o de productos... "Es elucubrar". Parece que "los urbanos van a aguantar mejor, porque será difícil ir a la playa una semana, será difícil el transporte, no sabemos cuándo las aerolíneas retomarán su actividad... en Canarias y Baleares todo será más complicado por la dependencia del aéreo".

Puede escuchar a Bruno Hallé en este vídeo de la masterclass en HTSI: