Tres estrategias de precios ante la reapertura de los hoteles
El mercado nacional no será suficiente para asegurar su rentabilidad
Publicada 19/05/20- Herrero distingue entre las políticas kamikaze, con precios por debajo de la competencia; modelo conservador, sobre la media; y el "chulito"
- Los precios por habitación hotelera caerán en los próximos meses inevitablemente entre un 15% y un 20%, con la mayor flexibilidad posible
- Herrero ha alertado de decisiones políticas que sitúan en una posición de debilidad a España como potencia turística frente a otros destinos
Chema Herrero, fundador y CEO de Bedsrevenue.com y profesor de Revenue Management en el Master de Dirección Hotelera de la Escuela de Negocios Turísticos FORST, ha expuesto las tres estrategias de precios que pueden adoptar los establecimientos ante su reapertura, que “será limitada porque no todos abrirán”. En primer lugar, las “políticas kamikaze, con ofertas de precio por debajo de la media de la competencia. Son casos muy excepcionales, de centros hoteleros que necesitan ingresos y liquidez”. Sin embargo habrá más ejemplos del modelo “conservador”, que situarán sus precios sobre la media de la competencia. Y un tercer tipo, denominado “chulito”, que se “equivocará porque no podrá competir como si no hubiera pasado nada, aplicando los mismos precios que antes de marzo de 2020”.
La situación de incertidumbre que vive el sector turístico se concretará en una caída de los precios por habitación hotelera que oscilará entre un 15% y un 20% durante los próximos meses, según ha indicado Herrero en su ponencia titulada “Revenue en tiempos de coronavirus”, en el marco del programa “Píldoras de conocimiento para afrontar los nuevos retos tras el COVID-19”, impulsado por Turismo de la Comunidad Valenciana.
Siempre que los establecimientos decidan abrir sus instalaciones, una decisión que, en palabras del experto, “debemos meditar con datos claros, elementos que hoy no tenemos, que estamos a expensas de cambios normativos casi a diario. De lo que no tengo dudas es de que si no hay apertura y movilidad del cliente internacional, no será rentable en la mayoría de los casos”.
En su opinión, el mercado nacional puede que no sea suficiente para sostener los negocios en términos de rentabilidad durante estos meses, y más si lo comparamos con datos históricos de otras crisis como en 2007 y 2008: “Casi cuatro millones de personas en el paro pueden decirnos a qué dedicarán sus vacaciones, como en la anterior crisis, a irse al pueblo de sus padres, a buscar otras alternativas diferentes”.
El profesor de la Escuela de Negocios Turísticos FORST ha avanzado que los establecimientos que decidan reabrir tendrán que enfrentarse a una inevitable bajada de precios, y a modelos de flexibilización con su cliente como las políticas de cancelación sin coste de sus reservas.
En este sentido ha subrayado que “los datos de las reservas de diversos hoteles que hemos analizado sitúan la bajada de precios entre un 12% en el mes de julio y algo mayor, hasta el 17%, en agosto”. Aunque ha reconocido que es pronto, porque no se sabe cómo va a reaccionar la oferta ni la demanda de los hoteles urbanos ni de los vacacionales.
La competencia de Portugal y Grecia
Herrero ha alertado ante determinadas decisiones políticas que sitúan en una posición de debilidad a España como potencia turística frente a otros destinos, especialmente Portugal y su región del Algarve o Grecia, como ya adelantó HOSTELTUR noticias de turismo en Cuarentena para viajeros del extranjero durante el estado de alarma.
Según Chema Herrero, “hay operadores que se inclinan hacia Grecia o Portugal, que ven más seguros y con decisiones más concretas”. Las búsquedas y reservas se están centrando en estos países, superando los niveles de otros años
Ojo con los sellos de seguridad
El consejo de Herrero pasa por tomar decisiones en base a datos concretos, analizar las tendencias y aplicar en función de decisiones ciertas, no sujetas a fake news que se prodigan en el sector.
Y ha puesto como ejemplo la proliferación de sellos de calidad en referencia a las garantías sanitarias: “Lo más prudente es esperar a que haya un solo sello de seguridad que sea global, no todos éstos que están multiplicándose y que cambian cada día. Y que no haga referencia al COVID-19 Free porque eso no se puede asegurar, sino que se refiera al seguimiento de los protocolos de limpieza, higiene y salud”.
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