El turismo de cruceros creció en España un 27,7 por ciento en 2002, hasta los 2,67 millones de viajeros

El turismo de cruceros creció en España el pasado año un 27,7 por ciento, favorecido fundamentalmente por la crisis turística iniciada a raíz de los atentados del 11 de septiembre, que afectaron en gran medida al transporte aéreo. Así, en 2002 unos 2,67 millones de viajeros participaron en los 2.881 cruceros organizados en España, cuyos puertos registraron un incremento del tráfico de buques-crucero del 10,7 por ciento, según datos provisionales ofrecidos por Puertos del Estado. A pesar de que algunos puertos del Norte peninsular han sufrido un ligero descenso en la actividad por la crisis internacional, el movimiento de cruceros sigue en aumento, como demuestra el hecho de que puertos como Barcelona, Vigo, Bilbao, Bahía de Cádiz o Valencia hayan superado con creces las cifras registradas en 2001, con ocupaciones cercanas al cien por cien durante el pasado verano. Algunas de estas instalaciones registraron récords en escalas y pasajeros, como es el caso de Barcelona, con 843.000 pasajeros y 633 escalas, así como de Málaga (250 escalas y 162.000 pasajeros) o Vigo (84 escalas y 76.000 turistas). Las repercusiones de la crisis en el turismo de cruceros se ha reflejado también en las rutas, ya que los viajeros eligen ahora las zonas más próximas a sus lugares de origen, siendo el Caribe el destino preferido por los estadounidenses, donde representan el 44 por ciento del mercado, y el Mediterráneo por los europeos, donde ocupan el 14 por ciento del mercado. Dentro de los 20 principales destinos del mundo, Barcelona ocupa el puesto número 12 y Baleares el 14, lo que, según Puertos del Estado, demuestra que España tiene posibilidades de convertirse en "uno de los principales países emisores cruceristas". Además, el Mediterráneo registra ahora cerca de siete millones de escalas, el doble que hace una década, y acapara ya el 20 por ciento del mercado mundial de cruceros, debido fundamentalmente a la amplitud estacional y geográfica de los itinerarios. Los puertos mediterráneos esperan seguir manteniendo estos positivos resultados a lo largo del presente año, debido tanto a los nuevos buques que surcarán sus aguas --más rápidos (30 nudos) y polivalentes-- y a las estrategias de los operadores para incrementar flota y ganar mercado mediante la absorción de pequeñas compañías. Hay que contar también con los mercados emergentes del Adriático y el Mediterráneo oriental, que podrían contribuir al alza global de los tráficos de flete en un 60 por ciento y de pasajeros en un 11 por ciento. Más cautos se muestran la totalidad de los puertos españoles en sus previsiones para 2003, ya que éstas dependerán de cómo evolucionen los mercados americano y británico, dos de los principales suministradores de cruceristas para los puertos españoles, y de la situación político-económica de los países ribereños del Mediterráneo. Hasta finales de 2002 las confirmaciones de escalas y pasajeros situaban los incrementos en torno al 1,5 por ciento. Por su parte, las autoridades españolas están realizando en los últimos años un esfuerzo promocional de este tipo de turismo, para lo cual tiene previsto invertir en el periodo 2001-2005 un total de 204 millones de euros en actuaciones cuyo objetivo es la mejora de las instalaciones destinadas a pasajeros y cruceros. Asimismo, los puertos españoles de interés general contarán con un pabellón propio en la Feria/Congreso de Cruceros de Miami, que se celebra del 4 al 6 de marzo en la localidad estadounidense, tal como vienen haciendo desde 1997.