Barcelona instala 18 videosensores para controlar el aforo en las playas

El inicio de la instalación de estos videosensores, que se completará antes del fin de semana, coincide con el primer día en que se puede acudir a las playas de la ciudad Barcelona para bañarse y tomar el sol, aunque el tiempo inestable y la bajada de las temperaturas no lo hacen apetecible.

El Ayuntamiento de Barcelona considera que con las medidas sanitarias el aforo de las playas es de un máximo de 38.000 personas, una cifra lo suficientemente alta para que, si los ciudadanos se distribuyen por todo el litoral, no haya aglomeraciones.

Estos videosensores, de tecnología española, proporcionarán información en tiempo real sobre el grado de ocupación de cada playa, a la que los barceloneses tendrán acceso a través de la web del ayuntamiento, lo que les permitirá evitar, de antemano, ir a playas muy llenas.

Instalados en báculos de alumbrado y edificios bien orientados, estos artilugios captan un fotograma cada cinco minutos, que se procesan mediante un servidor seguro municipal para, mediante algoritmos de inteligencia artificial y de procesado de imágenes, saber el nivel de ocupación de la playa.

La información sobre el aforo que se obtendrá con el sistema de videosensores se complementará con la que dan las cámaras instaladas en la Torre Mapfre y la que proporcionarán la Guardia Urbana y los informadores de playas, por lo que "no habrá puntos oscuros", según ha explicado el jefe del proyecto de videosensores, Marc Perez.