Hoteles y agencias estallan por la gestión de la crisis en Cataluña

Hoteles de Barcelona

El presidente del Gremio de Hoteles de Barcelona, Jordi Mestre, ha pedido a la Generalitat una comunicación "más exacta, continua y constructiva" sobre la situación sanitaria en la capital catalana, que evite la circulación de "mensajes de alarma" hacia la opinión pública local, nacional e internacional.

Según Mestre, una mala praxis, en este sentido, tiene graves afectaciones sobre la actividad económica y, especialmente, en la industria turística y pone en riesgo la "tímida recuperación" que está viviendo el sector.

Mestre participó en el encuentro que el presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha mantenido con el sector turístico catalán para evaluar conjuntamente las afectaciones de la crisis sanitaria de la COVID-19 en la industria turística.

En esta reunión, Mestre ha explicado que la situación sanitaria en Barcelona se ha visto agravada en los últimos días y que las medidas aplicadas y las que puedan venir les "complican mucho" su actividad.

Ha asegurado que el futuro próximo de la industria turística y hotelera en Barcelona y Cataluña es "realmente complicado e incierto".

Además, Mestre considera que las ayudas al sector turístico presentadas por el Gobierno son "inexistentes" y que ninguna medida va encaminada a promocionar la demanda turística, como sí se ha hecho en otros países, que han tomado medidas como la reducción del IVA.

Además, ha pedido que las medidas a tomar tengan una dimensión, por lo que se refiere a los recursos, "muy superior a las que han habido hasta ahora".

Confederación empresarial

La Confederación Empresarial de Hostelería y Restauración de Cataluña (Confecat) también se reunió este lunes con el presidente de la Generalitat, Quim Torra, y le ha entregado un manifiesto con medidas que permitan "la supervivencia de la actividad económica y laboral de esta industria en Cataluña".

En el manifiesto que han entregado a Torra, la confederación de hosteleros afirma sentirse "desprotegida", reprocha que "en ningún caso la Generalitat de Cataluña ha tenido una especial sensibilidad con el sector turístico" y reclama la anulación del impuesto sobre las estancias turísticas.

Se trata de un impuesto que "a pesar de la colosal caída de la demanda, no se ha cancelado, con el correspondiente perjuicio generado y perjudicando todavía más la ya escasa demanda turística".

En un mensaje en su cuenta de Twitter, Torra se ha referido a la hostelería como "el sector más devastado por la crisis de la Covid-19" y se ha comprometido a plantear estas reivindicaciones "al presidente Sánchez".

El presidente de la ConfeCat, Santiago García-Nieto, ha afirmado que "los principales actores del sector turístico de Cataluña vivimos en un estado de gran preocupación por el futuro de una de las principales industrias de nuestro país, como es la turística".

En este sentido, ha reclamado "la puesta en marcha de medidas efectivas que ayuden y permitan la supervivencia de la actividad económica y laboral de esta industria en Cataluña".

Los hosteleros se han puesto a disposición de Torra para negociar con el Gobierno "unas medidas que creemos que deben ser más efectivas a corto plazo para conseguir la supervivencia de las empresas turísticas", entre las que han citado una reducción del IVA, moratorias a las hipotecas y alargar y flexibilizar los ERTE.

Además, también han pedido que se destine al sector entre el 20 y el 25 % de los fondos de la Unión Europea y, posteriormente, "un ejercicio de territorialización" en lo que respecta a Cataluña.

Los hosteleros señalan que el importe del conjunto del programa "no puede ser inferior a los 7.500 millones de euros".

El presidente de la Generalitat, Quim Torra, durante la rueda de prensa que ha ofrecido este lunes. EFE / Enric Fontcuberta

Acave

Por su parte, el presidente de la Asociación Corporativa de Agencias de Viaje Especializadas (ACAVE), Martí Sarrate, ha criticado al presidente catalán, Quim Torra, por "pasar toda la responsabilidad a los ciudadanos" en la lucha contra la COVID-19, mientras el Govern no cumple con sus obligaciones.

El presidente de la Generalitat ha pedido este lunes un "esfuerzo colectivo y solidario" y "extremar las medidas de prevención" ante la situación "crítica" de la pandemia.

En declaraciones a Efe, Sarrate considera "poco consistente" que Torra llame a la responsabilidad de los ciudadanos y cree que "no es correcto" pasarles toda la responsabilidad cuando la Generalitat tenía que "haber preparado a rastreadores y agentes cívicos" o haber controlado el asunto de los temporeros en Lleida para luchar contra la COVID-19 y no lo ha hecho.

Para Sarrate, la gran mayoría de la población "se ha portado correctamente" y ha pedido a la Generalitat que cumpla "con sus obligaciones".

En este sentido, ha criticado que el gobierno catalán haya estado casi dos meses sin tener director general de sanidad, "una figura fundamental" en esta situación.

Para Sarrate, "la falta de gestión" de las administraciones les ha vuelo a coger de imprevisto y se está dando una imagen de "inseguridad y alarmismo" que ha provocado las reacciones del gobierno británico de imponer una cuarentena a las personas que viajen desde España o la decisión de TUI de cancelar los vuelos a la península.

En este sentido, considera que las informaciones dadas por la Generalitat sobre los rebrotes están siendo "muy alarmantes" y se están gestionando mal.

Países Bajos desaconseja viajar a Barcelona

Holanda ajustó este lunes las recomendaciones de viaje a Barcelona y sus alrededores, zonas que pasan a estar en color naranja, que aconseja solo los viajes estrictamente necesarios, y urgió a sus ciudadanos a regresar de inmediato a Países Bajos y hacer una cuarentena a su regreso.

En una actualización del mapa donde se recogen las recomendaciones de viaje a España, el Ministerio holandés de Exteriores ha explicado que solo recomienda viajar a Barcelona y toda su periferia "si hay una razón necesaria", por lo que "se insta urgentemente a no hacer viajes turísticos" a la ciudad condal.

El ministerio ha añadido que el número de contagios por COVID-19 ha aumentado en la ciudad catalana y sus municipios periféricos, por lo que estas zonas pasan de estar representadas en amarillo, que sí permite viajes turísticos, al color naranja, y recuerda que el tráfico hacia y desde la comarca leridana del Segrià está ya prohibida por las autoridades locales.

El Ejecutivo urge a los ciudadanos que ya se encuentren de visita en Barcelona y el Segrià, ambos ahora en color naranja, a que regresen pronto a Países Bajos y se sometan a una cuarentena domiciliaria de 14 días.

Aunque mantiene en amarillo a la región de Aragón, recuerda que ya se aplican allí medidas más estrictas para controlar los contagios de coronavirus, por lo que se insta a que la gente se quede en casa, y recuerda que los restaurantes y terrazas abren solo "de forma limitada".

El Gobierno holandés pide también a sus ciudadanos mantenerse alerta "cuando vayan de viaje a España" porque un empeoramiento de la situación puede producirse a "un ritmo rápido", y seguir las recomendaciones sobre riesgos y seguridad que den las autoridades locales y holandesas.