Turistas con reservas en Turquía se desvían a España por miedo a la guerra

El efecto rebote ya ha comenzado. Canarias y la Costa del Sol se han convertido en los dos principales destinos de los turistas que han decidido no viajar a Turquía pese a tener reservas confirmadas. Desde que la situación internacional comenzó a caldearse y las reservas de viajes hacia los destinos más cercanos a Irak cayeron en picado, los touroperadores se apresuraron a dar garantías a sus clientes de que los cambios o devoluciones no sufrirían penalización. Los clientes reclamaban garantías ante la escalada prebélica, y a los grupos turísticos les causaba pavor un horizonte de paralización de reservas que les ahogara financieramente. Ahora ha llegado el momento de cumplir los compromisos. Alltours anunció ayer que devolverá sin penalización las reservas realizadas para el verano a los clientes que se arrepientan. Thomas Cook, por su parte, ha optado por una solución menos flexible. Ofrece a sus clientes la posibilidad de cambiar de destino sin coste alguno y abonando sólo las eventuales diferencias de precios. Los desvíos ya han comenzado. Turquía es el país más afectado por este movimiento, pero también en Egipto empiezan a producirse cancelaciones. Directivos de Thomas Cook aseguraron ayer que durante la semana pasada los destinos turcos sufrieron más cancelaciones que reservas. Según dijo a este periódico el director del touroperador Neckermann (una de las marcas del grupo), Peter Wennel, España se ha convertido en el primer destino refugio. Principalmente Canarias, pero también la Costa del Sol y el resto de las costas andaluzas se están viendo beneficiadas por este desvío. La situación que atraviesa el mercado germano es inaudita. Las reservas para el verano siguen cayendo en picado, pese a que este invierno la cifra de viajeros fue superior a la del año pasado. «En 35 años que llevo en este negocio nunca vi nada así», dijo ayer Lothar Buss, vicepresidente ejecutivo de Destinos de Thomas Cook. A pesar de las previsiones negativas, Thomas Cook aumentó un 12 por ciento la venta de viajes de alemanes en el litoral andaluz durante el pasado invierno. El grupo llevó a las costas de Andalucía un total de 45.000 turistas germanos (5.000 más que en el invierno 2000-2001). En la Costa del Sol, el ascenso fue del 9 por ciento. Sin embargo, ahora las reservas para pasar el verano están más bajas que el año pasado. Concretamente en la Costa del Sol, la bajada es del 17 por ciento, mientras que en la Costa de la Luz es del 7 por ciento, y en la costa de Almería, del 12 por ciento. Las cifras de caída en Andalucía y la Costa del Sol son tímidas si se las compara con las cifras generales que presenta el mercado, con descensos de hasta el 40 por ciento en algunos destinos. Las causas están claras. Según Buss antes de que se temiera una guerra las reservas eran incluso superiores a las de otros años. Buss, que firmó ayer un acuerdo de colaboración con la Junta de Andalucía, alabó la relación calidad-precio del producto turístico de la Comunidad, y destacó las inversiones realizadas en la renovación de la planta hotelera. «Andalucía tiene en Alemania muy buen nombre por su oferta cultural, que supone una ventaja respecto a otros destinos de sol y playa», aseguró. Sin embargo, no descartó que si la situación empeora y el número de clientes de Thomas Cook que llegan a la Comunidad desciende, tengan que solicitar a los hoteleros una bajada de precios. «A nosotros nos gusta que haya un ligero incremento de precios, pero hay que ver lo que hace la competencia», señaló, al tiempo que recordó que Turquía y Egipto, a pesar de las dificultades tienen hoteles excelentes con buena relación calidad-precio. Buss se comprometió a que Andalucía será protagonista en los actos organizados por Thomas Cook en el 40 aniversario de marca Neckermann. (H.B., diario Sur, 11/03/03)