Incertidumbre en empresas turísticas españolas ante posible guerra

La incertidumbre debido al peligro de guerra con Irak afecta a los grandes grupos turísticos españoles, con importantes intereses en Latinoamérica, y en este momento consideran que "no es posible hacer previsiones", señalaron a EFE fuentes empresariales del sector. La Organización Mundial de Turismo (OMT), con sede en la capital española, ha expresado su preocupación por las repercusiones que puede tener sobre esta industria un conflicto bélico en Irak. Un portavoz de la organización dijo a EFE que una eventual guerra con Irak "suscita temor porque puede provocar suspensión de decisiones, frenar reservas y retrasar programas de inversiones". El secretario general de la OMT, Francesco Frangialli, ya señaló en Berlín, durante la inauguración de una feria turística, que "las empresas de turismo no son distintas de los demás operadores económicos: nada les disgusta más que la incertidumbre". "Los conflictos no son buenos para el sector, pese a que es muy fuerte y resiste bien estos acontecimientos políticos", señaló Frangialli, que deseó que, en caso de producirse la guerra, "sea lo más corta y lo más limitada posible en su incidencia geográfica". A pesar de todo, expresó su confianza en el sector porque "la necesidad de viajar por motivos de negocio o de recreo está ya demasiado arraigada en nuestras sociedades post-industriales para que pueda extirparse fácilmente de ellas". Las perspectivas que hace la OMT para Latinoamérica, sin embargo, "no son muy buenas", ya que "la debilidad de los mercados ha afectado de alguna forma el turismo interregional, que se mantiene entre Argentina, Brasil, Venezuela y Chile, fundamentalmente". Por otra parte, responsables de Turismo de Latinoamérica destacaron, durante la pasada VI Conferencia Iberoamericana de Ministros y Empresarios del sector celebrada en Madrid, la necesidad de aumentar los flujos turísticos de Europa hacia esa región para crear puestos de trabajo y combatir la pobreza. "El turismo -destacaron- es el único ámbito en el que América Latina puede competir en igualdad de condiciones en este mundo globalizado, porque no requiere grandes inversiones y es una herramienta ideal para generar empleo". Por su parte, el experto español en turismo internacional Manuel Figuerola señaló la necesidad de aumentar el flujo turístico hacia Latinoamérica, ya que "el Caribe y América del Sur recibieron en 2001 tan sólo el 5 por ciento del turismo internacional".