Cataluña: restaurantes y bares cerrados pagarán la mitad del alquiler

Cómo se aplica

Según ha informado el departamento de Justicia de la Generalitat, el decreto ley aprobado este martes "faculta a los titulares de los negocios para iniciar una negociación con los propietarios de los inmuebles para establecer, de mutuo acuerdo, una rebaja del importe de la mensualidad".

"En caso de que el acuerdo entre las partes sea imposible, la nueva norma fija que el importe del alquiler de los negocios cerrados por las medidas sanitarias quedará automáticamente rebajado al 50%, a contar desde el día que el inquilino haya notificado la voluntad de negociar".

"Con las restricciones en vigor actualmente, esta medida afecta a bares, restaurantes, gimnasios, centros de estética, bingos, casinos, salas de juego y ludotecas", ha indicado la Generalitat.

Los restaurantes y bares que estén cerrados pero que ofrezcan comida para llevar también podrán beneficiarse de la medida. "A los efectos de esta norma, la venta de producto para llevar y el envío a domicilio no se tienen en cuenta. Por ejemplo, si este es el único servicio que puede ofrecer un restaurante, el decreto ley considera que el negocio está cerrado y que la reducción de la cuota del alquiler debe ser igualmente del 50%", informa el departamento de Justicia.

El Govern ha impulsado este decreto ley "en virtud de la competencia exclusiva de la Generalitat en derecho civil", añade dicho departamento.

Un camarero recoge una mesa en un restaurante del barrio de la Barceloneta de Barcelona, el pasado jueves. El viernes 16 de octubre entró en vigor el cierre de bares y restaurantes durante 15 días y las nuevas restricciones de aforo en centros comerciales, comercios, gimnasios, teatros y cines que ha aprobado el gobierno catalán para intentar contener los contagios de coronavirus. EFE/Quique García

Rebus sic stantibus

Según explica el departamento de Justicia de la Generalitat, esta nueva regulación se fundamenta "en los dos principios jurídicos básicos de cualquier contrato".

"Por un lado, la ley debe proteger el pacta sunt servanda. La interpretación coloquial de esta premisa legal es que las reglas del juego no se pueden cambiar a medio partido".

"Sin embargo, si un hecho extraordinario, imprevisible y sobrevenido altera el equilibrio del contrato, la parte que tiene que asumir los costes puede apelar al rebus sic stantibus para reclamar una modificación de los términos del acuerdo, debido a una coyuntura como, por ejemplo, la actual crisis sanitaria, social y económica que ha provocado la pandemia del coronavirus", añade el departamento de Justicia.

Satisfacción del Gremio de la Restauración

"Para los restauradores, el paso que ha dado la Generalitat se puede calificar de histórico y supone atender la demanda planteada por el sector al inicio de la pandemia", ha señalado el Gremio de la Restauración de Barcelona.

La organización también ha destacado que este decreto ley aporte soluciones inmediatas sin tener que esperar una sentencia judicial, y ha recordado que del mismo modo que las medidas para contener los contagios entran en vigor en el mismo momento, la restauración necesita ya alternativas al problema del alquiler.

"El decreto constituye un paso valiente en la dirección adecuada al haberse concebido para dar respuesta inmediata promoviendo y facilitando, al mismo tiempo, que sean las partes las que lleguen a un nuevo acuerdo", ha indicado el gremio.

Por su parte, el departamento de Justicia de la Generalitat ha asegurado que el objetivo de la nueva norma es "repartir el coste de la pandemia" y que "nadie se quede por el camino", así como "preservar la actividad económica" para que "no haya persianas bajadas cuando regrese la normalidad".