La digitalización marcará la diferencia en empresas y destinos

¿Qué papel que está llamada a desempeñar la digitalización en la nueva era pos-COVID?

La digitalización va a marcar la diferencia tanto a nivel de empresas como de destinos. A nivel de empresas, incrementando su competitividad a través de la mejora de sus procesos y aumento de su eficiencia, así como en la diferenciación con relación a sus productos o servicios. Y por la parte de los destinos, por la capacidad de dar respuestas que se adapten a las necesidades específicas de sus residentes y turistas. De esta manera mejora los servicios a los ciudadanos a la vez que ofrece una experiencia turística más satisfactoria. Ejemplos, pueden ir desde la parte de integración de tecnologías como puede ser en el ámbito del transporte, la mejora en la gestión y análisis de datos o la posibilidad de ofrecer soluciones holísticas en el ámbito de la seguridad, ya sea seguridad física, sanitario o ciberseguridad.

La Red de Destinos Turísticos Inteligentes ofrece, según Dolores Ordóñez, "un marco con una metodología estandarizada que permite una rápida adopción de la estrategia".

Además, otro elemento de la digitalización va a ser su impacto directo en la sostenibilidad de los destinos. Al gestionar más datos puede medir los impactos de los turistas en el territorio, gestionar de manera más eficiente los recursos, incrementar la eficiencia del transporte reduciendo emisiones, etc.

¿Cuáles son las tecnologías que van a marcar la diferencia?

De todas las tecnologías disruptivas que se manejan en estos momentos, el internet de las cosas (IoT), que recoge datos; el big data, que los analiza; y la inteligencia artificial, que dota de inteligencia a las soluciones, son las principales.

¿Qué es lo que está demandando el cliente en este ámbito?

El cliente demanda servicios cada vez más personalizados así como experiencias únicas, y ello sólo puede ofrecerse cuando se le conoce en detalle. Para ello es necesario recoger datos (IoT), analizarlos (big data), y ser capaces de generar soluciones y respuestas en tiempo real en función de todos los parámetros anteriores (inteligencia artificial).

En líneas generales, ¿están empresas y destinos a la altura de las circunstancias en el ámbito de la digitalización o, por el contrario, se están quedando atrás?

Depende mucho de la región. Pero en líneas generales las empresas están realizando un gran esfuerzo para adaptarse a estas nuevas exigencias y retos que se han planteado. Hay que tener en cuenta que el cambio que supuso pasar de un turista tradicional a uno digital tuvo como consecuencia que las empresas ya empezaran a adaptarse a un nuevo escenario cambiante y exigente donde una gran parte de la experiencia turística se basaba en la digitalización de los servicios. A nivel de destinos, en España se ha llevado a cabo una iniciativa pionera con la Red de Destinos Turísticos Inteligentes. A pesar de que las diferencias son muy grandes de un destino a otro, nos encontramos en un marco con una metodología estandarizada que permite una rápida adopción de la estrategia. Otra cosa es la implementación real, ya que está ligada a la capacidad presupuestaria de cada destino.

Por tanto ¿los destinos inteligentes llevan ventaja en este desarrollo?

Sí, porque han empezado a realizar despliegues de tecnologías y soluciones. De hecho, la consideración de un destino como inteligente se basa en su capacidad de analizar, recoger y analizar datos a través de las tecnologías mencionadas anteriormente, basando su toma de decisiones en ellos. De ahí viene la inteligencia del destino.