La economía circular, oportunidad para el turismo en Baleares

El primer hito de esta actuación se ha saldado con la construcción de un marco estratégico propio orientado a guiar el avance del actual modelo de negocio hotelero hacia la noción de circularidad, según detalla la fundación en un comunicado.

"Abordamos este ambicioso reto en ausencia de referencias globales en materia de circularidad hotelera y siendo muy conscientes de la ventana de oportunidad que supone, en estos momentos, para la reformulación del turismo balear”, explica Antoni Riera, director técnico de la Fundación

El reto se ha afrontado desde un fructífero ejercicio de conocimiento compartido, dirigido por la Unidad de inteligencia económica de la Fundación, en el que las trece compañías hoteleras que forman parte del Patronato han aportado, con el liderazgo de Iberostar, el conocimiento de negocio que atesoran a través de una planta que aglutina uno de cada cinco establecimientos en Baleares y más de 650 hoteles en todo el mundo.

Un momento del encuentro.

Los detalles se compartieron esta semana en un encuentro que, con el título ‘Circularidad hotelera y competitividad, la reformulación responsable del turismo’, contó con la participación de Sabina Fluxá y Gloria Fluxá –vicepresidentas y CEO y CSO, respectivamente, de Grupo Iberostar–, Bel Oliver, por parte de la OMT –en nombre de Zurab Pololikashvili, su secretario general– y Francina Armengol –presidenta del Govern balear y actual presidenta del Patronato.

En el transcurso del evento, Antoni Riera presentó la estructura y contenidos de un marco alineado con las agendas e instrumentos internacionales vigentes, el cual asume que toda estrategia circular en el ámbito hotelero se basa en tres pilares estratégicos:

1. La gestión de los recursos disponibles, en materia de inversión, innovación y gobernanza.
2. La modernización de los procesos internos, intensos en el consumo de materiales y recursos.
3. La implicación de los principales stakeholders o grupos de interés, como son los trabajadores, proveedores y clientes.

Así, a partir de ahora, “las compañías hoteleras disponen de un instrumento que, a modo de manual, les facilitará abordar holísticamente la toma de decisiones sobre los activos y procesos afectados por la noción de circularidad, implementar nuevas buenas prácticas con impacto reconocido e identificar indicadores clave sobre el progreso de su estrategia circular”, destacó Riera

Se trata, según prosiguió, de “un marco que reúne cuatro importantes atributos porque es único y pionero, no existen precedentes; amplio y flexible, pues es igualmente útil para compañías hoteleras de naturaleza, tamaño y orientación de mercado distintas; abierto y en permanente actualización; y es, además, multidestino y aplicable, por tanto, a las distintas localizaciones en las que las compañías sitúen su portfolio de establecimientos”.

13 pautas circulares

Para facilitar que la estrategia se traduzca en acción, se ha diseccionado el actual modelo de negocio hotelero identificando hasta 103 activos y procesos susceptibles de acogerse a la noción de circularidad.

De este modo, el marco propone, en torno a los tres pilares estratégicos mencionados, 13 pautas de circularidad, 125 líneas de acción y una batería de 81 indicadores clave (o KPIs) para que las compañías elijan cómo fijar y monitorizar su progreso circular

El impacto sobre la toma de decisiones de este nuevo recurso rebasa el ámbito de la hostelería, pues tal como indicó Riera, “la planta hotelera balear está en condiciones de desempeñar un interesante rol como ‘laboratorio de circularidad’ regional, dado que sus actores operan a través de una cadena de valor amplia y transversal que asegura el impacto sobre una extensa red de operadores, proveedores y clientes”.

De hecho, las compañías de las islas se muestran en este terreno de cada vez más proactivas. "La circularidad está ya en la esencia de la estrategia de negocio de Iberostar y de nuestra visión del turismo responsable”, aseguró Sabina Fluxá.

“Tenemos la oportunidad única de liderar la transición a la economía circular con nuestras decisiones, hacer palanca en nuestra competitividad y contribuir a mejorar la salud de los ecosistemas sobre los que basamos nuestra actividad”, agregó Gloria Fluxá

En este contexto, se incidió en que el aprovechamiento de la sinergia público-privada es muy relevante, pues no es posible encauzar el tránsito sistémico hacia patrones de producción y consumo más responsables sin la implicación de todos los actores del tejido.

En este sentido, Oliver afirmó que la OMT está decidida a trabajar con el sector privado, tal como ya lo viene haciendo con los Estados miembros, para ayudar a las empresas a adaptarse a la nueva realidad. "Contamos, para ello, con el firme apoyo de Impulsa para reiniciar el turismo de forma responsable y hacer de las Islas el ejemplo a seguir para otros destinos del mundo”, destacó.

Por su parte, Armengol reafirmó su apuesta para “descubrir todos aquellos paradigmas que, en estos momentos, nos permitan garantizar el futuro de nuestro turismo, de manera más sostenible, más responsable y sin dejar a nadie atrás”.