Viajes Eroski cerrará el 8% de sus agencias si no se salva el verano

Goienetxe califica el 2020 como "un año muy complejo" con "muchos frentes abiertos", ante la incertidumbre generada por la pandemia que les obligaron a asumir prácticamente una "gestión semanal" de la empresa.

Cuenta que a raíz de la declaración del primer estado de alarma por la pandemia de coronavirus, el 14 de marzo de 2020, se vieron obligados, como todo el comercio esencial del país, a cerrar durante tres meses toda su red de venta, formada por 155 agencias vacacionales, de las que el 20% son oficinas franquiciadas, además de 15 call centers, y tan solo dejaron operativo un pequeño retén.

Al mismo tiempo decidieron reubicar a casi 300 de sus trabajadores cooperativistas en el negocio alimentario del Grupo Eroski, mientras que los trabajadores por cuenta ajena de la agencia, el 35% de la plantilla, se acogieron a un ERTE.

Confiando en que la crisis solo duraría unos meses, en junio iniciaron un proceso de reapertura y abrieron el 55% de la red, pero "el verano no fue lo suficientemente fuerte" para abrir más agencias.

Viajes Eroski tiene una red de 155 puntos de venta, el 25% de ellos son franquicias.

En el segundo semestre llegaron peores noticias, como la cancelación del Imserso y la segunda ola de la pandemia, por lo que se vieron obligados a cerrar más agencias hasta operar con solo el 30% de la red. Y así siguen a día de hoy, con unas 45 agencias abiertas.

Finalmente, en 2020 la facturación fue de solo el 12% de la registrada en 2019, cuando facturaron 190 millones de euros, y sobre todo gracias a la actividad corporate, que representa el 30% del negocio de la agencia.

Goienetxe admite que no ha sido fácil reubicar a los agentes de viajes, "que es una profesión muy vocacional", en una labor diferente como es la de la alimentación, pero por otro lado reconoce que ha sido el hecho de formar parte del Grupo Eroski, con un negocio de alimentación "que ha funcionado muy bien durante la pandemia", lo que les ha permitido evitar recortes en el empleo.

Con este panorama, en la agencia se plantean que la crisis se prolongará al menos durante dos años, "hasta que el tren vuelva a recuperar una velocidad suficientemente sólida" y siempre a la espera de ver cómo se comporta el verano, "que será nuestro primer input" para calcular cómo será este 2021.

Un plan de cierres

Ante la incierta evolución del negocio en estos primeros meses del año, ya tienen sobre la mesa un plan de cierre de agencias, con los puntos de venta que no volverán abrir. Goienetxe explica que si en verano no vuelve a recuperarse la movilidad y los viajes "tenemos claro que un 8% de la red no abrirá".

Asume que este 2021 "va a ser un año difícil", pero confía en que el proceso de vacunación avance al menos para que se recuperen los viajes en verano. "Si podemos salvar el verano, lo que no quiere decir que registremos las ventas de 2019 sino volver a arrancar el tren, entonces ya podremos ver un plan de recuperación, que sin duda va a ser largo, pero si el verano no se salva será fatal para todo el sector turístico", advierte.

Goienetxe: "Lo que sí creo es que este sector cuando se recupere no se va a parecer al de 2019”

De cualquier manera, no cree que puedan recuperarse los niveles de ventas que se registraron en 2019 hasta probablemente finales de 2023, con diferencias entre el negocio vacacional y el Business y "con las dudas de qué parte de la tarta se va a perder".

Insiste en que la recuperación de los viajes vacacionales será muy diferente a la del negocio corporate, donde opina que se van a mantener comportamientos que se han prodigado durante la pandemia, como son las reuniones empresariales mediante videollamadas. "Lo que sí creo es que este sector cuando se recupere no se va a parecer al de 2019", tanto porque los modelos de negocio se tendrán que reconvertir como por el proceso de digitalización que tienen que abordar las empresas.

Por el lado positivo, opina que con esta transformación "el sector va a salir reforzado por las propuestas de valor que le dará al cliente”.

Dispersión y fuegos artificiales

Con respecto a los planes de ayudas de las Administraciones para las agencias, Mikel Goienetxe reconoce que "esta crisis nos ha superado a todos", pero ve a las instituciones "preocupadas y tomando medidas para paliar" los efectos de la pandemia.

Sin embargo, echa de menos que a día de hoy no exista todavía "un plan de recuperación turístico armado, con objetivos claros a medio plazo, porque esto va a ser largo, para saber a dónde queremos llegar y qué trozo de la tarta queremos salvar", en un sector que genera mucha riqueza, mucho empleo, pero que está muy atomizado, explica.

Opina que existe "cierta dispersión y fuegos artificiales" en determinadas ayudas de las Administraciones, aunque defiende el plan que ha presentado recientemente el Gobierno vasco para paliar los efectos de la pandemia con 21 millones de euros de presupuesto para el sector, aunque insiste es que estas son medidas para el corto plazo cuando es necesario tomar decisiones "de futuro" a más largo plazo.

En lo que respecta a la estrategia de las empresas para superar esta crisis, tiene claro que la concentración es "una de las medidas claras y una de las soluciones" que tienen a mano las compañías para resistir los costes estructurales durante esta "larga travesía" que ha dejado a "muchas empresas debilitadas".

Si bien vaticina que habrá una mayor concentración empresarial por la crisis, el director de Viajes Eroski descarta que vayan a optar por operaciones de este tipo sino que mantendrán el modelo cooperativista integrado dentro del Grupo Eroski.