Pueden llegar turistas a España porque la UE no ha cerrado fronteras

Así, la entrada de turistas extranjeros a España en la pandemia -como la famosa afluencia de turistas franceses a Madrid-, responde a los acuerdos de la Unión Europea, que ha decidido no suspender la libre circulación de personas, pero ha establecido medidas para garantizar la salud pública.

De hecho, el año pasado y durante los meses fuertes del confinamiento internacional, el espacio Schengen sí fue cerrado y las fronteras entre los países, aunque posteriormente la UE se comprometió a no repetir la experiencia.

De esta manera, y sin aludir directamente a casos concretos como el de Mallorca, Marlaska ha explicado que España debe remitirse a los acuerdos de la UE y a las recomendaciones que se dictan dentro de la Unión

Un Gobierno autonómico como el balear no puede cerrar sus fronteras y aeropuertos a la llegada de turistas procedentes de países del espacio Schengen, como tampoco puede hacerlo unilateralmente el Gobierno español, porque a ello se ha comprometido.

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska.

Reino Unido y Alemania, dos modelos

En este sentido, y aunque el Reino Unido ya no pertenece a la UE y cuando sí era miembro tampoco pertenecía al espacio Schengen, es destacable la política distinta que aplican el Reino Unido y Alemania respecto a los viajes internacionales de ocio. Mientras el Reino Unido los ha prohibido e incluso impone multas a quienes se salten las restricciones, Alemania ha considerado desde el primer momento que la decisión de viajar o no en pandemia era cosa de la libertad y la responsabilidad individual de cada cual, lo mismo que la puesta en el mercado de ofertas y paquetes en estas circunstancias: una decisión empresarial.

Alemania ha decidido ahora dar marcha atrás a la decisión tomada sobre las restricciones internas en el país durante la Semana Santa, que iban a recrudecerse, pero no cambia de momento su política de cara a los viajes internacionales por ocio: simplemente se recomienda no viajar. Lo que sí ha reconocido el Gobierno de Angela Merkel es que "están estudiando la prohibición temporal de los viajes al extranjero", aunque de momento no han tomado una decisión.

En Baleares muchos ciudadanos y colectivos han criticado que puedan ir turistas alemanes a pasar la Semana Santa, mientras los propios isleños no pueden viajar a la península ni los peninsulares visitar las islas. Aunque el Govern balear barajó la posibilidad de cerrar perimetralmente las islas también para los propios residentes -aunque no para los extranjeros, porque no puede hacerlo-, al final se decidió cerrar las conexiones con la península, pero permitir los viajes entre islas (vea: Baleares: permiten los viajes entre islas y desde el extranjero).

Marlaska ha dicho también que se considera suficiente la PCR negativa para controlar la movilidad internacional, una prueba perfectamente acreditada, y el cumplimiento de las normativas del territorio español

El ministro ha dejado claro que las fuerzas de seguridad tienen la misión de velar para que una persona, extranjera o nacional, cumpla las normas del territorio en el que se encuentre. Y si las incumple, se actúa en consecuencia, sea de donde sea.

De hecho, los turistas extranjeros que pasen sus vacaciones en España deberán cumplir con las mismas restricciones que pesan sobre los residentes, tal y como ha quedado claro respecto a Mallorca (vea: Los alemanes deberán cumplir en Mallorca las restricciones vigentes).