Tenerife, optimista para la segunda mitad del verano y "más para invierno"

“Sabemos que hay unas ganas locas de viajar, afirma David Pérez, consejero delegado de Turismo de Tenerife. No obstante, sostiene que todavía es pronto para hacer un pronóstico respecto al próximo verano, ya que “la incertidumbre aún es grande porque los grandes movimientos de última hora se producirán cuando caigan las restricciones a la movilidad en nuestros principales mercados, el británico y el alemán, sin olvidar el español”.

En cualquier caso, asegura que “somos optimistas para la segunda mitad del verano, pero aún más para la temporada de invierno”, la temporada alta de Canarias.

Para esa fecha esperan tener “una recuperación más acorde a lo que podía ser un invierno 2019-2020”, ya que están detectando un importante movimiento de reservas tanto para la próxima temporada estival como para la de invierno. Asegura, además, que la conectividad está garantizada, con al menos unos 5,5 millones de plazas programadas.

En 2019, Tenerife recibió más de seis millones de turistas.

Comienza una nueva etapa en la que se pretende que la isla se empiece a visibilizar de otra manera. Con este objetivo, el departamento de Turismo acaba de renovar la marca turística con el lema ‘Tenerife despierta emociones', con el fin de reforzar a este destino como un referente turístico internacional, apoyado en dos pilares básicos, la sostenibilidad y la digitalización.

Al mismo tiempo se ha puesto en marcha un nuevo plan de marketing centrado en mejorar la calidad y la competitividad del visitante y en llevarle un mensaje personalizado. La estrategia de comunicación se centra en las emociones que la isla despierta en los visitantes. "Pretendemos inspirar a todos los viajeros a través de esa diversidad" y de este modo hacerles llegar que “somos el destino más diverso de Canarias y uno de los más diversos de España”, afirma David Pérez.

Hay un cambio generacional en la tipología de visitantes. Por un lado, hay un grupo de personas, de más edad, que tiene una mayor preferencia por el sol y playa. Es un turista más tradicional, pero hay una nueva generación que, además de dicho producto, “si no se le ofrecen otras experiencias en destino no nos va a elegir y ahí está el reto de comunicar”.

Derribar estereotipos

Para que Tenerife se perciba de una manera distinta en el exterior, el nuevo proyecto apuesta por derribar los estereotipos asentados en los mercados de origen. En este sentido, David Pérez considera que los turoperadores, que “han contribuido a la riqueza y al desarrollo del destino y seguirán siendo necesarios”, han influido en que se tenga una imagen de la isla como un destino centrado solo en el sol y playa, una percepción que el plan de marketing quiere cambiar.

Por otro lado, la apuesta por la diversificación que está llevando a cabo Turismo de Tenerife también tiene que ver con los mercados y otro importante propósito del citado plan es “no ser tan dependientes de uno o dos mercados principales”, agrega.

El británico es muy importante para la isla, pero genera ciertas dudas, por ejemplo, “no sabemos cuáles van a ser las consecuencias del Brexit”, advierte el consejero delegado de Turismo de Tenerife. Por tanto, cree necesario apostar por otras nacionalidades, como el turista alemán o el nórdico, sin olvidar el francés que “no para de crecer, casi tenemos ya las mismas reservas para este año que tuvimos en todo 2019”.

Digitalización

La transformación digital ocupa también un papel destacado en la nueva estrategia, ya que supondrá una mejora de los servicios y de los productos que se ofrecen en la isla, además de ayudar a los viajeros a planear su viaje y a desplazarse por la isla.

Pérez cree que con este proceso “seremos más competitivos, al tener una capacidad de respuesta más rápida. Además, supone un cambio absoluto en la concepción y en cómo se ha trabajado hasta ahora”.

La nueva marca se apoya estéticamente en los tonos azules de las aguas atlánticas que rodean a la isla y en la calidez que le aporta el sol los 365 días del año.