La última semana ha sido prolífica. Las reservas de hotel para Semana Santa se han disparado en los últimos días y ya son pocos los que dudan de que habrá lleno en la Costa del Sol. Sólo la patronal hotelera, Aehcos, se resiste con su habitual prudencia a vaticinar una ocupación del 100 por cien.
La última semana ha sido prolífica. Las reservas de hotel para Semana Santa se han disparado en los últimos días y ya son pocos los que dudan de que habrá lleno en la Costa del Sol. Sólo la patronal hotelera, Aehcos, se resiste con su habitual prudencia a vaticinar una ocupación del 100 por cien.
Los hoteleros temen que el horizonte de plazas totalmente ocupadas desanime a algunos turistas de último momento o los desvíe hacia destinos con más camas disponibles. Esta prudencia tiene fundamento. La última hora está funcionando más que nunca y hasta la exageración. Tras unos días de dudas e incertidumbre provocados por los primeros días de guerra y las semanas de tensión prebélica que los precedieron, en la última semana se han disparado las reservas. Ayer mismo, los hoteles consultados por este periódico registraban un acelerado ritmo de contrataciones. Según el presidente de Aehcos, Miguel Sánchez, la ocupación será excelente. Desde el Patronato de Turismo de la Costa del Sol, su directora-gerente, Ana Gómez, ha abundado en precisiones. Aseguró que habrá 781.000 turistas, de los que 380.00 dormirán en alojamientos no reglados y 401.000, en hoteles. Para que esta previsión se cumpla tendrá que haber mucha rotación durante la semana. La Costa del Sol cuenta con una capacidad de 110.000 camas, según las estadísticas de Aehcos. Según los datos del Patronato, la afluencia de turistas será superior en un 2 por ciento a la de la Semana Santa del año anterior. Aunque este periodo de vacaciones suele funcionar como termómetro del verano, Ana Gómez advirtió de que en esta ocasión la guerra en Irak actúa como un factor que distorsiona el análisis. Ayer mismo Miguel Sánchez aventuró que muchas de las reservas registradas durante los últimos días pueden proceder de turistas que anteriormente han anulado vacaciones en otros destinos mediterráneos debido al conflicto bélico en Irak. Según los datos del Patronato, las principales cadenas ya tienen vendidas todas sus camas para los tres días de más ocupación: jueves, viernes y sábado santos. Esta entidad estima en que habrá un 80 por ciento de ocupación entre el próximo sábado y el miércoles santo, y un 97 por ciento entre el jueves y el sábado siguiente. Al día de ayer, los principales hoteles de Marbella tenían reservas para esos tres últimos días que oscilaban entre el 50 y el 95 por ciento, aunque las contrataciones iban a buen ritmo. El impacto económico para la Costa del Sol, según se estima desde el Patronato, será de 138 millones de euros. El alcalde de Málaga, por su parte, hizo ayer sus propias previsiones, que incluyen unos cinco millones de desplazamientos y un impacto económico en la capital de 100 millones de euros. (H.B., diario Sur, 10/04/03)
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