La Red de Hospederías de Castilla-La Mancha incorpora un nuevo miembro

La red de Hospederías de Castilla-La Mancha nace con el objetivo de dinamizar el sector turístico en la zona, impulsar el desarrollo rural y crear experiencias únicas para el viajero a través de sus alojamientos más singulares. Los seis establecimientos que ya forman parte de ella son independientes y distintos entre sí, pero comparten valores y parámetros de calidad: son hoteles de entre 3 y 5 estrellas; están asentados en edificios de interés patrimonial; defienden los atractivos de la región tanto a través de sus servicios como de su oferta culinaria, basada en recetario y productos locales, y velan por la conservación de la cultura y del medioambiente.

La barra del bar está presidida por una moderna representación de la emperatriz.

Uno de los motivos de su incorporación a la red de Hospederías de Castilla-La Mancha es su elevado valor histórico y patrimonial, ya que está ubicado en la que fuera residencia de verano de la emperatriz, un palacio de corte renacentista rehabilitado en el siglo XIX y con vestigios de las culturas romana y mudéjar. De hecho su decoración recrea la vida y el carácter de Eugenia de Montijo.

Alberga 40 habitaciones, un spa con cuatro cabinas de masajes y circuito termal y un restaurante, Federico, abierto al público, donde ofrece recetas tradicionales al ser un hotel comprometido con la idiosincrasia del entorno en el que se ubica, su cultura y su gastronomía, por lo que mantiene acuerdos con productores locales. A partir de junio ofrecerá un brunch los sábados y domingos.

En su objetivo de promover la ciudad, Eugenia de Montijo ofrece varias experiencias en Toledo, como la Experiencia de las Tres Culturas, que incluye una visita guiada desde el hotel; o la Escapada Puy du Fou, con alojamiento, desayuno y traslado y entrada al parque.