Fallece Antonio Fernández Casado, fundador de High Tech Hoteles

Publicada 05/07/21 11:21h
Fallece Antonio Fernández Casado, fundador de High Tech Hoteles

El empresario hotelero Antonio Fernández Casado falleció el pasado viernes en Madrid tras luchar más de un año contra una larga enfermedad. Junto a varios socios fundó High Tech Hoteles, en 2001, y fue director general de la compañía. Antes había sido director comercial de Hoteles Tryp durante seis años, y en una etapa anterior trabajó en el Hotel Ercilla de Bilbao.

Nació en Esguevillas de Esgueva (Valladolid), en 1948, aunque su infancia transcurrió en la localidad de Santurce (Vizcaya). Gran aficionado a la tauromaquia, Antonio Fernández Casado inició su carrera como novillero en plazas del norte de España con el seudónimo de Antonio de Monterrey, aunque pronto abandonó esta carrera y estudió Turismo en la Universidad de Deusto.

En 1971 se unió al equipo que puso en marcha el hotel Ercilla, en Bilbao, un establecimiento que se convirtió en lugar de encuentro de políticos, periodistas y personas ligadas al mundo de la cultura y de los toros.

Más tarde se trasladó a Madrid, tras ser fichado como director comercial de la cadena Tryp. Cuando esta compañía fue absorbida por Sol Meliá, Fernández Casado, junto un grupo de compañeros, fundó la cadena High Tech Hoteles, que con su segunda marca, Petit Palace, abrió más de 30 establecimientso en diferentes ciudades españolas.

Antonio Fernández Casado.

Es autor de varios libros y ensayos en el ámbito de la hostelería, al tiempo que siguió compatibilizando su faceta de empresario con su afición a los toros y escribió varios libros de temática taurina y durante ocho años presidió el Club Cocherito, de Bilbao, el club taurino más antiguo de España. También ha dado múltiples conferencias y cursos sobre temas relacionados con el sector y fue profesor en la Escuela de negocios Esden.

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Comentarios 1
Discreto como tú sólo, la verdad es que eras una persona que dejaba huella. Aparentemente eras duro pero tenías un corazón enorme. Se notaba que quienes te conocían te apreciaban y te querían. Un fuerte abrazo allí donde estés, Antonio.