Viajeros de Europa y EEUU vacunados podrán entrar en Inglaterra

Es uno de los cambios que el sector británico, sobre todo el receptivo, esperaba con más ganas: el fin de la excepcionalidad de las vacunas británicas. Suena raro, pero así ha sido: el Reino Unido no ha permitido hasta ahora la entrada al país de los europeos, estadounidenses e incluso ciudadanos británicos que no han sido vacunados por el NHS, el sistema nacional de salud.

Todos aquellos que han sido vacunados en el exterior tienen la entrada prohibida en el país. De hecho, los nacionales británicos que han sido vacunados fuera tienen que cumplir con la cuarentena obligatoria de 10 días y dos PCR por persona para entrar por motivos familiares o laborales

Mientras la Unión Europea se ha abierto a los viajes desde mayo, el Reino Unido continúa encerrado en su caparazón, sin turismo internacional y con grandes restricciones a los viajes, a pesar del éxito de su campaña de vacunación.

El Gobierno también reactivará la industria de los cruceros en Inglaterra, mediante convenios con las navieras para garantizar que los viajes sean seguros.

Así lo ha anunciado en Twitter el ministro de Transportes, Grant Shapps, no refiriéndose al turismo y los viajes sino a la reunificación de familias británicas:

Escocia y Gales adoptarán la misma política que Inglaterra respecto a los viajeros vacunados procedentes de los países en ámbar de Europa y EEUU, aunque se desconoce de momento lo que hará Irlanda del Norte. Igualmente, se desconoce si esta decisión implicará algún cambio en la política de viajes por parte de Estados Unidos, que de momento sigue cerrado a cal y canto y no aplicará reciprocidad con Canadá, que sí se abre a los vecinos estadounidenses vacunados a partir del 9 de agosto.

Fin a la "anomalía"

Con este cambio que entrará en vigor el lunes 2 de agosto, el Reino Unido se abre por fin al turismo internacional con la mayoría de países europeos y Estados Unidos (de momento, sin reciprocidad en el caso estadounidense), al menos para los ciudadanos que hayan recibido la pauta completa de vacunación y siempre en el caso de que se trate de países en ámbar.

Estos viajeros deberán hacerse un test antes de viajar y una PCR a su llegada al Reino Unido y es importante destacar que siguen sometidos al sistema de semáforo: países que estén en ámbar, no en rojo.

El sector turístico del país ha dado la bienvenida con alegría al fin de lo que diarios como el Independent han llamado "la anomalía que da preferencia a los viajeros con vacunas británicas".

Paul Charles, director ejecutivo de la consultora The PC Agency, ha dicho que "si el Gobierno del Reino Unido se pone de acuerdo en dejar entrar a los ciudadanos completamente vacunados de la UE y de EEUU sin cuarentena, sería el amanecer de una política global coherente por fin".

Francia sigue en ámbar plus

De momento no cambia el estatus de Francia en la lista "ámbar plus", con cuarentena de 10 días y test PCR en el segundo y octavo día de la llegada al Reino Unido, incluso estando completamente vacunados.

Tampoco ha habido cambios en el estatus de colores del semáforo, que podrían adelantarse a esta semana según algunos medios pero que en principio están previstos, en la nueva revisión, para el 4 de agosto, como explicamos en Inglaterra planea revisar el semáforo esta semana y hacer algunos cambios.

Un cambio importante

Porque lo que se nos escapa a los que vivimos fuera del Reino Unido es que la excepción hecha a partir del 19 de julio para los británicos que regresen a casa desde un destino ámbar, sin tener que sufrir la cuarentena obligatoria, rige solamente para los británicos "que han sido vacunados por el NHS", como recuerda Simon Calder. El Reino Unido no reconoce todavía las vacunas administradas en el extranjero cuando se trata de viajar.

Así, los pasajeros vacunados que vuelan al país desde España, por ejemplo, afrontan normas completamente distintas dependiendo de dónde han recibido sus vacunas. Los que han sido vacunados por el NHS pueden prescindir de la cuarentena y han de hacerse solamente una PCR a su llegada al país. Pero los pasajeros vacunados con las mismas vacunas AstraZeneca o Pfizer producidas en el extranjero, deben pasar la cuarentena de 10 días a su regreso al Reino Unido y hacerse dos test PCR. Estos test cuestan unas 100 libras en el país (117,45 euros).

Estos condicionantes "absurdos" han sido criticados por la industria de los viajes y por los expatriados británicos que esperan volver al país principalmente por motivos familiares

Los laboristas también han criticado el hecho de que mientras la Unión Europea está liderando la apertura a los viajes internacionales gracias al certificado verde digital, que funciona para todas las naciones y es un sistema eficaz de certificación, el Reino Unido sigue sin tener un sistema coherente de certificación y todavía se desconoce qué estándar será requerido para probar la vacunación.

El cambio anunciado este mediodía acaba con la "anomalía" y da oxígeno al sector turístico receptivo, que lleva prácticamente cerrado sin turistas internacionales desde marzo de 2020, como contamos en El Reino Unido pierde 90 M € al día por el cierre del país al turismo.