Ponen en libertad a Ruiz-Mateos por razones humanitarias

Con su detención la jueza quería asegurarse de que José María Ruiz-Mateos (fundador de Nueva Rumasa, compañía a la que pertenecía la desaparecida cadena Hotasa) acudiría hoy a su cita en los Juzgados de Palma de Mallorca, donde está previsto que sea interrogado por la instructora. Y es que de las varias veces en que ha sido emplazado a comparecer, tan sólo ha hecho acto de presencia en dos de ellas y lo hizo para acogerse a su derecho de no declarar.

"No es de recibo que se pretenda eludir una obligación legal amparándose en unos supuestos daños físicos y psicológicos que a día de hoy no han quedado demostrados", llegaba a incidir la jueza en el auto en el que ordenaba la búsqueda y detención del empresario jerezano el 1 de agosto, después de que un informe forense determinara que la fractura que alegó en el tercer dedo del pie derecho no le imposibilitaba a acudir a los juzgados para ser interrogado como imputado por un supuesto delito de estafa en una operación de compraventa.

El procedimiento judicial empezó hace un año cuando, tal y como ya informó HOSTELTUR noticias de turismo, el Grupo Miralles interpuso una querella a Nueva Rumasa por estafa en la compraventa de un hotel. Se trataba del Hotel Eurocalas, en Calas de Mallorca, y el valor de la presunta estafa estaba cifrado en 13,9 millones de euros.

La citada denuncia interpuesta por el Grupo Miralles se amplió posteriormente al atisbar indicios de que la mercantil que avaló la operación incurrió en un delito de alzamiento de bienes para evitar posibles embargos. En el marco de este caso, sobre el empresario y sus seis hijos, también imputados, pesa una fianza de responsabilidad civil de 18,5 millones de euros, mientras que también tienen retirado el pasaporte y prohibido abandonar el territorio nacional sin previa autorización judicial.

Además, Ruiz-Mateos está inmerso en otros dos procesos judiciales en Baleares. En el Juzgado de Instrucción número 5 de Palma está imputado por presunta estafa por valor de unos 12 millones de euros en la compra de la sociedad Hoteles Costa Oriental a la familia Hoz y en el Juzgado número 9 de Palma por otro caso similar denunciado por Inversiones Insulares Radó.