Reducir costes con la tecnología, el reto de las agencias

En la mesa moderada por Ricardo Fernández, managing director de Destinia, David Hernández insistió en que "la tecnología es vital para poder competir, porque ahora mismo el cliente tiene mejores herramientas para hacer una reserva online que las propias agencias".

Expuso un ejemplo muy gráfico. A un agente de viajes de Pangea le puede llevar hasta ocho horas diseñar un paquete turístico personalizado a Perú. El reto, señaló, es conseguir que esa labor se pueda realizar en media hora y eso solo es posible con la adopción de una tecnología adecuada y evitar de esta manera que vender un viaje sea "una pequeña odisea" como lo es ahora mismo.

En eso están trabajando en Pangea, en colaboración con otras agencias, para aprovechar "la oportunidad de los fondos europeos" Next Generation y lograr desarrollar una tecnología que sirva a todo el sector y permita reducir el coste que supone diseñar un viaje a medida.

En las agencias, "lo que tenemos que hacer son ajustes de costes con nuevas tecnologías, ya que el precio va a ser difícil que cambie”, señaló.

Por otro lado, apuntó otro gran reto para las agencias físicas, y no es otro que la necesidad de "captar al cliente online, para llevarlo a la agencia física".

Recordó a los agentes de viajes que, en estos momentos, "la calle más transitada es Google y es ahí donde se tiene que captar al cliente".

Y una vez que esté el cliente en la agencia, los profesionales tienen que ofrecer una "experiencia de compra" totalmente personalizada, porque en la actualidad "se puede comprar cualquier cosa por Internet".

Señaló que cuando un cliente va a una agencia "busca a un experto" y "demanda viajes a medida", por eso recalcó es fundamental la "especialización" en un determinado ámbito del mundo de los viajes.

Retos y oportunidades tras la pandemia

Tras recordar la delicada situación que atraviesan las agencias de viajes por el impacto de la pandemia que lo han dejado como un sector "fuertemente descapitalizado", Javier Andrés apuntó varios de los retos que afrontan las minoristas.

Entre ellos, destacó el desafío que supone para las empresas responder al auge de las reservas de última hora que ha generado la pandemia y que permanecerá en el mercado. El periodo desde que el cliente compra el viaje hasta el momento de la salida "se está estrechando", advirtió Andrés.

Otra novedad es que hay una creciente demanda de los viajeros de información sobre los de seguros viajes y sus coberturas, una tendencia que supone una "oportunidad" para revalorizar la intermediación del agente de viajes.

Sobre la evolución de los precios de los distintos productos turísticos, el directivo de Logitravel vaticinó que el "el aéreo ha bajado y va a continuar bajando", al igual que sucederá con los cruceros, que tendrán que reducir sus tarifas para volver a captar clientes tras el impacto de la COVID-19.

En cambio, en el ámbito del destino España, que se ha beneficiado durante estos meses de las restricciones en los viajes internacionales, Andrés opina que se van a mantener los precios tal y como hasta ahora.