Boris Johnson descarta más restricciones antes de Navidad, pero no después
Las opciones presentadas al Gobierno van desde el cierre de bares y pubs a un nuevo confinamiento
Publicada 21/12/21 11:47hEl Gabinete de Boris Johnson está haciendo un seguimiento "hora a hora" del avance de la variante ómicron en el Reino Unido, y no descarta tener que imponer nuevas restricciones, aunque ha decidido posponer cualquier decisión y tomarla, si hace falta, después de Navidad. Las críticas del sector de los viajes, de la oposición laborista y de sus propios compañeros conservadores han frenado la idea de aplicar esta semana nuevas medidas, no descartándolas sino posponiéndolas para justo después de Navidad.
La Agencia de Seguridad y Salud del Reino Unido confirmó este martes 15.363 nuevos casos de infección por la variante ómicron en 24 horas en el país, llegando el número de casos totales a 60.508.
El primer ministro Boris Johnson dijo, tras la reunión, que "la situación con la variante ómicron es extremadamente difícil", y que los argumentos a favor de más restricciones son convincentes, aunque también aseguró que el Gobierno "se reserva la posibilidad de acometer nuevas restricciones más adelante", y no antes de Navidad.
"Desafortunadamente, debo decir a la gente que debemos reservarnos la posibilidad de tomar nuevas medidas para proteger a los ciudadanos y la salud pública, y proteger nuestro sistema nacional de salud, y que si hace falta no dudaremos en adoptarlas", dijo Johnson a la BBC
El primer ministro hizo un llamamiento a la prudencia y a la responsabilidad, y de nuevo convocó a todos a ponerse la vacuna de refuerzo, la tercera dosis, porque "no puede ser más urgente".
Así se lo ha dicho Johnson a los británicos:
¿Vuelta a la fase 2?
Según el Daily Mirror, las medidas que el Gabinete estaría contemplando para después de la Navidad se parecerían mucho a las que se tomaron en la etapa 2 de la desescalada, en abril. Entre ellas está la prohibición específica de los viajes internacionales por ocio.
Boris Johnson dijo que estaban contemplando "todo tipo de medidas" para mantener a la variante ómicron bajo control y que no descartaban ninguna. Una de las posibilidades que está sobre la mesa sería, según Sky News, un nuevo confinamiento.
El grupo de asesores científicos del Gobierno advirtió este lunes de que sin más restricciones, la cifra diaria de ingresos hospitalarios podría llegar a los 3.000.
Según Sky News, los asesores presentaron a Johnson varias opciones.
Varias opciones se contemplan
La primera sería aconsejar a los ciudadanos que limiten los contactos dentro de los hogares, no sería una obligación pero sí la recomendación de restringir las reuniones familiares durante las fiestas. Es algo que la primera ministra de Escocia, Nicola Sturgeon, ya recomendó la semana pasada. De hecho, este mismo martes Sturgeon anunció nuevas medidas a partir del 26 de diciembre: límites al aforo en eventos públicos, distancia social de un metro requerida en todos los eventos y partidos de fútbol sin espectadores.
La segunda, implicaría obligaciones en cuanto a las reuniones familiares y en el interior de los hogares, distancia social y toque de queda. En este caso, como se trataría de obligaciones, sería necesaria la aprobación del Parlamento.
La tercera opción sería el confinamiento total, volviendo prácticamente a la casilla de salida, con la gente encerrada en casa pudiendo salir a la calle solamente por razones de peso, y los colegios y universidades volviendo a las clases online. Esta medida también requeriría la aprobación del Parlamento.
Sea como sea, las medidas más restrictivas no llegarán antes de Navidad, según los miembros del Gabinete, aunque sí podrían ser planteadas a partir del "Boxing Day", que es el 26 de diciembre. Así, se dejaría a las familias disfrutar de la Navidad sin más medidas y con recomendaciones, pero inmediatamente después podría aplicarse el cierre de restaurantes y pubs, algo que recomiendan los científicos.
Sí pero no
El Gobierno de Boris Johnson sigue siendo fiel a su hábito de decir una cosa y la contraria en un breve espacio de tiempo, en declaraciones de los ministros a los medios de comunicación.
El 14 de diciembre, con una incidencia acumulada de 963,76 nuevos casos por cada 100.000 habitantes a 14 días, el ministro de Sanidad, Sajid Javid, reconocía que las estrictas medidas impuestas a los viajes eran "superfluas", porque pretendían evitar la entrada de Ómicron y en cambio, esta variante ya se había extendido por todo el país.
Javid dijo entonces que la posibilidad de eliminar las restricciones a los viajes internacionales era algo que "ya he planteado a mis colegas del Departamento de Transportes y espero que podamos actuar pronto", según aseguró.
Sobre recientes medidas en Reino Unido:
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Las medidas adoptadas desde principios de mes habían sido calificadas de "draconianas, costosas y complejas" por los diputados laboristas que, sin embargo, las apoyaron en el Parlamento por un "deber patriótico", y de "desproporcionadas" por el sector.
El primer ministro vivía en el Parlamento una crisis de su propio grupo conservador, consiguiendo aprobar las medidas con los votos de los diputados laboristas porque 98 de sus compañeros de bancada votaron que "no", como publicamos en Cómo la variante Ómicron puede ayudar (o hundir) a Boris Johnson.
La campaña de vacunación con la dosis de refuerzo, que ya ha recibido el 50% de los adultos (29,8 millones de personas, según cifras de este martes), según el Gobierno, es el dardo político al que se agarra el primer ministro para luchar contra la variante ómicron y también contra sus dificultades dentro de las filas conservadoras.
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