Cómo es el nuevo turista británico surgido tras la pandemia

Este contenido ha sido publicado en la revista HOSTELTUR de abril. Puede descargar el documento PDF en el siguiente enlace:

Los círculos de confianza se están volviendo más pequeños y locales, y ejemplo de ello es que los británicos estrechan vínculos con sus vecinos (+17%) y compañeros de trabajo (+9%), según las conclusiones del Barómetro global de confianza de la agencia Edelman. El 85% de ellos se muestra preocupado por el desempleo y tres de cada cuatro por el cambio climático. A ello se suma, tras dos años de restricciones por la pandemia, una mayor inquietud por las libertades individuales.

El 52% de los británicos además considera que las empresas no están haciendo lo suficiente para afrontar el cambio climático y reclama más compromiso por su parte en todos los campos. Las entidades deben así trabajar para demostrar que su interés se enfoca en servir de manera justa a todos por igual y no sólo a algunos. De hecho un 78% opina que los CEO deben adoptar una postura más firme respecto a políticas sociales o la labor que su compañía desempeña para beneficiar a la sociedad. No en vano un 52% compra o apoya a marcas según sus valores. Y en línea con todo ello, sólo el 30% de los británicos cree que la economía mejorará en cinco años.

El porcentaje de británicos que compra o apoya a marcas según sus valores se eleva ya al 52%, según los resultados del Barómetro global de confianza de la agencia Edelman. Foto: Adobe Stock.

En este sentido Pelayo Alonso, codirector general y responsable de marca de Edelman España, admite que “vivimos en un contexto volátil y lleno de desafíos históricos en el que las empresas, consideradas más éticas y competentes, generan más confianza que gobiernos e instituciones como agentes del cambio. Los británicos, al igual que alemanes y españoles, les reclaman asumir ese liderazgo social y ejecutar con éxito planes y estrategias socialmente responsables”.

Para Pelayo Alonso “es una responsabilidad enorme pero también una oportunidad única para todas aquellas compañías que sepan escuchar para saber cómo responder a lo que se les está demandando. Porque el consumidor les premiará o penalizará en función de ese comportamiento”

Y es que, según ha añadido, “estamos inmersos en un ciclo de desconfianza que nos debilita como sociedad y la única forma de romperlo es que toda institución asuma la necesidad y la demanda existente de implicarse más en temas sociales que son importantes para los consumidores. Y deben hacerlo brindando información clara, coherente y basada en hechos reales, porque la higiene informativa es otra de las claves para romper con ese ciclo de desconfianza”.

¿Conciencia sostenible real o simple postureo?

A pesar de todo ello, Statista constata en su informe sobre cómo viajaremos este año que muchos turistas no quieren preocuparse en sus vacaciones y tampoco están bien informados. En el caso de los británicos, sólo un 16% estaría dispuesto a pagar más por un viaje sostenible, mientras que un 17% no sabe qué hace que un proveedor turístico sea respetuoso con el medioambiente. Y desde luego más de un 30% quiere disfrutar de sus vacaciones sin inquietarse por políticas.

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Sin embargo, el 62% asegura que la amenaza del cambio climático ha tenido un impacto en su comportamiento viajero: ahora son más cautelosos con su alojamiento (25%), evitan viajes de larga distancia y se informan del impacto medioambiental de su viaje (un 23% en ambos casos). Pero sólo el 22% cambiaría sus planes de viaje internacional a doméstico para ser más sostenible -el 71% directamente lo descarta-, y un 15% evitaría viajar al extranjero.

Vuelven las vacaciones de 15 días

Pero lo que tienen claro los británicos es que después de dos años de restricciones -un 85% no ha viajado a otro país durante ese tiempo-, están dispuestos a disfrutar de vacaciones más largas y con mayor presupuesto, como constata el último informe de hábitos viajeros de Marriott Bonvoy, el programa de fidelización de Marriott International. Prueba de ello es que ocho de cada 10 afirman que este verano gastarán más que antes de la pandemia, en torno a 1.200 libras por persona, siendo los más jóvenes, los de la Generación Z, los que destinarán más dinero a sus vacaciones, 1.481 libras. También son los que más saldrán de viaje al extranjero, un 65% de los encuestados frente al 40% de media.

Con este ánimo viajero, vuelven las vacaciones de 15 días para cuatro de cada 10 de ellos, algo que el 30% no ha puesto en práctica en más de una década. Esta tendencia convive con la de los viajes multidestino, al haber manifestado el 45% de los encuestados -el 61% entre los menores de 25 años- su deseo de salir de vacaciones este verano más que antes de la pandemia. La búsqueda de relax y disfrutar sin preocupaciones son las principales motivaciones para un tercio de ellos, mientras un 17% sueña con hacer un viaje de una vez en la vida.

Viajar fuera de temporada

El incremento de la intención de viajar no se limita a la temporada alta, ya que precisamente los mayores aumentos se están produciendo en los desplazamientos fuera de temporada, aprovechando la flexibilidad laboral del teletrabajo. Precisamente los británicos, junto con holandeses y alemanes, copan el 60% de las reservas de las viviendas vacacionales de Belvilla by OYO en España para mayo y junio, que han subido un 136%, frente al 30% que han crecido para julio y agosto.; al igual que para el otoño. Estos viajeros, según ha destacado su directora de Marca, Hanita van der Meer, “prefieren evitar el verano porque logran mejores precios, pueden disfrutar de los destinos sin aglomeraciones y, muy posiblemente, con un tiempo menos extremo”.

Hábitos de reserva directa

Aunque la pandemia, en líneas generales, ha reducido la anticipación de la reserva en todos los mercados, los británicos siguen siendo los que compran su viaje a España con más antelación, como ha confirmado The Hotels Network (THN) en su análisis de las reservas realizadas en el último mes. Así, si la anticipación media en las webs de los hoteles es de casi dos meses, en el caso del turista británico alcanza cerca de los 70 días. La duración de su estancia también es superior, 4,3 noches frente a las 3,6 de media, si bien buscan estancias incluso más largas, de 4,6 jornadas.

Sí siguen la tendencia de otros mercados europeos en cuanto el uso de dispositivos: el móvil para buscar información de su próximo viaje en el 52,2% de los casos, pero la conversión de la reserva directa es mayor en los ordenadores.

En el canal directo sus destinos favoritos en las reservas del último mes analizadas por Mirai son Canarias (32%), Baleares (21%), Andalucía (15%), Comunidad Valenciana y Cataluña (en ambos casos con un 12%). Se decantan preferentemente por hoteles de 4 estrellas (55,8%) y de 3 (23,1%), con desayuno incluido (37%) o sólo habitación (33%), que reservan con hasta dos meses de antelación en el 40% de los casos y para una estancia media de entre tres y cinco noches (39%) o entre seis y ocho (31%).