Los empresarios hacen los deberes para no descuidar al español este verano

El año pasado las pernoctaciones hoteleras cerraron en 172 millones y, sobre ese total, los residentes realizaron 90,4 millones. En cuanto a las noches en alojamientos turísticos extrahoteleros (apartamentos, campings, alojamientos de turismo rural y albergues), el emisor nacional también superó al internacional, con 144,8 millones de pernoctaciones frente a las 113,8 millones de turistas internacionales.

Con respecto a los hoteles, entre el turista nacional ganaron por goleada los establecimientos de gama más alta (46 millones de pernoctaciones) frente a los de gama media (33,1 millones). Desgranado por tipología, 3,7 millones de estas pernoctaciones de viajeros nacionales se realizaron en establecimientos de 5 estrellas, 43 millones en aquellos de 4 estrellas, y se hicieron 22,4; 7,5 y 3,2 millones de noches respectivamente, en hoteles de 3, 2 y 1 estrellas.

En cuanto a pernoctaciones extrahoteleras, el liderazgo entre los viajeros españoles fue para los campings, con 24,1 de pernoctaciones, seguidos de los apartamentos, con 20,3 millones, los alojamientos de turismo rural, con 7,8 millones, y los albergues, con 2 millones de noches.

No descuidar al nacional

La consultora Braintrust estima que los viajes por España de los españoles absorberán el 85%, frente al 82,8% del año pasado y eso ocurrirá “porque los viajes europeos pasarán del 12,6% en 2021 al 9,5% en 2022, y los de largo radio de 4,5% al 5,5%”

“El turista español todavía jugará un rol muy importante porque la actual situación, sobre todo de crisis bélica, hará que los españoles piensen dos veces en volver a las costumbres habituales de salir a viajes de largo recorrido y habrá muchos que busquen de nuevo destinos en España”, cree Nuria Montes, secretaria general de Hosbec, la patronal hotelera de la Comunidad Valenciana.

Según estimaciones de la consultora, este año entre el 72% y el 74% de los viajes en España corresponderán a españoles y los extranjeros supondrán entre el 26 y el 28% de la cuota, lo que se traduce en un incremento respecto al 2019, cuando los nacionales suponían el 68% del total

“Una de las cosas que tenemos que aprender es a prestar más atención al turista nacional. Se confía mucho en el turista asiático o en el americano, porque gastan más, pero visto que los ‘cisnes negros’ aparecen cada año, a veces desperdiciamos la importancia del turista español. Se le pone poca atención y hasta les denostamos. Es verdad que gasta menos, pero es el que desde hace tres años está sosteniendo a la industria", asegura Ángel García Butragueño, director de Turismo de Braintrust

Estos datos confirman que el mercado doméstico volverá a tirar del carro y por eso será necesario contar con una oferta que los contenga.

Cambios

Pero, más de dos años después del inicio de la pandemia, ¿cómo ha cambiado la oferta hotelera y extrahotelera española? Muchos establecimientos han aprovechado el parón provocado por la COVID para proceder a su “renovación y cualificación”, explica el presidente de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT), Jorge Marichal, que señala que mucho más allá de implementar todos los protocolos necesarios debido a la crisis sanitaria, los establecimientos han dado un paso adelante y han aprovechado para endeudarse y hacer obras, “ya que era el momento apropiado para poder hacerlo”.

El resultado es “una planta alojativa mejor, más preparada, más formada incluso que antes, que ha avanzado en la eficiencia energética y que va a utilizar mejores herramientas digitales porque se ha aprovechado también este proceso para entrar en esa digitalización”, según Marichal

Estos hoteles reformados encaran la temporada de verano de la mejor manera: “vamos a tener casi todo el sector turístico abierto”, detalla Marichal -el pasado verano no abrió un 18% de la planta-. Las previsiones son muy halagüeñas para la temporada.

¿Qué va a demandar este viajero nacional en este año que ya se atisba como de recuperación? El presidente de los hoteleros ya avanza un “revival” con respecto a la época del coronavirus: destinos de exterior, van a seguir estando de moda productos pequeños muy diferenciados o los hoteles de alta calidad, entre otros. “La gente que tiene su presupuesto cuando decide no salir al extranjero sino quedarse más cerca, la cantidad que dedicaba al transporte ahora la invierten en otras cosas, sobre todo en darle mayor importe a la inversión en la experiencia hotelera. Así, se ha visto que los hoteles de 5 estrellas se han comportado mejor durante la pandemia, y eso porque la gente ha tenido mayor renta disponible para invertir en estancias. Esto es algo que se puede ver de nuevo este verano”, anticipa. De modo que esas 46 millones de pernoctaciones de 2021 en hoteles de mayor categoría podrían superarse con creces.

La planta alojativa de España ha aprovechado la pandemia para mejorar sus instalaciones y adaptarse a las nuevas demandas.

¿Cómo van a evolucionar los precios este año? El presidente de los hoteleros llama a considerar una serie de factores -subida de los precios energéticos, carburantes y suministros- que muy posiblemente van a acabar repercutiendo en las tarifas. “Cada uno hará con los precios lo que tenga que hacer pero hemos de tener en cuenta que hay muchos factores exógenos que están afectando a nuestro sector, como el combustible, la energía eléctrica o el precio de las materias primas, porque se está trasladando al mercado todos los efectos de la guerra en Ucrania. Eso puede afectar, aunque cada establecimiento aplicará los márgenes que considere”, señala.

“El precio siempre es un factor decisivo, absolutamente fundamental, pero es imposible ofrecer productos a precios económicos tal y como está el incremento de costes. Ahora mismo producir una pernoctación hotelera es aproximadamente un 25% más caro que en 2019, así que es inviable entrar en un mercado de oferta-contraoferta para conseguir clientela. Eso sí, habrá que mejorar los servicios por el precio que se paga”, asegura la secretaria general de la patronal hotelera de la Comunidad Valenciana

Ecoturismo y turismo rural

En los últimos años ya se venía registrando un aumento en la oferta de los establecimientos de ecoturismo y se ha convertido en un boom a raíz de la COVID-19, señala Amanda Guzmán, gerente de la Asociación de Ecoturismo en España. “De un tiempo a esta parte, cada vez hay más empresas interesadas en ofrecer actividades de ecoturismo que nos están pidiendo adherirse al club. Vemos un mayor interés por este tipo de experiencias de productos, de diferenciarse dentro del turismo rural en particular, para sumarse a la parte de turismo de naturaleza y de sostenibilidad”, indica.

Según un Informe sobre la demanda de Ecoturismo en España, un 64,9% de los ecoturistas visitaron el espacio natural por primera vez en 2021. Y los datos del Observatorio del Turismo Rural, de EscapadaRural.com, confirman que cada vez hay más gente practicando esta modalidad de viajes: el año pasado el 41% de los españoles mayores de 18 años hizo turismo rural y “las perspectivas para este año son buenas”, comenta Judith Monmany, responsable de comunicación de la plataforma. Si bien aún no se alcanzan las cifras prepandemia, el año pasado las pernoctaciones en estos alojamientos llegaron a 7,8 millones y los turistas han incrementado su gasto en un 7%, pasando de 28 a 30 euros por persona/noche.

El contacto con la naturaleza (40%) y el desconectar de la rutina (24%) son las dos primeras motivaciones para una escapada rural, y lo más valorado es la abundancia de opciones al aire libre (70%). En 2022, los destinos favoritos son Asturias (19%), Andalucía (16%), Aragón (11%) y Castilla-León (8%). Este sector, de moda tras la pandemia, va camino a recuperar las estancias perdidas, pero Judith Monmany reconoce que todavía afronta el reto de la digitalización y la sostenibilidad, algo que Guzmán también destaca.

El sector había implementado medidas de sostenibilidad pero con la pandemia algunas se han tenido que suspender. “Se ha generado un problema con el uso de plásticos y envases individuales. Veníamos de una apuesta por reducir su uso y que todo fuera a granel, pero la COVID nos ha obligado a dar marcha atrás”, indica la gerente de la Asociación de Ecoturismo.

En cuanto a la digitalización, “vemos que establecimientos que no estaban tan acostumbrados a estas herramientas digitales, sí las han implantado, con lo que ha mejorado su gestión”, señala Guzmán, que pone la voz de alarma sobre una de las carencias: “todavía tenemos auténticos agujeros negros en nuestros espacios rurales, a los que no llega internet ni una cobertura móvil adecuada”, denuncia.

Viajes en familia

En Braintrust creen que en 2022 “habrá menos viajes en familia respecto al 2021 y más viajes con amigos o en solitario, porque el año pasado había limitaciones en la interacción social y por tanto se viajaba con el círculo más cercano”, sin embargo el segmento seguirá siendo estratégico.

Un estudio de la Federación Española de Familias Numerosas y la consultora DNA, publicado en enero, plantea que el 67,86% de las familias tiene previsto gastar más en viajes que en 2021, siendo los destinos de sol y playa los más demandados (56,84%), seguidos por el entorno rural interior (19,47%). A la hora de escoger tienen en cuenta la adaptación de los establecimientos, las medidas sanitarias y el 53% dice que es muy importante que el destino cuente con una oferta de actividades diseñadas y pensadas para familias con niños.

“El año pasado muchas familias apostaron por campings y turismo rural porque hubo una asimilación de que era turismo seguro, pero en destinos de sol y playa tuvimos indicadores de ocupación muy buenos, y pensamos que este año los clientes seguirán fieles”, señala Nuria Montes.

“Aunque con la pandemia hayamos bajado los niveles de ocupación y sufrido un recorte de la duración de la temporada, mantenemos el reconocimiento de destino familiar, por cómo se han adaptado la oferta, los servicios, las actividades, las piscinas y equipamientos. Y también porque tenemos playas seguras, parques acuáticos, parques de atracciones y turismo cultural, que son focos interesantes para complementar la experiencia en el destino”, señala María José Aguiló, vicepresidenta ejecutiva de la Federación Empresaria Hotelera de Mallorca (FEHM). “Hay un gran abanico de posibilidades, algo que valora el consumidor que busca opciones que tengan a la familia distraída con actividades”, asegura.

Este año la cuota de turismo familiar podría verse reducida, pero entre los que viajen el camping se ha posicionado como una opción.

Campings

El 40,4% de las pernoctaciones extrahoteleras del 2021 corresponde a campings y eso se debe, como explica Àngels Ferré, presidenta de la Confederación de Campings del Mediterráneo (CCM) a que “el turista nacional ha redescubierto lo que es viajar en su propio país y la búsqueda de alojamiento en entornos naturales, al aire libre, que garantizasen las medidas de seguridad sanitaria, ha atraído al turista no campista”.

La temporada pasada se impuso el fenómeno del autoracavana a nivel nacional y, conscientes que es una tendencia en crecimiento, han tomado cartas en el asunto para este verano. “Hemos ampliado las prestaciones que ya veníamos ofreciendo para adaptarnos a la nueva demanda: parcelas especiales, tarifas de pernocta más económicas, servicios de vaciado de aguas grises/negras ecológicas y automatizadas”, comenta la presidenta de CCM. Pero no es lo único, porque los usuarios y sus valores han ido evolucionando y con ellos la oferta de los campings.

“La digitalización, la sostenibilidad y el respeto al medio ambiente son los nuevos valores que enarbola nuestra sociedad, y el sector del camping no se está quedando atrás. La naturaleza es nuestro mayor activo y somos los primeros interesados en cuidar de ella. La sostenibilidad, en nuestro caso, radica en encontrar un equilibrio entre nuestra actividad y los recursos que nos rodean. ¿Cómo lo materializamos? Con sistemas de energías renovables, modelos de reciclaje de residuos y con instalaciones e infraestructuras que se mimetizan en armonía con el entorno”, explica.

Tras plantear que “las perspectivas para la nueva temporada apuntan buenos augurios”, Ferré remarca que eso se debe a que “el sector del camping ha dejado de representar al pariente pobre de los alojamientos turísticos. Llevamos muchos años de evolución para convertirnos en destinos con personalidad propia”.