Los hoteles de la Costa del Sol superan en mayo la ocupación prepandemia

La ocupación de este mayo se situará en el 78,74%, mientras que en el mismo mes de 2019 fue del 78,4%.

Sin embargo, AEHCOS advierte que las previsiones para los meses de junio, julio y agosto aún están por debajo de lo esperado.

"Queremos ser optimistas y suponemos que finalmente las cifras de ocupación serán muy parecidas o ligeramente inferiores a las de 2019, porque parece que los turistas han modificado sus hábitos y las reservas son ahora más tardías", explica el presidente de la asociación, José Luque.

La ocupación hotelera para el conjunto del año estará alrededor de un 6-7% por debajo de 2019.

Además de la recuperación de las cifras de ocupación hotelera y su consiguiente impacto en la economía malagueña, la patronal destaca otro dato que refleja que "el sector está retomando la tan ansiada normalidad" y eso no es otro que la llegada de los turistas internacionales.

"Basta pasear por cualquier rincón de la Costa del Sol para comprobar cómo las calles han vuelto a acoger de nuevo a turistas internacionales en mayor medida", señalan desde la asociación.

De hecho, en mayo, un 65% del total de visitantes que ha recalado en la provincia procede de otros países, ligeramente por debajo que lo incialmente previsto por los hoteleros.

Los destinos más demandados por los turistas durante este mes han sido Málaga (87,42%), Benalmádena (81,27%), Fuengirola (81,11%), Antequera (78,61%) y Marbella (76,92%).

Pronóstico para los meses estivales

Las previsiones para junio, julio y agosto aún no son lo optimistas que desean los hoteleros de la Costa del Sol, ya que distan de las alcanzadas en 2019.

Así, las primeras estimaciones apuntan a que junio cerrará con un 78,53%, frente al 83,78% de 2019, y la presencia internacional escala hasta el 70%.

Por su parte, para julio, un mes plenamente vacacional, se prevé una ocupación similar a la de junio: un 78,79% frente al 84,20% de 2019.

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Respecto al mes de agosto, arroja unos datos "preocupantes", ya que, de momento, solo se prevé una ocupación de 77,27 por ciento frente al 89,73% alcanzado antes del año de referencia.

En cuanto a los destinos, AEHCOS observa poca variación entre junio y julio. En agosto sí que repuntan algunos municipios como Benalmádena, Fuengirola, Marbella y la capital, que rondan el 80% de ocupación y el algunos casos se sitúan por encima, llegando al 83,60% en el caso de Fuengirola.

Balance anual

Sobre las previsiones para el conjunto del año, José Luque confía en que las cifras previstas para los meses estivales se recuperen conforme se acerquen las fechas clave.

"Creemos que la ocupación será mayor de la que hoy prevemos, puesto que el volumen de plazas de transporte aéreo disponibles para el aeropuerto Málaga-Costa del Sol de esos meses está por encima del año 2019. Esto nos hace pensar que los resultados del verano serán similares al año prepandemia", afirma.

La asociación apunta que la clave para saber si Málaga ha recuperado la normalidad previa a la crisis sanitaria estará en el balance del último trimestre del año y el otoño será determinante para conocer cómo se cerrará 2022.

En principio, adelanta AEHCOS, todo apunta a que el cierre del año va a estar alrededor de un 6-7% por debajo de 2019, pero existen variables que aún arrojan cierta incertidumbre sobre el sector, tales como el devenir del conflicto bélico en Ucrania, que puede marcar las preferencias de los destinos en los viajes, las reservas de última hora y los cambios que se están produciendo en la distribución y la demanda.

"Lo que sí es ya una evidencia y un balón de oxígeno para el sector es la recuperación de los tradicionales mercados europeos, con una importante demanda, dado que ya en junio la cifra alcanza el 70% de turistas internacionales", concluye.