El nuevo decreto de hoteles tendrá efecto de moratoria en la Costa del Sol

Acabar con la masificación y alcanzar así el justo equilibrio entre una correcta ordenación del territorio y un turismo sostenible. Ésta es la base en la que se sustenta el futuro Decreto de Ordenación de Hoteles que será una realidad en septiembre. De momento es un borrador, pero cuando entre en vigor se convertirá de hecho en una moratoria hotelera para las zonas del litoral que actualmente se encuentran masificados, como la Costa del Sol. La Mesa del Turismo, en la que están representados la Junta, sindicatos y empresarios, se reunió nuevamente ayer para continuar con los trabajos de elaboración de este decreto que, sin duda, dará que hablar. «Va a reflejar a través de esta vía la perfecta armonía entre los intereses de ordenación del territorio y la actividad hotelera», indica el viceconsejero de Turismo, Javier Aroca. En este sentido, añade que, con el decreto en vigor, será muy difícil «construir un hotel en cualquier parte». Para ello, se exigirán una serie de requisitos según la tipología del hotel, ya sea del litoral, interior o urbano. «Los requisitos van a ser de tales características que solamente se van a poder crear hoteles en las parcelas y edificios más adecuados en función de unos criterios que harán posible poco a poco ir ajustando la oferta y la demanda hotelera en Andalucía», indica. Por ejemplo, para los establecimientos en zonas costeras, el decreto exigirá parámetros muy elevados; en el interior, se pretende dar respuesta al auge de los últimos años siempre respetando su entorno; y en la ciudad, los requisitos irán más enfocados al turismo cultural y de congresos y convenciones. En general, el decreto recoge los estándares de calidad relativos a la eficiencia y eficacia energética, la utilización de fuentes de energía renovables, es decir, -«parámetros de exigencias que antes no se exigía y ahora se deben pedir»,apunta- nuevas tecnologías, comunicaciones, eliminación de vertidos, aislamiento o ruido. «Una tipología amplísima que iremos debatiendo a lo largo de sucesivas reuniones», dijo. Además, la norma recoge que los establecimientos andaluces deberán pasar un examen de calidad cada cinco años y garantizar así su categoría y servicio. Actualmente, la apertura de un expediente sancionador es el único trámite existente para bajar de categoría a los hoteles que no cumplen los requisitos. (S.F., diario Sur, 30/05/03)