El Puerto de Barcelona denuncia la campaña anticruceros de Ada Colau

"No entendemos esta obsesión con los cruceristas", asegura Calvet en una entrevista con Efe, en la que reivindica el "modelo Barcelona" para abordar esta cuestión, ya que a su juicio es "el más inteligente" de todos los posibles.

Calvet enmarca las recientes palabras de Colau contra este tipo de turismo en un ambiente de precampaña electoral de cara a las municipales del año próximo, coincidiendo con que la primera edil ya ha anunciado que volverá a optar a la reelección.

Argumentos a favor de los cruceros

El argumentario de Calvet se basa en cuatro puntos, comenzando por el hecho de que los cruceristas representan apenas el 4% de los turistas de Barcelona: "O sea, que si vas a un lugar masificado con 100 personas y quitas cuatro siguen quedando 96".

Ese 4% tiene "un impacto económico y laboral inmenso"

Con todo, este 4% tiene "un impacto económico y laboral inmenso" en la ciudad: 1.000 millones de facturación y unos 9.000 puestos de trabajo directos e indirectos.

Además, Calvet afirma que "el eventual impacto ambiental está muy acotado, entre otras cosas, porque está muy vigilado": los cruceros concentran el 0,73% de las emisiones de óxidos de nitrógeno en Cataluña y el 0,23% de emisiones de partículas contaminantes.

Damià Calvet, presidente del Puerto de Barcelona

El acuerdo de los cruceros de Barcelona, "mejor que el de Valencia, Venecia o Dubrovnik"

Pero, ante todo, Calvet argumenta que "no vale ningún otro modelo que el que se ha puesto sobre la mesa que no sea el modelo Barcelona", resultado de un "acuerdo modélico" cerrado en 2018 con el Ayuntamiento -ya encabezado por Colau, recuerda- y, para él, "mejor" que los rubricados en Valencia, Dubrovnik (Croacia) o Venecia (Italia).

El acuerdo contempla que los cruceros se concentren en siete terminales en el Moll Adossat, lo que también permite "abrir el Moll Barcelona a la ciudad". Es decir, "limita el espacio" en el que pueden amarrar las naves.

"No podemos estar diciendo un día una cosa y otro otra, dando mensajes equivocados. Cuando las navieras escucharon que el Ayuntamiento quería limitar los cruceros, lo primero que hicieron fue llamar al Puerto", lamenta.

Siete terminales de cruceros

De las citadas siete terminales, tres las gestiona Global Ports y dos Carnival, mientras que en las otras dos ya han comprometido inversiones MSC y Royal Caribbean: "Esto nos situará como referencia en unos niveles de calidad brutal. Tendremos las navieras más relevantes del mundo en línea, lo que no pasa en ninguna parte".

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La nueva polémica acerca de los cruceros tiene lugar cuando Barcelona vuelve a llenarse de turistas tras la crisis de la covid-19 y pese, al menos de momento, al encarecimiento del coste de la vida.

Para 2022 hay previstas unas 800 escalas de cruceros en el Puerto, las mismas que antes de la pandemia, si bien el número de cruceristas es menor porque las naves tienen menor demanda

"Estamos en una recuperación progresiva con el objetivo de llegar a cifras prepandemia", cuando en 2019 se alcanzó la cifra récord de 3,1 millones de cruceristas. Calvet, asimismo, no prevé que aumente en los próximos años el número de escalas realizadas en Barcelona.

En la mesa constituida para regular los cruceros en Barcelona, de la que forman parte Ayuntamiento, Generalitat, Gobierno del Estado y Puerto y que ya se ha reunido una vez a mediados de julio, Colau propuso limitar los cruceros que llegan a la ciudad a tres al día.

Las previsiones del ejecutivo municipal son que, pese a la estabilización de la llegada de cruceros en los próximos años, la cifra de cruceristas sobrepase los 3,5 millones en 2030.

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