Airbus recorta 600 empleos en España

Así lo ha asegurado el vicepresidente ejecutivo de la división Airbus Military, Rafael Ureña, quien ha insistido en que la nueva estructura del Grupo Airbus simplifica la posible transferencia de empleados, permitiendo a la empresa "una mayor flexibilidad". Apuntó asimismo que, siempre que pueda, no reemplazará a los empleados que se jubilan para reducir el número de trabajadores que serán despedidos.

Con la aplicación de medidas como bajas voluntarias y no renovar contratos temporales que ascieden a unos 1.300 empleos, Airbus estima reducir la plantilla en entre 1.000 y 1.450 empleados, en función del éxito de las dichas medidas. El grupo espera alcanzar un acuerdo con los sindicatos antes de julio de 2014.

Airbus recorta 600 empleos en España hasta 2016

Ureña ha recalcado que el grupo está registrando crecimientos en la división de aviones comerciales de Airbus, por lo que se necesita personal en las plantas de Illescas (Toledo), Getafe y Puerto Real, y empleados en excedente serán "formados para que se incorporen a las zonas productivas".

“Nadie se quedará sin trabajo”

Paralelamente, ha recordado que todos los años hay personal desplazado, trabajadores a los que se les forma, da incentivos y cuando la situación se normaliza se les ofrece la posibilidad de que "vuelvan a su puesto inicial".

Asimismo, Ureña ha indicado que el grupo tiene un acuerdo por el cual "nadie se quedará sin trabajo si hay un necesidad de contratar a alguien en alguna de las plantas.

“Lo que sería demencial es que si necesitamos gente en Sevilla contratásemos a alguien teniendo gente, por ejemplo, en Getafe”, ha manifestado Ureña.

De este modo, ha indicado que la empresa tiene claro que "aumentar las ventas y crecer" es el camino a seguir y que espera que a la gente que no se jubile de forma natural o no se pueda deslocalizar se pueda cubrir con "un aumento de la producción".

Así, Ureña ha afirmado que no se producirán trasvases de empleados entre distintos países, ya que "se ha llegado a un acuerdo para llevar a cabo la reestructuración a nivel nacional y además, las leyes laborales son muy distintas".

Se trata, ha explicado, de "economizar recursos" en el marco de un proceso en el que se reagrupan distintos departamentos como el financiero, el de contabilidad, el de recursos humanos o el de infraestructuras.

Reestructuración en tres años

Sobre la plantilla que no se pueda reabsorber, Ureña ha emplazado a valorar la situación en dos años, ya que el grupo se ha dado tres años para completar la reestructuración.

Sin embargo, ha reconocido que probablemente "habrá un grupo de personas para las que no habrá capacidad de reabsorción".

Finalmente, ha querido destacar que el plan que está ejecutando la empresa es "un plan social y de sentido común, al ser progresivo, y no realizarse en tres meses", y ha definido la comunicación con los sindicatos como "buena".