El programa de vacaciones de los mayores arrancó en enero, con tres meses de retraso

¿Cuántos viajes del Imserso se quedaron sin vender en la pasada temporada?

De las 816.029 plazas de la temporada 2021-2022 del Imserso, 326.987 no se cubrieron por el retraso en la adjudicación de los viajes

Publicada 03/09/22
¿Cuántos viajes del Imserso se quedaron sin vender en la pasada temporada?

El Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 ha hecho balance de la pasada temporada del programa de vacaciones del Imserso y el resultado ha sido claramente decepcionante. Solo se han vendido 489.049 plazas, el 59,93% de las 816.029 que se convocaron el año pasado. Es decir, no se han podido comercializar 326.987 plazas.

El principal motivo es por el retraso en el comienzo de los viajes, que normalmente empiezan en el mes de octubre, pero que la pasada temporada arrancó en enero por los retrasos en la convocatoria y en el proceso de adjudicación del concurso, que se repartieron Mundiplan, que gestionó los viajes de las islas y de la costa peninsular, y Turismo Social (Avoris Corporación Empresarial), que se encargó del turismo de interior.

Esta demora provocó que las ventas de los viajes en las agencias no arrancaran hasta el 14 de diciembre, con dos meses de retraso con respecto al periodo habitual.

Esto echó por tierra los planes de Mundiplan y Turismo Social, puesto que las salidas que suelen estar programadas en los meses de octubre, noviembre y diciembre no pudieron realizarse. Es decir, una temporada de viajes que normalmente se desarrolla durante nueve meses, en esta ocasión se ha reducido a solo seis meses.

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El Imserso se defiende y valora que este porcentaje de plazas cubiertas representa "una muy buena tasa de cobertura de las plazas, considerando que se inició en el mes de enero".

El balance por lotes

Los tres lotes de viajes del programa han alcanzado una tasa de ejecución muy similar, puesto que todos ellos no pudieron realizar las salidas previstas para el último trimestre de 2021.

En el caso de los viajes a la costa peninsular, se han cubierto el 59,09% de las 443.887 plazas disponibles. Es decir, no pudieron comercializarse unas 181.600 plazas.

En el caso de los viajes a Canarias y Baleares, se han comercializado el 62,04% de las 230.039 plazas convocadas. Es decir, no se pudieron vender unas 87.300 plazas.

De los viajes a la costa peninsular, no se han podido cubrir unas 181.600 plazas.

Mientras que en el lote de los viajes de turismo de interior se cubrieron el 59,12% de las 142.103 plazas ofertadas. Es decir, unas 58.100 plazas se quedaron sin poder comercializarse.

Pese a la anómala temporada, las valoraciones de los beneficiarios del programa, según el organismo público, son "altamente positivas", aunque el instituto está pendiente de una evaluación por parte de una entidad independiente.

En cuanto a la incidencia de la COVID-19 entre los viajeros, según el organismo dependiente del Ministerio de Asuntos Sociales, los viajes han sido "plenamente seguros", a pesar de que la temporada arrancó en enero, cuando aún afectaba a España la sexta ola de contagios propagada por la variante ómicron.

Para la próxima temporada 2022-2023 se ofertará el mismo número que en la anterior, menos de 820.000 plazas, pero este año sí que empezarán a venderse dentro del plazo previsto, el próximo 20 de septiembre, por lo que es probable que los primeros viajes saldrán en octubre.

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Comentarios 1
Avatar Guiarte Guiarte Guiarte Guiarte hace 2 años
Y ahora los valencianos, con dinero público, tenemos que pagar todo el lío que han montado los señores hoteleros, que tienen toda la razón, y la señora ministra comunista. Todo esto se acabaría si dicho ministerio decidiera de una vez implicarse y cambiar el sistema obsoleto de dar un paquete de millones a los mismos intermediarios de siempre, que se llevan un buen "pellizco" y que de esto no se habla. Si se molestaran en cambiar a "subvención directa" a las personas beneficiarias de estas ayudas mediante un bono con lo que les corresponda, se liberalizaría el programa. Aparecerían operadores y agencias organizando programas de viajes para captar estos bonos. Estos competirían entre sí organizando distintos programas desde hoteles de 1 estrella, o incluso apartamentos turísticos reglados, hasta hoteles de 5 estrellas. El que pueda pagarse la diferencia que se la pague. Habría muchas opciones de viajes. No habría esa aglomeración de grupos (con el peligro o brotes pandémicos que eso ocasiona) y seguro que generaría más destinos y más implicación de los hoteleros. Lo que hay actualmente es una especie de "monopolio consentido", porque ¿a ver qué operador o agencia puede competir con Mundiplan o el grupo Avoris si estos han recibido este paquete de millones del Gobierno?