British enfrenta una reclamación millonaria por cientos de cancelaciones en Heathrow

El incidente ocurrió hace poco más de dos semanas, el pasado 24 de mayo, cuando el vuelo BA762, en la ruta Londres-Oslo, se viera obligado a regresar a Heathrow poco después de despegar debido a una "falla técnica del motor", según explicó un portavoz de la compañía. Testigos en Londres aseguraron haber visto uno de los motores de la aeronave iba encedido en llamas en pleno vuelo.

British Airways dijo que los 75 pasajeros y cinco tripulantes había regresado “sanos y salvos”, luego de ser evacuados del Airbus A319, utilizando toboganes de emergencia. Sin embargo, miles de pasajeros fueron retenidos en Heathrow durante varias horas ya que el bloqueo de una de las dos pistas de aterrizaje obligó a BA a cancelar todos los servicios de corto radio hasta la media tarde.

La compañía anunció entonces que había iniciado una investigación completa sobre el incidente y está trabajando con la Air Accidents Investigation Branch (AAIB). En los primeros momentos se había especulado que el avión se había topado con una bandada de pájaros, aunque esta causa nunca fue confirmada.

El avión de British cuando regresaba a Heathrow con un motor en llamas, poco después de haber despegado.

Falla de mantenimiento

Inicialmente BA había negado que estuviera obligada a indemnizar a los pasajeros de acuerdo con la normativa europea, afirmando que las cancelaciones se habían producido en “circunstancias extraordinarias”, por lo que se suponía que había cumplido con sus obligaciones con los pasajeros que sufreron retraso proporcionándoles alimentos, bebidas y alojamiento en caso necesario.

Sin embargo, el departamento de investigación de accidentes aéreos de Reino Unido AAIB encontró que el fuego en el motor en el vuelo BA 762 no fue causado por un choque con aves como se pensaba en un principio, que habría sido clasificado como una "circunstancia extraordinaria", sino debido al hecho de que las cubiertas de ambos motores habían sido accidentalmente dejan abiertas, haciendo que se rasgaran durante el despegue.

Regulación ambigua

Raymond Veldkamp, de la organización Flight-delayed.co.uk, cuyo objetivo es hacer que las reclamaciones de indemnización en nombre de los pasajeros sean atendidas, ha afirmado que, bajo la normativa UE 261, BA estaría obligada a compensar al menos los 75 pasajeros que iban en el vuelo de Oslo.

No obstante, la aerolínea también es probable que enfrente las reclamaciones de indemnización de los pasajeros de sus otros vuelos que se vio obligada a cancelar a consecuencia directa del bloqueo causado por el coche de bomberos que auxilió al avión que regresó al aeropuerto. No obstante, aún no hay certeza de si lograrán una sentencia favorable.

Veldkamp señala que tiene plena seguridad con el reclamo de los pasajeros del vuelo que regresó por un incendio en el motor, dado que "el inconveniente fue el resultado directo de la falta de adecuada seguridad en los controles que se realizan durante el mantenimiento". Sin embargo, no está tan seguro con respecto a los otros vuelos cancelados. "Nuestra experiencia es que los diferentes tribunales nacionales se han pronunciado con sentencias muy disímiles a veces en casos idénticos, ya que las regulaciones son demasiado ambiguas para predecir el resultado final de este caso".

Los portavoces de British Airways han afirmado que va a “evaluar todas las demandas que recibimos y cumpliremos las obligaciones legales tal como establece la normativa EU261”. Su oficina de prensa dijo que no tenía cifras sobre el número total de pasajeros afectados, aunque se entiende que la mayoría de los 193 vuelos cancelados que debían ser operados por BA.