Turismo familiar, un segmento estratégico para los destinos
Publicada 18/04/23 13:56h
- "El turismo familiar es estratégico en la Costa del Sol y su estancia es muy amplia, por encima de otro tipo de turistas", dice Antonio Díaz
- “Los mercados internacionales nos dan más juego porque las vacaciones escolares son diferentes”, indica Abigail Sigüenza
- Los hoteles de 4 y 5 estrellas son el alojamiento preferido en Costa Daurada, pero ha crecido la demanda de cámpings, señala Marta Farrero
El turismo familiar es un segmento de vital importancia en algunos destinos turísticos. Solo en la Costa del Sol supone el 43% del total de los visitantes que recibe, en la Costa Daurada, un 40%, y en Madrid, un 23%, según han detallado hoy los representantes de estos enclaves en la tercera Jornada de Destinos Nacionales para Agentes de Viaje, organizada por HOSTELTUR en formato online.
En el panel sobre "Turismo familiar en la Península" han participado Antonio Díaz, director gerente de Turismo y Planificación Costa del Sol; Abigail Sigüenza, directora de Marketing Estratégico en Madrid Destino, del Ayuntamiento de Madrid, y Marta Farrero, directora del Patronato de Turismo de la Diputación de Tarragona.
En la Costa Daurada llevan más de 25 años trabajando en este segmento, según ha destacado Marta Farrero. De hecho, ha avanzado que este año Salou va a recibir un reconocimiento por los 20 años que lleva acreditado con el Sello de Turismo Familiar. Se trata de un segmento esencial para este destino, ya que representa un 40% del total de los turistas que recibe.
Un porcentaje que se eleva al 43% en la Costa del Sol, según ha detallado Antonio Díaz. En Madrid supone el 23%, de acuerdo con Abigaíl Sigüenza, que ha puesto en valor que se trata de un perfil de viajero que procede de todo tipo de mercados. Aunque la mitad de los que llegan a la capital de España procede de Europa, hay también un alto porcentaje de visitantes de América, en especial de Colombia, Argentina y México, y empiezan a notarse los viajes en familia de Asia.
La principal motivación para visitar Madrid es la cultura, la oferta de ocio y la gastronomía. “Es un segmento que participa de todo, no viaja solo para un evento o un espectáculo. Aporta mucho valor para la ciudad”, ha agregado Abigail Sigüenza.
En cuanto al alojamiento, más de la mitad de las familias opta por los hoteles y la estancia media de este segmento supera las tres noches. Más de un 70% permanece en la ciudad entre tres y cinco noches.
Las estancias son más largas en la Costa Daurada, al tratarse de un destino de playa. Según ha explicado Marta Farrero, la media es de 5,9 noches, una cifra ligeramente inferior a los datos previos a la pandemia, debido a que las llegadas de visitantes extranjeros no se han recuperado de todo.
“Hemos recuperado un 33% del turismo internacional que teníamos. En 2019 representaba el 55% de las llegadas”, ha añadido. Entonces la estancia media llegaba a los siete días.
Los extranjeros son los que permanecen más tiempo en el destino catalán, en particular el turista ruso, que ahora está ausente debido la guerra en Ucrania
Los hoteles de 4 y 5 estrellas constituyen el alojamiento preferente, pero se ha detectado también un fuerte incremento en la demanda de cámpings.
“Un 39% de las familias se aloja en cámpings, antes no los utilizaban en sus vacaciones, pero, con la pandemia y la necesidad de tener espacios al aire libre, han probado esta tipología de alojamiento, les ha gustado mucho y están repitiendo”, ha aclarado la directora del Patronato de Turismo de la Diputación de Tarragona.
El gasto medio en la Costa Daurada es de unos 200 euros, sin alojamiento ni transporte. En el caso de los extranjeros, se eleva a 305 euros
En la Costa del Sol, el turismo familiar es estratégico y su estancia es también muy amplia, por encima de otro tipo de visitantes, según ha expuesto Antonio Díaz. Suelen viajar en verano y optan por establecimientos próximos al litoral, aunque también se ha registrado un gran crecimiento del turismo de interior en la provincia de Málaga porque las familias quieren realizar muchas actividades.
Aunque los hoteles siguen siendo mayoritarios, se aprecia también una gran demanda de viviendas de uso turístico el destino malagueño
Segmentar los productos
Marta Farrero ha detallado que se demandan experiencias que incluyan a toda la familia y que puedan compartir todos. Es importante “entender que el juego no tiene edad y que lo que quieren las familias es jugar todos juntos”, ha aseverado.
Al mismo tiempo, cree necesaria una mayor segmentación y más personalización, ya que, por ejemplo, han detectado que no hay muchos productos para niños de 12 a 16 años.
“A veces el turismo familiar se trata de una manera homogénea y hay que entender que las necesidades de los niños, según su edad, va variando. Las familias requieren productos para disfrutar en común y hay que adaptarlos”, ha agregado
En Madrid se han ampliado las zonas peatonales, de juego infantil y las áreas verdes. “Es la segunda ciudad con más árboles de Europa”, ha destacado la directora de Marketing Estratégico en Madrid Destino
Una de las dificultades para trabajar con el turismo familiar es su alta estacionalidad, ya que las familias disfrutan de sus vacaciones siguiendo el calendario escolar, principalmente en verano. Una situación que es diferente en otros países, que distribuyen las vacaciones de los colegios en temporadas diferentes. Se facilita así que puedan visitar destinos, como la Costa Daurada en diferentes momentos del año, no solo en temporada estival, según reconoció la directora del Patronato de Turismo de la Diputación de Tarragona.
Este reparto de las vacaciones de los países emisores también se beneficia a Madrid, según ha indicado Abigail Sigüenza. “Los mercados internacionales nos dan más juego porque las vacaciones escolares en otros países son diferentes”, ha declarado.
Respecto al emisor español, en verano las familias se decantan en su mayoría por lugares de playa. El público familiar en la capital de España está muy repartido a lo largo del año, aunque el momento de mayor afluencia es primavera y otoño, coincidiendo con los puentes y Navidad.
En Málaga, las familias que tienen una vivienda en propiedad viajan varias veces al año, mientras que los que dependen de otras modalidades de alojamientos, como hoteles o viviendas turísticas, tienen una frecuencia menor, ha explicado Antonio Díaz
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