Piden quitar los candados del amor en los puentes de París
La caída de una barandilla reabre el debate sobre esta moda
Publicada 10/06/14La caída de un tramo de baranda en el Pont des Arts debido a que no pudo soportar el peso de centenares de candados colocados allí por turistas ha reavivado el debate en París sobre los posibles riesgos esta moda, considerada por algunos también como un atentado estético.
El trozo de barandilla, de dos metros y medio, cayó el domingo pasado, lo que obligó a cerrar el puente mientras los operarios arreglaban los desperfectos y reponían el tramo caído con unas tablas de madera provisionales. El tramo de la barandilla cayó sobre el propio puente, no sobre el río.
Lo cierto es que la moda de poner un candado en los puentes de París y tirar la llave al Sena, como símbolo de amor eterno, se ha hecho tan popular que ahora las barandillas de 15 puentes de la capital francesa tienen cerrojos, sobre todo el Pont des Arts y el puente del Arzobispo.
Algunos avispados han hecho un negocio de esta moda y se dedican a vender candados a los turistas que pasean cerca de los puentes.
"No quiero estigmatizar a los amantes y a los seguidores de esta afición, pero si no hacemos nada al respecto problemas como éste continuarán ocurriendo", expuso Jean Pierre Lecoq, concejal del sexto distrito de París.
De hecho, no es la primera vez que un trozo de la baranda se viene abajo debido al peso de los candados. El pasado verano cayó otro tramo en el mismo puente.
Y según advierten los críticos de esta moda, esto supone un claro riesgo para los barcos que circulan por el Sena, si alguna vez la barandilla se precipitara por el lado del río. De ahí que muchos exigan que se retiren todos los candados.
La colocación de los candados también es considerada por algunos como una moda que atenta contra la belleza de los puentes de París. Recientemente, se puso en marcha una campaña en la que se reclama quitar los candados, que ya ha recogido más de 7.700 firmas.
La colocación de candados también comenzó a ponerse de moda en el tramo central del Ponte Vecchio de Florencia, Italia. Pero el ayuntamiento florentino atajó este fenómeno, retirando los cerrojos e instalando carteles advirtiendo que se impondrían multas de hasta 160 euros a quien lo hiciera.
De momento, el Ayuntamiento de París -la ciudad del amor- no impondrá multas a los amantes, pero ha anunciado que buscará "alternativas artísticas" para que la gente deje de colocar candados en los puentes.
Lo cierto es que la colocación de candados en puentes, farolas e incluso estatuas se ha extendido en numerosos destinos turísticos del mundo. Ver también el post Rituales turísticos: algunas prohibiciones y muchos candados.
Para comentar, así como para ver ciertos contenidos de Hosteltur, inicia sesión o crea tu cuenta
Inicia sesiónEsta noticia no tiene comentarios.