La presa destruida imposibilitará cruceros fluviales en Ucrania

Ya se ha dicho que esos condicionantes y otros, así como el más importante de todos, que la guerra aún no ha acabado, dificultarán la vuelta a la normalidad del país del Este de Europa. Algunas modalidades turísticas ya se pueden realizar en Ucrania, como el turismo bélico, que está en auge debido a las circunstancias que se dan en la zona, pero otras que invitan más al relax son imposibles y lo serán por mucho tiempo.

Uno de los cruceros fluviales de Politours 360, como los que recorrían Ucrania antes de la guerra. Fuente: Politours 360.

La imposibilidad de realizar cruceros fluviales tras el ataque a la presa el pasado 6 de junio, ha sido confirmada por el director general de Politours 360, Carlos Ruiz, quien estima que se tardará "cinco años como mínimo" en rehabilitar la zona y volver a dejarla apta para tales operaciones. Su compañía venía ofreciendo un crucero fluvial entre Moscú y Sebastopol, en Crimea, y otro de Odesa a Kiev, que obligó a suspender a partir de 2020, primero la pandemia y después la guerra.

Cruceros en zona de guerra

Ahora es aún más incierto el futuro de tales travesías, que discurrían por el río Dniéper, que recorre Ucrania prácticamente de norte a sur para desembocar en el Mar Negro. La última ciudad en el estuario de este importante curso fluvial es Jersón, muy afectada por los combates desde el principio de la guerra entre Rusia y Ucrania, que Moscú sigue calificando de 'operación especial', a pesar de que se prolonga y recrudece.

De este modo, las razones políticas se suman a las de seguridad y a las logísticas para impedir 'sine die' que empresas como Politours 360 o Panavision Tours -que también ofrecía cruceros fluviales por el Dniéper- vuelvan a programar unos trayectos que anteriormente tenían una buena acogida por parte de los turistas que los elegían, cuyo perfil corresponde al de mayores de 40 años con cierto 'status' cultural, no necesariamente económico.

Navegación imposible

Por su parte, la compañía CroisiEurope, con más de 45 años de experiencia, coindice en que la destrución de una presa tan importante como Kajovka "imposibilita la navegación completamente", y descarta que los cruceros vuelvan a recorrer el Dniéper en el medio plazo. "El control sobre el caudal del agua y su altura es lo que posibilita que un río sea navegable", ha precisado su director Comercial, Tomás Fernández.

"La gente ya identifica Ucrania con un destino de guerra y que está destruido, lo mismo que pasó con Móstar y Sarajevo, pero en realidad son lugares preciosos con muchas cosas que ver"

Así lo ha manifestado la directora de Cruceros Fluviales de Panavision Tours, otra compañía que venía ofreciendo cruceros que pasaban por afluentes, exclusas y canales artificiales asociados al Dniéper y que desembocaban en el Mar Negro, llegando hasta Odesa. Como pasa en el caso de Politours 360, se suspendieron por la pandemia y ya no se han podido volver a programar a causa de la guerra.

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En ese contexto, la destrucción de la presa Kajovka aleja aún más la posibilidad de retomar esta oferta: "vemos mal la situación, porque veníamos navegando por el Volga desde Moscú hasta San Pertersburgo y cogíamos un trozo del Dniéper. Y todo eso ha desaparecido y no se va a recuperar ni el año que viene, ni el siguiente. Ya veremos", ha lamentado. "No tenemos previsto tener cruceros por allí al menos hasta que haya pasado un tiempo después de la guerra", ha concluido.

Recorrido de un crucero por Ucrania de Politours antes de la guerra

• Día 1: España – Odessa (embarque)
• Día 2: Odessa
• Día 3: Vilkovo
• Día 4 al 6: Sebastopol (Crimea)
• Día 7: Jersón
• Día 8: Zaporizhia (área de la destruida presa Kajovka)
• Día 9: Navegación
• Día 10 y 11: Kiev
• Día 12: Kiev (desembarque) – España