Los hotelereros piden responsabilidad a los trabajadores de AENA

En un comunicado, la asociación asevera que el anuncio ya ha generado las "lógicas alarmas" en todos los mercados emisores y entre los agentes turísticos "ante el colapso que se puede originar y por las pérdidas económicas que puede ocasionar una masiva cancelación de reservas en Semana Santa".

"Todos tenemos", recuerdan desde la FEHM, "aún muy frescas las imágenes de los aeropuertos españoles durante el pasado mes de diciembre, el colapso que supuso para el país y el grave deterioro de imagen en el exterior. Muchas empresas todavía no se han recuperado del impacto económico brutal que tuvo aquella huelga de controladores. No estamos en condiciones de volver a repetir una experiencia similar en otro periodo vacacional importante como la Semana Santa", han remarcado al respecto.

Así, la FEHM considera que la huelga y su anuncio "son elementos muy negativos para la credibilidad de España como destino seguro y también para Mallorca, en particular, por su condición de destino turístico insular, dependiente al cien por cien del correcto funcionamiento del aeropuerto".

Además, la patronal hotelera considera que, "por justas que sean las reivindicaciones de los trabajadores y por legítimo que sea el derecho a la huelga, la convocatoria de un nuevo paro general en los aeropuertos españoles, en una semana vacacional clave, es la postura económicamente más perjudicial y algo que el país no se puede permitir".

Finalmente, la FEHM señala que "en estos delicados momentos" de crisis económica se hacen precisas políticas de Estado en relación al Turismo, que primen el interés general por encima de intereses sectoriales, "por legítimos que sean". Unas políticas de Estado en las que, consideran los hoteleros, deben implicarse todos los agentes políticos y sociales, y los sindicatos "no pueden ni deben ser una excepción".

Así las cosas, la asociación pone de manifiesto que las cifras negativas registradas en enero y febrero en el aeropuerto de Palma así como en las empresas turísticas de las islas durante estos dos primeros meses, "ponen en evidencia que el turismo en Baleares aún no ha iniciado en 2011 la senda de la esperada recuperación y, en consecuencia, la economía de las islas aún se encuentra en precario".