Meliá asume la presidencia de la Comisión de Turismo de la Cámara de España

Juan Ignacio Pardo, presidente de la Comisión de Turismo de la Cámara de Comercio de España. Fuente: Meliá Hotels International.

Dentro de la Cámara de Comercio España ¿cuál es el rol de su Comisión de Turismo?

La Cámara de España tiene un rol establecido legalmente, que se traslada a sus diferentes comisiones. Es un órgano consultivo y de colaboración con la Administración General del Estado desde una perspectiva público privada, al estar integrada por entes públicos y por empresas privadas. En estos momentos la Comisión de Turismo está presidida por Meliá Hotels, anteriormente fueron Barceló y luego Iberia.

¿Qué otras empresas forman parte de la Comisión de Turismo de la Cámara de España?

Acciona, Aena, Banco Sabadell, Caixabank, Carrefour, Deloitte, Global Blue, Grupo Planeta, Riu, Renfe, Telefónica el Museo del Prado, Patrimonio Nacional, así como las Cámaras de Comercio de Cádiz, Mallorca… El abanico es muy diverso y esto propicia debates interesantes, por ejemplo si se discuten proyectos normativos. Luego los consensos a los que llegamos se canalizan a través de los distintos órganos de la Administración.

Así que el rol es asesorar, intentando llegar a un consenso.

Sí, como órgano consultivo esa es la función. Por ejemplo, nos pasan una iniciativa legislativa y la Comisión de Turismo da su parecer, luego la administración le da el curso correspondiente.

A la hora de ofrecer su opinión ¿qué criterios les guían?

El enfoque es alcanzar un modelo turístico sostenible, competitivo, buscando la internacionalización de las empresas españolas. Ahora nos hemos volcado también en la Estrategia de Turismo Sostenible 2030 lanzada por el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio a finales del año pasado.

Respecto a la sostenibilidad, no podemos olvidar que en los últimos años han ido a más las voces críticas en España sobre la masificación en los destinos y los inconvenientes que el turismo causa a los residentes. ¿Cuál es la posición de la Comisión de Turismo de la Cámara de España al respecto?

De entrada, tenemos cierto grado de neutralidad y así se entiende institucionalmente. Otra cosa son las opiniones que pueda tener cada compañía. En cualquier caso, este es uno de los debates que está sobre la mesa y lo que se plantea es cómo establecemos la carga óptima turística en cada uno de los territorios, con el fin de conciliar la vida del residente con la actividad turística. No podemos obviar que el 66% del crecimiento del PIB de España el año pasado vino de la mano del turismo, a pesar de que todavía hay componentes dentro de la cadena del valor del turismo que no se han recuperado plenamente después de la pandemia.

Además de velar por competitividad, sostenibilidad e internacionalización de las empresas turísticas españolas ¿qué otros aspectos les interesan especialmente?

La formación. El debate es cómo crear un currículo específico en materia turística para grados medios. Es verdad que tenemos Escuelas de Turismo para mandos de un cierto nivel, sobre todo en dirección de hoteles. Pero interesa también desarrollar la formación para mandos intermedios: jefes de departamento, gobernantas, jefes de mantenimiento, etc.

Imagino que la FP dual entrará en su radar…

Así es. Vamos coordinados con la Comisión de Formación de la Cámara de España, donde hay un representante del departamento de recursos humanos de Meliá y otro de la Cámara de Mallorca. La formación es clave poder cubrir todos los puestos y para dar una oferta de calidad.

Si hablamos de apoyar la internacionalización de las empresas turísticas ¿qué aspectos son importantes?

En la actualidad desde la Comisión de Turismo de la Cámara de España estamos trabajando en una iniciativa que puede parecer accesoria, pero que es de gran importancia para las empresas, tanto las grandes como las pequeñas. Me refiero a la normativa aplicable a los expatriados y a la cotización de la Seguridad Social. Estamos hablando sobre este asunto con el Ministerio de Seguridad Social.

¿Por qué es importante este aspecto?

Para las empresas, es fundamental trasladar a su personal al extranjero sin pérdida de los beneficios de la Seguridad Social en España y el régimen que les es aplicable. La normativa actualmente en vigor data del año 1986. Hay otra cuestión que estamos trabajando con el Ministerio de Asuntos Exteriores relativa a los visados. Este tipo de medidas pueden parecer muy accesorias, pero en su conjunto buscan favorecer la capacidad exportadora del sector turístico español, que es muy relevante.

No olvidemos que cuando una cadena hotelera española expande sus operaciones en otro país, detrás le siguen un montón de pequeñas empresas instaladoras, de mantenimiento, ingeniería, etc. Y esas empresas, a su vez, también necesitan tener un conocimiento acerca de la forma en la que tienen que internacionalizar su actividad. La Cámara ayuda a esas empresas a familiarizarse con los trámites y requisitos que se necesitan para el desarrollo de su actividad en el extranjero.