La Palma: naturaleza y autenticidad en una reserva Starlight
Publicada 21/08/23
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La Palma es una isla pequeña, tranquila, rural y auténtica. Es naturaleza, aventura, tradición y es también historia, patrimonio, sabor y astronomía. Declarada en su totalidad Reserva de la Biosfera, así como Destino y Reserva Starlight, destaca por sus paisajes agrestes, variados y accidentados, y por ser un destino sin masificación.
En la Isla Bonita, como también se conoce a esta perla de las Islas Canarias, la naturaleza intacta y bien conservada atrapan la retina de los visitantes. Dotada de una gran cantidad de especies de flora y fauna, muchas de las cuales son endémicas, el destino brinda una gran cantidad de experiencias y aventuras.
La naturaleza también se ve reflejada en sus playas de arena negra y en sus piscinas naturales (o “charcos”), porque aunque no es el elemento-bandero o el ícono del destino, La Palma cuenta con opciones de baño
Además, la isla tiene zonas bajo diferentes figuras de protección.
Destino y Reserva Starlight
Gracias a la ausencia de contaminación lumínica, sus increíbles noches hacen posible que contar estrellas sea un divertido pasatiempo para grandes y pequeños. No es casualidad que la comunidad científica internacional se haya fijado en la isla para contar en ella con un referente en la astronomía: el observatorio del Roque de los Muchachos.
La gastronomía como sello
Pero no todo es naturaleza en este pequeño rincón del Atlántico. Su gastronomía destaca por ser parte de la marca Saborea España bajo el emblema Saborea La Palma.
Una cocina sencilla que coge forma a partir de ingredientes cultivados en las afortunadas tierras del destino. Una gastronomía sabrosa que no deja indiferente a ningún paladar, ni siquiera al más exigente.
Un destino con historia y fiestas
La historia de La Palma, reencarnada en su patrimonio, su artesanía y sus fiestas, se pueden vivir en todos y cada uno de sus pequeños pueblecitos. Calles adoquinadas, muros de piedra, techumbres mudéjares, seda, puros elaborados a mano, todos ellos hablan y cuentan historias de piratas, de ciudadanos extranjeros asentados en la isla, de transacciones comerciales, de maridos emigrados a América en busca de fortuna.
Y si algo hay que destacar de La Isla Bonita es su particular ritmo. Esa forma de vida pausada, sin prisas, lenta pero segura. El palmero, con su carácter amable y deseoso de compartir con el mundo ese pedazo en el que tienen el privilegio de vivir, hace que el destino destaque por su hospitalidad
Ese ritmo, sin prisas y la gentileza de sus ciudadanos, ha llevado a muchos visitantes de la isla a repetir visita o, incluso, a establecerse en ella de manera definitiva. Es que La Palma es un lugar lleno de energía, que entra por todos los poros de tu piel desde el preciso instante en el que pones un pie en su territorio.
Un lugar, sin masificación, que ha hecho posible la feliz convivencia entre los locales y los turistas, siendo un ejemplo de la armonía entre la actividad turística y su huella (que no impacto) en un territorio.
Entrevista con Raquel Rebollo, consejera de Turismo de La Palma:
"La planta alojativa que actualmente está disponible opera a pleno pulmón"
¿En qué situación se encuentra La Palma a casi dos años de la erupción del volcán?
Desafortunadamente, la recuperación va demasiado lenta. En algunos aspectos debido a la complejidad de los retos que tenemos por delante y en otros por la falta de respuesta por parte del Gobierno de España, que no ha entendido la dimensión de lo que aquí ha ocurrido. Han sido dos años en los que las administraciones locales han primado las acciones destinadas a atender a los afectados que han perdido sus hogares, al tiempo que, de manera paralela y sin descanso, se han abierto carreteras para facilitar las comunicaciones y el acceso a las zonas aisladas por la erupción. En este caso, por parte del Cabildo y del Gobierno estatal.
Desde la institución insular también estamos trabajando en la creación de una oficina que se dedique en exclusiva a todos los asuntos relacionados con los damnificados, como tramitación de ayudas y licencias. De esta manera, evitamos desplazamientos innecesarios de una institución a otra; centralizamos las acciones en un mismo espacio, con las facilidades que eso otorga a los usuarios.
¿Qué mecanismos han puesto en marcha para recuperar la demanda internacional?
Una de las primeras acciones que hemos llevado a cabo desde la Consejería de Turismo es ponernos en contacto con las todas las compañías aéreas y turoperadores que viajan a la Isla. Asimismo, hemos impulsado acciones de comarketing y promoción del destino en los mercados emisores, con el objetivo de generar demanda y dar a conocer las riquezas de nuestro territorio, que, sí, se ha visto golpeado por una catástrofe natural, pero conserva intactos sus atractivos y su encanto.
También estamos trabajando en campañas específicas en varios países, con especial atención en Alemania, para que el mundo sepa que somos un lugar seguro y que estamos en vías de recuperar la normalidad tras la erupción. Y es que todos los servicios están en funcionamiento, nuestros recursos naturales continúan abiertos y mantenemos una excelente variedad y calidad paisajística, incluido el propio volcán, que nos recuerda la experiencia vivida y nos ayuda, a su vez, a desentrañar los orígenes de las Islas Canarias.
Tajogaite es el volcán más joven de Europa, y tras de sí no solo nos ha dejado destrucción. Tenemos una fajana de grandes proporciones donde ya empieza a brotar la vida, tanto en la superficie como en el fondo marino, lo que la convierte en un laboratorio vivo para la ciencia y la investigación. Además, según los expertos, disponemos de paisajes creados en torno a la lava que solo están presentes en otros 20 enclaves del planeta.
A nadie se le escapa tampoco que en los últimos meses, como consecuencia del cambio climático, hemos sufrido incendios en nuestros montes. Unos sucesos que han puesto de relieve la unidad y generosidad del pueblo palmero, los frutos de la coordinación entre administraciones y que somos un territorio con unos protocolos de actuación experimentados, donde salvaguardar la vida es lo primero.
¿Qué productos están más fuertes y cuáles quieren potenciar?
Obviamente, el reciente volcán Tajogaite se ha convertido en una de nuestras principales oportunidades a nivel turístico, si bien La Palma cuenta con otros tantos recursos naturales que aún no se han podido desarrollar y a los que el Cabildo quiere dar un impulso, como la Fuente Santa, que fue redescubierta en 2005 tras siglos sepultada. Está acreditado que las aguas que allí se encuentran son de las mejores de Europa; se les atribuyen propiedades terapéuticas y medicinales, y en torno a ese yacimiento planteamos un complejo termal que se sume a la lista de enclaves de interés para locales y foráneos.
Por algo La Palma es conocida como la Isla Bonita: es un territorio lleno de contrastes paisajísticos y variedad cromática. En sus cumbres se encuentra el Roque de los Muchachos, donde está ubicado el mayor telescopio del hemisferio norte y se emplazará próximamente el Telescopio Solar Europeo. Además, precisamente para favorecer la observación astrofísica, contamos desde 1988 con una ley específica que regula el tipo y la intensidad de las luminarias, de modo que no tenemos contaminación lumínica. He ahí la razón por la que el turismo vinculado a las estrellas ha ganado enteros en los últimos años.
En lo referente a historia y patrimonio, podemos citar que el Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma fue el primero de España en celebrar elecciones democráticas, por sufragio universal, y, de hecho, tal es la notoriedad que ha llegado a adquirir la capital de la Isla, que llegó a tener el tercer puerto más importante de Europa en el siglo XVI, junto a Sevilla y Amberes.
Y por si fuera poco, la Isla en su totalidad es Reserva Mundial de la Biosfera, así como puede presumir de haber sido el primer destino Starlight de España. Cuenta con más de 3.000 senderos de corto, medio y largo recorrido; una reserva marina excepcionalmente rica, y una preservación de las tradiciones envidiable, con una serie de artes y oficios típicos que han pasado de generación en generación, incluido el tratamiento de la seda y la confección de prendas, empleando una técnica milenaria. Tradiciones que también pasan por la agricultura, con frutos como el plátano, y una amplia variedad de productos como vinos, mojos, repostería o quesos.
¿Cómo se está presentando el verano y las perspectivas para los próximos meses?
El verano está siendo mejor de lo esperado, aunque no estamos en las cifras de años anteriores. Desde 2020, La Palma ha padecido, además de las consecuencias de una epidemia mundial, un volcán que estuvo durante tres meses en erupción, lo que ha retrasado el crecimiento en materia turística con respecto a otros destinos. Para contrarrestarlo, estamos realizando acciones de marketing online regionales, nacionales e internacionales, con las que esperamos mejorar las cifras de cara a octubre.
De otro lado, para la temporada de invierno 2023/2024, se está trabajando con campañas B2B y B2C, sumadas a las de comarketing en mercados emisores y las ferias a las que tenemos previsto acudir, cruciales para tejer nuevos lazos con la Isla.
¿Cuál es la situación en materia de conectividad aérea? ¿Y en plazas hoteleras?
La conectividad aérea de este verano es ligeramente menor que la temporada anterior debido a la falta de planificación de rutas que se venía arrastrando desde hace un tiempo. Actualmente, se está trabajando muy duramente con el único objetivo de recuperar la conectividad de temporadas anteriores. Por un lado, desde el Servicio de Turismo se están llevando a cabo negociaciones para recuperar las rutas y frecuencias que conectaban directamente a La Palma tanto con el territorio nacional como internacional, y, por otro lado, y a la espera de la publicación del Fondo de Desarrollo de Vuelos, buscamos la apertura de nuevos trayectos.
Estamos convencidos de que el próximo invierno 2023/2024 La Palma va a gozar de una buena conectividad, no descartando que se sume alguna frecuencia o se añada alguna nueva ruta. Queremos garantizar una buena conectividad para la isla y que esos vuelos tengan buena ocupación: es tan importante contar con ellos como llenarlos.
En cuanto a las plazas de la Isla, decir que toda la planta alojativa que actualmente está disponible opera a pleno pulmón. Es cierto que tenemos un núcleo turístico, Puerto Naos, que aún no reúne las condiciones para su aprovechamiento turístico, pero estamos dando pasos firmes para revertir la situación.
¿Cuáles son las prioridades sobre las que trabajarán hasta fin de año y en 2024?
Estamos centrados en la promoción del destino en los mercados emisores de las próximas temporadas y se están preparando los presupuestos para el ejercicio 2024, donde dotaremos de recursos todas las acciones concretas que vamos a emprender, que pasan ya no solo por el Servicio de Turismo, sino por actividades conjuntas con áreas como Cultura, Patrimonio, Medio Ambiente, Promoción Económica o Infraestructuras. La Palma no puede perder más tiempo, y por eso nos estamos esmerando en ofrecer a quienes nos visitan la mejor versión de la Isla.
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