España pierde población por segundo año consecutivo
Un total de 547.890 personas se marcharon al extranjero el año pasado, entre ellas 79.306 de nacionalidad española
Publicada 01/07/14A fecha del 1 de enero de 2014, España contaba con una población de 46.507.760 ciudadanos, 220.130 menos que el año anterior. Nuestro país pierde así habitantes por segundo año consecutivo, según la Estadística de Migraciones elaborada por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
El descenso de población se debe en gran medida al abandono del país por parte de ciudadanos inmigrantes. Un total de 547.890 personas se marcharon al extranjero durante el año pasado, de ellas 79.306 eran de nacionalidad española. En 2013, el saldo migratorio se cerró en negativo: se marcharon 256.849 personas más de las que llegaron a España. Esta cifra es un 80,2% mayor de la registrada en 2012 y es fruto del descenso en un 4,3% de la inmigración y un aumento del 22,7% de las emigraciones.
Desde que nuestro país alcanzase su mayor nivel en 2011, con 46.818.216 habitantes, el número más alto de la década, se ha iniciado un descenso. En 2012, la cifra de habitantes se redujo un 0,19%, y en 2013, un 0,47%.
La mayor pérdida, en términos absolutos, se ha producido entre los jóvenes. El año pasado los ciudadanos entre 15 y 39 años de edad se redujeron un 3,1%, con 477.851 personas menos. También cayó un 4,2% la cantidad de niños menores de cinco años, 102.358 menos. No obstante, decreció igualmente el grupo de 75 a 79 años (un 4,24%), por la llegada a esas edades de las generaciones nacidas durante la Guerra Civil, más reducidas.
La reducción fue generalizada en prácticamente todo el país. Los mayores descensos relativos de población se registraron en La Rioja (-1,20%), Cataluña (-0,92%) y Castilla y León (-0,90%). Sólo aumentó el número de habitantes en Baleares (0,47%), Melilla (0,06%) y Canarias (0,46%), la única comunidad autónoma, además, que tuvo saldo migratorio positivo el año pasado
Según la estadística del INE, el 14,5% del total de las salidas, 79.306 personas, tenían nacionalidad española, un 38,5% más que en 2012. De ellas, dos de cada tres (52.160) habían nacido en España, aunque la proporción varía en función del destino. Destaca que se trata de una emigración masculina, con un 53,7% de hombres, y joven, ya que se concentra en los grupos de 20 a 49 años y en los menores de cuatro.
El grupo más amplio se fue a Ecuador (10.163), Reino Unido (8.220), Francia (7.749), Alemania (7.047), Estados Unidos (5.807), Suiza (3.714), Colombia (3.240), Venezuela (3.166), Bélgica (2.685) y Argentina (2.652), principalmente.
La llegada de inmigrantes cayó un 5,4%, hasta situarse en 257.648. Las principales nacionalidades fueron la rumana (con 23.594 llegadas, aunque el cabo del año perdieron población), la marroquí (21.338) y la británica (con 14.354). Cinco de las 15 nacionalidades con mayor flujo inmigratorio incrementaron su número de llegadas a España: Italia, China, Rusia, Francia y Estados Unidos.
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