ETA atentó ayer domingo por tercera vez en una semana con un coche bomba cargado con 30 kilos de explosivo que estalló en el aparcamiento del aeropuerto de Parayas, en Santander, y que no provocó heridos. Un comunicante llamó al diario Gara para advertir de la colocación del explosivo, que se encontraba en un Renault 19 rojo situado junto a escasos metros de la entrada principal del aeródromo. Se trata de la cuarta acción en esta semana de los terroristas, que ya atentaron el martes en Alicante y Benidorm y el viernes en Estella (Navarra).
ETA atentó ayer domingo por tercera vez en una semana con un coche bomba cargado con 30 kilos de explosivo que estalló en el aparcamiento del aeropuerto de Parayas, en Santander, y que no provocó heridos. Un comunicante llamó al diario Gara para advertir de la colocación del explosivo, que se encontraba en un Renault 19 rojo situado junto a escasos metros de la entrada principal del aeródromo. Se trata de la cuarta acción en esta semana de los terroristas, que ya atentaron el martes en Alicante y Benidorm y el viernes en Estella (Navarra). El vehículo, situado a unos 20 metros de la entrada principal del aeropuerto, hizo explosión a las 17,02 horas. Tenía la matrícula doblada con otro vehículo del País Vasco, a cuyo dueño se localizó. El artefacto hizo explosión a la hora y en el lugar indicados por el comunicante. Los vuelos fueron desviados a Bilbao.
Los artificieros del Cuerpo Nacional de Policía (TEDAX) no intentaron desactivar la bomba por temor a que se tratase de una trampa y estallase antes de la hora señalada. No obstante, la rápida intervención de los agentes al acordonar la zona y desalojar la terminal así como todos los accesos a la misma, evitó que se produjeran víctimas. Gracias al rápido desalojo de la zona, que consistió en el traslado en cinco minutos de unas 70 personas entre personal y viajeros a la pista de despegue, no hubo heridos en la explosión, aunque sí se produjeron daños materiales muy cuantiosos en todo el frontal de la terminal. La deflagración destrozó todos los cristales, dobles techos y afectó a 12 vehículos con graves daños, y a un número similar con daños menores, como cristales rotos. Incluso trozos del coche bomba llegaron a sobrevolar el edificio, llegando hasta la pista del aeropuerto. La banda terrorista ha vuelto a atentar por tercera vez en un año en esta comunidad casi 70 horas después de que estallara un paquete bomba en los juzgados de la localidad navarra de Estella, provocando un herido. Además, a estos se suman los dos perpetrados el martes en Alicante y Benidorm, que causaron 13 heridos, una de ellos grave.
El atentado de ayer es muy similar al último que ETA perpetró en Santander el 3 de diciembre, con la colocación de un coche bomba en el aparcamiento del edifico de Correos, tras haber realizado una llamada al diario Gara. En aquella ocasión tampoco hubo de lamentar víctimas.
Para comentar, así como para ver ciertos contenidos de Hosteltur, inicia sesión o crea tu cuenta
Inicia sesiónEsta noticia no tiene comentarios.