Asiana Airlines descarta un fallo técnico en el accidente del sábado en San Francisco

El Boeing 777 operado por la compañía de Corea del Sur Asiana Airlines, procedente de Shangai y con escala en Seúl,se estrelló en el momento de aterriazar en el aeropuerto de San Francisco, provocando un aparatoso incendio. El accidente se ha saldado con dos jóvenes chinas fallecidas, 49 personas en estado grave y 132 con lesiones menores.

A través de un comunicado, la compañía confirmó que en el aparato siniestrado viajaban 77 pasajeros coreanos, 141 chinos, 66 estadounidenses y un japonés, entre otros.

El Boeing 777 se estr.

Un total de 190 pasajeros consiguieron abandonar el avión por sus propios medios, la mayoría deslizándose por las rampas de emergencia. La parte superior del avión, mientras tanto, ardía en llamas. Los efectivos de emergencia desplegaron un hospital de campaña en el aeropuerto.

Un equipo de funcionarios de Estados Unidos investiga ya el accidente. Ayer inició el examen de las cajas negras, que fueron enviadas a Washington, sin que hubiese pistas iniciales sobre las causas de este percance. No obstante, Asiana descartó un fallo mecánico, como factor detonante del suceso, pero tampoco quiso responsabilizar al piloto o a la torre de control de San Francisco.

Por el momento, se sabe que no funcionó bien uno de los sistemas que ayuda a los aviones a aterrizar en el aeropuerto, pero se descarta que sea la causa del incidente.

La presidenta de la Consejo Nacional de Seguridad del Transporte (NTSB, por sus siglas en inglés), afirmó el domingo que no había indicios de actos criminales. No obstante, precisó que era demasiado pronto para determinar qué provocó que el avión se estrellara al llegar al aeropuerto.