Precios de hotel en Nueva York por las nubes ¿Presagio para Barcelona?

Según datos de TravelgateX, la tarifa media diaria por una noche de hotel (ADR) en Nueva York no bajará de los 350 euros durante el próximo mes de septiembre.

El pico se alcanzará durante la segunda semana de septiembre, cuando el ADR llegará a los 418 euros. Esto significará un incremento de casi el 22% en comparación con las mismas fechas del año anterior.

¿Por qué hay tantos hoteles en Nueva York que ahora albergan a inmigrantes?

Existen varias razones tras el incremento de los precios de hotel en Nueva York durante el último año. Por ejemplo, la recuperación de la demanda para viajar a Nueva York (la ciudad recibió 62, 2 millones de turistas el año pasado, cifra que todavía está por debajo de los 66 millones de 2019) o la inflación.

También se apunta como razón del incremento de precios la conversión de docenas de hoteles obsoletos en albergues para inmigrantes, lo que ha hecho disminuir la oferta.

Según explica el diario The New York Times, a finales de 2022, cuando miles de migrantes comenzaron a llegar a la ciudad de Nueva York, las autoridades municipales se apresuraron a buscar lugares para alojarlos, a cambio de un precio, claro está. Pronto encontraron empresas interesadas en este nuevo negocio: hoteles obsoletos (cada vez con peores puntuaciones en las webs de reservas y con serios problemas financieros) que aún intentaban recuperarse de la caída del turismo provocada por la pandemia.

• Why N.Y.C. Hotel Rooms Are So Expensive Right Now

De este modo, alrededor de 135 hoteles de la ciudad (con un total de 16.530 habitaciones) se unieron al programa de alojamiento para inmigrantes impulsado por el Ayuntamiento de Nueva York. Según datos del consistorio, los hoteles participantes reciben hasta 185 dólares por noche por habitación. Ninguno de estos hoteles ha vuelto a operar como un hotel tradicional.

El hecho de que 135 establecimientos se convirtieran en refugios para inmigrantes significó que 16.530 habitaciones de hotel, aunque estuvieran obsoletas, dejaron de estar disponibles para los turistas. Una disminución de este calibre de la oferta de alojamiento turístico indudablemente hizo subir los precios.

Según explica The New York Times, muchos de los hoteles convertidos en albergues para inmigrantes atravesaban una difícil situación: algunos tenían contraídas numerosas deudas, enfrentaban ejecuciones hipotecarias y/o tenían malas críticas de los huéspedes. Básicamente, se dirigían a viajeros de bajo presupuesto y de clase media, añade el citado periódico.

Rascacielos del centro de Manhattan en la ciudad de Nueva York por la noche. Fuente: Adobe Stock

¿Cuántos hoteles tiene Nueva York?

En 2024, Nueva York cuenta con cerca de 560 hoteles operativos. Por tanto, esta cifra no incluye los 135 establecimientos que ahora se dedican al negocio de albergar inmigrantes.

Cabe señalar que mientras viejos establecimientos hoteleros se convirtieron en albergues para inmigrantes a partir de 2022, en Nueva York también han ido abriéndose nuevos hoteles desde entonces.

Concretamente, y según datos de la Oficina de Turismo de Nueva York, “en 2022 y 2023, se agregaron al inventario de toda la ciudad casi 10.000 habitaciones de hotel nuevas y reactivadas. El año pasado, se agregaron 17 propiedades, con 4.526 habitaciones adicionales. Esto eleva el inventario activo a 121.500 habitaciones”.

Es decir, en estos momentos Nueva York tiene una capacidad hotelera parecida a la anterior a la pandemia, con solo 1.400 habitaciones hoteleras menos.

Además, existen otros 30 nuevos proyectos hoteleros en fase de desarrollo, que sumarán 6.400 nuevas habitaciones al inventario de Nueva York en los próximos dos años, explica el departamento de turismo de la ciudad. “El proceso de desarrollo hotelero de la ciudad sigue siendo uno de los más activos del país, con una amplia diversidad de ubicaciones, tipos, tamaños e inversiones”, añade la oficina New York Tourism+Conventions.

¿Qué factor habría influido más en el alza de los precios de hotel en Nueva York?

En el alza de los precios de hotel, existe otro factor más que se añade a la recuperación de la demanda turística, a la inflación y a la conversión de viejos establecimientos hoteleros en albergues para inmigrantes.

Según apuntan numerosos analistas de la industria turística, ese cuarto elemento destaca por encima de todos los demás a la hora de explicar por qué los precios de los hoteles en Nueva York son más caros que nunca.

Y es que el 5 de septiembre de 2023, el Ayuntamiento de Nueva York comenzó a aplicar la nueva "Ley de Registro de Alquileres de Corta Duración". A partir de esa fecha, los anfitriones están obligados a registrarse ante una oficina especial de la Alcaldía de Nueva York: Registration for Hosts. Ver más detalles aquí:

• La guerra entre hoteles y Airbnb entra en una fase decisiva

“Según AirDNA, una empresa no afiliada que recopila datos de anuncios de alquileres a corto plazo, la cantidad de anuncios de Airbnb en la ciudad de Nueva York para estancias cortas (menos de 30 días) se desplomó un 83%, hasta solo 3.705 apartamentos en marzo de 2024, frente a los 22.247 anuncios de agosto de 2023, el mes anterior a la entrada en vigor de la ley”, explica The New York Times.

Vista aérea del centro de Manhattan, Nueva York. Fuente: Adobe Stock

“Desafortunadamente, la ciudad de Nueva York decidió adoptar un enfoque extremo y aprobar una de las reglas más restrictivas de alquiler de corta duración en el mundo”, afirma Airbnb.

Según apunta la plataforma de alquileres, “en los meses transcurridos desde que la normativa entró en vigor, hemos presenciado consecuencias desafortunadas, pero predecibles, de esta decisión. Por ejemplo, los precios de los hoteles están en su punto más alto: en mayo llegaron a casi 400 dólares por noche. Además, algunas actividades vinculadas al alquiler de corta duración se han trasladado a plataformas no reguladas”.

Cabe recordar que los defensores de la ley sostenían que los alquileres a corto plazo estaban empeorando la falta de viviendas en Nueva York. Pero según sostiene Airbnb, "no se ha observado ninguna mejora notable en los precios de los alquileres ni en la escasez de viviendas en la ciudad".

¿Qué lecciones puede sacar Barcelona de lo ocurrido en Nueva York?

El caso de Nueva York es seguido con mucha atención desde Barcelona, ciudad que también ha planteado una reducción radical del alquiler turístico como medida para solucionar la falta de viviendas. ¿Qué impacto podría tener esta medida en las tarifas hoteleras?

Cabe recordar que el pasado viernes 21 de junio, el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, anunció que el Ayuntamiento no concederá más licencias para uso turístico a viviendas residenciales y no renovará las existentes, por lo que en 2029 los cerca de 10.000 pisos turísticos que hay en la ciudad perderán esa condición.

Para prohibir las viviendas de uso turístico en Barcelona, el Ayuntamiento pretende apoyarse en el Decreto ley de los alojamientos de uso turístico en Cataluña, que fue aprobado el pasado 20 de diciembre en el Parlament.

No obstante, se avecina una batalla legal, pues la Federación Catalana de Apartamentos Turísticos (Federatur) ha llevado al Tribunal Constitucional un recurso de inconstitucionalidad contra dicho decreto.

Según explica The New York Times, “La Ley Local 18 fue apoyada agresivamente por la industria hotelera y el sindicato de trabajadores hoteleros, ambos partidarios del alcalde Adams. No es sorprendente, dicen los analistas, que la desaparición de los alquileres a corto plazo haya impulsado la demanda de habitaciones de hotel y haya envalentonado a algunos hoteleros a aumentar los precios”.

Ahora bien, a la hora de hablar de la oferta hotelera, es necesario señalar una diferencia crucial entre la ciudad de los rascacielos y la capital catalana.

Y es que mientras Nueva York ha continuado abriendo nuevos establecimientos y su oferta de habitaciones se va renovando constantemente, en Barcelona rige una moratoria urbanística o PEUAT que impide la construcción de nuevos hoteles en el centro de la ciudad e incluso pone trabas a las reformas hoteleras.

Por lo tanto, si Barcelona elimina 10.000 viviendas turísticas y continúa sin permitir la apertura de nuevos hoteles, el impacto en las tarifas podría ser mucho más significativo en comparación con lo sucedido en Nueva York.

Información relacionada:
- Moratoria hotelera en Barcelona ¿se acerca el fin de la prohibición?
- La moratoria hotelera de Barcelona: pan para hoy y hambre para mañana
- El auge de la vivienda turística cambia la faz del turismo en Europa