Boeing sigue sin acuerdo y con los proveedores temiéndose el peor escenario
Las conversaciones entre empresa y el principal sindicato están en un punto muerto
Publicada 30/09/24 15:43h
No hay avance de acuerdo entre Boeing y el sindicato que representa a más de 32.000 empleados, por lo que está lejos la vuelta a la actividad en la planta donde se fabrica el avión más vendido de la compañía, el B737MAX. La prolongación de la huelga aumenta el hoyo bajo los pies del gigante aeronáutico, por las consecuencias que pueda tener en cuanto a retrasos en entregas y los problemas que pueda acarrear a largo plazo a los proveedores. Air Europa, que lo ha fiado todo a Boeing, no prevé de momento cambio de planes en operativa.
Sin acuerdo entre las partes. El principal sindicato que representa a los empleados de Boeing no da su brazo a torcer y no acepta la hasta ahora última propuesta de la empresa. La Asociación Internacional de Maquinistas y Trabajadores Aeroespaciales (IAM) ha vuelto a dar por rotas las conversaciones para llegar a un acuerdo sobre el convenio colectivo y el incremento salarial.
Sin acuerdo desde el viernes 13
Tras un primer intento por parte de Boeing, en el que ofrecía "el mejor convenio laboral de la historia", con una subida del 25% de los salarios, que supondría en la práctica un incremento del 33% por los distintos aumentos por antigüedad. Sin embargo, quedaba lejos de las pretensiones de la subida del 40% que reclamaban los trabajadores, así como el restablecimiento de prestación definida que se retiró del convenio hace una década, por lo que rechazaron el acuerdo y acordaron la paralización de la producción en la planta de Seattle.
La primera huelga en 16 años comenzaba el pasado 13 de septiembre y, desde entonces, ya habido voces que han señalado que, de prolongarse la protesta, la estabilidad financiera de Boeing quedaría muy perjudicada, así como el cálculo de costes en 100 millones de dólares al día. Con este panorama, la semana pasada Boeing hizo un nuevo intento, una oferta "mejor y definitiva", con un aumento del 30% en cuatro años y el restablecimiento de una prima por rendimiento. Una oferta que tampoco ha satisfecho a los trabajadores.
Los proveedores atisban un futuro incierto
Las consecuencias de la paralización de producción en la planta de Seattle ya se están empezando a notar, tras el anuncio por parte del recién nombrado CEO, Robert Kelly Ortberg, de recortes de sueldos y decenas de miles de despidos mientras durase la huelga. Unas medidas que van a implementarse desde la propia cúpula directiva.
Sin embargo, la ralentización en la producción que se lleva viviendo durante todo este año y la crisis que atraviesa Boeing por múltiples incidentes e investigaciones abiertas en Estados Unidos ha llevado a los proveedores a sufrir en sus propias carnes las repercusiones.
Tal y como recoge Reuters, proveedores como Pathfinder ya temen que la huelga tenga efecto a largo plazo en el empleo de sus compañías. De hecho, de los nueve proveedores con los que Reuters se puso en contacto, cinco dijeron que habían empezado a despedir a trabajadores o a aplazar inversiones.
Sin novedades en Air Europa
Los problemas que está arrastrando Boeing también tienen sus consecuencias para las aerolíneas. El presidente del grupo Ryanair, Michael O´Leary, quien en reiteradas ocasiones se ha mostrado crítico con el devenir de Boeing, ya ha apuntado a que si el cese de actividad se prolonga, puede comprometer los planes de crecimiento de la principal aerolínea del grupo, fuertemente dependiente de Boeing, especialmente de los 737. La aerolínea irlandesa esperaba recibir 30 aviones del fabricante de aviones estadounidense para el verano de 2025, cifra que ahora se ha reducido a 25, y que podría recortarse aún más, hasta 20, si la huelga se prolonga durante tres o cuatro semanas, según O'Leary.
Sin embargo, otra de las compañías que lo ha fiado todo a Boeing, Air Europa, no prevé consecuencias ni en programación ni en entregas. Este verano, la compañía incorporó un nuevo 787 Dreamliner y fuentes de la aerolínea confirman a HOSTELTUR que esperan que en 2025 llegue el nuevo (y primero de la flota) B737 MAX, que está previsto que se sume a la operativa de corto y medio radio. En la actualidad, la flota de la compañía se compone de 53 aviones: 26 Boeing 787 Dreamliner y 27 Boeing 737-800.
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