Argentina da el paso para la privatización de su aerolínea de bandera

Tras la firma del decreto 873/2024, que declara a Aerolíneas Argentinas como sujeta de privatización, el Gobierno argentino da un paso adelante para vender la compañía aérea nacional. Una decisión que llega tras meses de tanteo y con el conflicto con los trabajadores de la compañía que ha derivado en la convocatoria de varias jornadas de protesta y con una situación económica de la compañía bastante crítica, con un "déficit crónico", tal y como señaló el portavoz del ejecutivo del país austral, Manuel Ardoni.

Resultados del ejercicio antes de impuestos a junio de 2023 (en millones de dólares). Fuente: Aerolíneas Argentinas

En el mismo decreto firmado por Javier Milei, se afirma que el Estado argentino no se encuentra en condiciones de "mantener una empresa altamente deficitaria". Una consideración no menor teniendo en cuenta que el Tesoro Nacional regó con 7.500 millones de dólares a la compañía para cubrir el déficit.

El futuro de Aerolíneas Argentinas se abre a la privatización. Fuente: Aerolíneas Argentinas

Asimismo, tal y como recogen varios medios argentinos, se apunta a los beneficios y privilegios de los pilotos, sobre todo los que se refieren a billetes en clase ejecutiva y lo que se considera una abultada plantilla.

La compañía dispone de un total de 1107 pilotos para 81 aviones, lo que supone 14 pilotos por cada avión, "un número desproporcionado con relación a los estándares de la industria a nivel mundial", según el decreto.

No obstante, la firma del documento es un paso adelante, aunque no definitivo, ya que toda la operación se abordará en el Congreso argentino, dado el carácter estratégico de Aerolíneas Argentinas para el país.

Una privatización de idas y venidas

Cuando Javier Milei accedió al poder, el Ejecutivo ya dejó entrever su pretensión de privatizar la aerolínea de bandera del país. Sin embargo, hasta ahora no había tomado la iniciativa de forma tan significativa.

Creada en 1950, la compañía fue privatizada en 1990 y vendida a la española Iberia, que, ocho años más tarde, cedió la gestión a la aerolínea estadounidense American Airlines. La operación de la compañía pasó en 2000 a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) de España, que en octubre de 2001 traspasó Aerolíneas al grupo privado español Marsans. En 2009 el Estado argentino expropió a Marsans la aerolínea, que desde mediados de 2008 ya era gestionada por el Gobierno argentino tras entrar en una severa crisis financiera.

La privatización de la compañía lleva en el aire desde hace tiempo, pero en diversas ocasiones por el papel que juega Aerolíneas Argentinas en la conectividad del país, sobre todo en lo que se refiere a los vuelos domésticos. El ex presidente de la compañía, Pablo Ceriani,,cifró hasta en 21 las rutas que Aerolíneas Argentinas opera desde Buenos Aires a otras localidades del país. Y advirtió del riesgo de que, de consumarse la privatización, gran parte del país podría quedar desconectado

Se abre el baile de pretendientes

La firma del decreto llega tras varias semanas de especulaciones tanto en los medios como en el Parlamento argentino. Y los pretendientes a hacerse con la compañía no han tardado en aparecer. Aunque en un principio se especuló con la posibilidad de que LATAM Airlines adquiriera la aerolínea -o parte de ella-, según apuntan varias fuentes la compañía chilena habría descartado esta operación.

Por lo tanto, quedarían sobre el tablero la brasileña Azul Linhas Aereas y el grupo Abra, al que pertenecen la colombiana Avianca y la brasileña GOL. También ha sonado como posible candidato el nombre del empresario Germán Efromovic

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