La ¿última? vía de escape de Boeing: necesita 35.000 M$ para sobrevivir
Para mantener su calificación crediticia, que ahora está sólo un escalón por encima de "basura", según algunos analistas
Publicada 16/10/24 13:28h
Para evitar que los pies del gigante norteamericano se hundan más en el barro, Boeing ha recurrido a intentar recaudar hasta 25.000 millones de dólares mediante ofertas de acciones y deuda, así como un acuerdo de crédito de otros 10.000 millones. Unas medidas que tienen como objetivo superar la crisis, tanto económica, como de regulación y reputación a la que se ha visto abocada la compañía. Mientras, encara el segundo mes de huelga en la planta donde se fabrica su avión más demandado, el Boeing 737 MAX, y el que más quebraderos de cabeza le está trayendo recientemente.
Boeing intenta salir de la crítica situación en la que se halla inmersa la compañía recurriendo a la emisión de deuda y la venta de activos. La compañía ha comunicado a la SEC, la Comisión de Valores y Bolsa de Estados Unidos, la firma de un préstamo de 10.000 millones de dólares -acordado con Bank of America, Goldman Sachs y JP Morgan, entre otros- y el registro de un folleto de ampliación de capital para emitir acciones, deuda convertible y otros títulos por 25.000 millones de dólares adicionales.
Un gigante que cada vez más tocado
Una iniciativa para paliar las consecuencias de un año nefasto, que arrancó el 5 de enero con el desprendimiento de un panel de un 737 MAX de Alaska Airlines en pleno vuelo y que siguió con la ralentización en la producción, así como investigaciones en Estados Unidos sobre seguridad en las aeronaves tras varios incidentes.
Un declive que se llevó por delante al anterior CEO, y al que al actual, Kelly Ortberg, ha tratado de poner solución sin mucho éxito hasta la fecha. Porque desde hace dos meses, 33.000 trabajadores de la planta de Seattle, donde se fabrica el avión con mayor demanda de la compañía -precisamente el 737 MAX- mantienen paralizada la producción tras no haber llegado a un acuerdo en la negociación del convenio colectivo.
Medidas para paliar la sangría
Con este panorama de tumbos, la compañía busca ahora apuntalar su economía, ante la posibilidad de que su calificación crediticia baje después de tres trimestres consecutivos de quemar efectivo, según recoge Reuters.
Boeing tiene 11.500 millones de dólares de deuda con vencimiento hasta el 1 de febrero de 2026 y se ha comprometido a emitir 4.700 millones de sus acciones para adquirir Spirit AeroSystems y asumir su deuda. Además, como parte de las medidas que está llevando a cabo para hacer frente al impacto tanto de la huelga como de la crisis, la compañía anunciaba recientemente el despido de 17.000 empleados, el 10% de la plantilla.
En septiembre, Boeing entregó 33 aviones, frente a los 40 de agosto, lo que supone un retroceso en la carrera de entregas con su rival Airbus.
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