Cómo visitar Roma y el Vaticano durante el funeral del papa Francisco

Si tienes previsto viajar a Roma en los próximos días, es importante que tengas en cuenta las siguientes consideraciones para tu visita

Publicada 25/04/25 09:29h

Cómo visitar Roma y el Vaticano durante el funeral del papa Francisco

La capital italiana se ha convertido en epicentro de un evento histórico tras el fallecimiento del papa Francisco I que, si bien tiene una dimensión religiosa, también transforma profundamente la experiencia de quienes visitan la ciudad en estas fechas. Si ya tienes planes para viajar a Roma este fin de semana, conviene conocer cómo el velatorio, el funeral y el inicio del cónclave afectan a la ciudad y a su flujo turístico habitual.

Roma vive días excepcionales tras la muerte del papa Francisco, ocurrida el pasado lunes 21 de abril tras un ictus cerebral, un día después de su última aparición pública el domingo de resurrección en la plaza de San Pedro durante el Urbi et Orbi.
Desde el miércoles 23 de abril, los fieles ya dan su último adiós en la Basílica de San Pedro, donde descansa el féretro donde más de 90.000 personas han pasado ya por la capilla ardiente y las autoridades esperan un millón de asistentes al funeral del sábado.

Esta fase del velatorio continuará hasta el viernes 25, con horarios de visita que oscilan entre las 7:00 y las 19:00 horas. El sábado 26 a las 10:00 h se celebrará el funeral en la Plaza de San Pedro, una ceremonia de alto perfil a la que asistirán líderes de distintos países y que provocará fuertes restricciones de movilidad en toda la zona vaticana.

El entierro del Papa Francisco se celebrará la mañana del sábado 26 de abril a las 10:00 (hora local de Roma, CEST) en la Basílica de Santa María la Mayor (Santa Maria Maggiore), cumpliendo así su voluntad de descansar fuera del Vaticano

Será la primera vez en más de un siglo -desde el papa León XIII en 1903- que un pontífice no es sepultado en el interior del Estado vaticano, lo que convierte a esta basílica, situada a más de tres kilómetros de San Pedro, en un segundo punto clave durante estos días.

Este templo, además de su importancia artística y religiosa, alberga las tumbas de papas como Clemente VIII, Paulo V y san Pío V, así como de figuras históricas como Gian Lorenzo Bernini y Paulina Bonaparte.

Basílica de Santa María la Maggiore en Roma
Basílica papal de Santa María la Maggiore en Roma Fuente: Adobe Stock

Esta ceremonia espera que atraiga a una multitud enorme, probablemente mayor que la vista en 2005 en el funeral del papa Juan Pablo II, al que asistieron casi cuatro millones de personas. De hecho, según datos de la asociación FETAVE, en los últimos días y de cara al fin de semana del funeral del Papa Francisco, se ha registrado un récord histórico de desplazamientos a Roma.

Después del funeral, se procede al cónclave para elegir al nuevo papa, que podrá iniciar entre el 5 y el 10 de mayo, aunque la fecha exacta será decidida por los cerca de 133 cardenales electores en los próximos días. Durante el proceso, se verá humo desde la Capilla Sixtina dos veces al día: al mediodía y a las 19 h, salvo que se elija un papa antes, cuando el humo blanco podría aparecer a las 10:30 o 17:30.

No se requiere entrada para acceder a la Plaza de San Pedro, pero sí pasar controles de seguridad. El primer día solo habrá una votación nocturna; luego, se realizarán cuatro votaciones diarias hasta que haya un nuevo pontífice. El próximo Papa necesitará 89 votos para conseguir los dos tercios necesarios para ser proclamado sumo pontífice.

Cierres temporales y limitaciones de acceso

Durante estos días, las zonas más cercanas al Vaticano presentan restricciones de acceso y cierres parciales. La Basílica de San Pedro no está disponible para visitas turísticas, y su famosa cúpula permanece cerrada. Los accesos a la Plaza de San Pedro estarán sujetos a revisión por seguridad, sin requerir entradas pero con largas filas garantizadas, especialmente el sábado.

Tambien han sido suspendidas las visitas guiadas, ya que muchas de ellas acceden por la Capilla Sixtina, donde se realizará la votación para elegir al nuevo papa; y por este motivo, la sala con frescos de Miguel Ángel permanecerá cerrada durante aproximadamente una semana antes del inicio del Cónclave y volverá a abrirse un par de semanas después de su finalización (como sucedió con los papas anteriores).

Los Museos Vaticanos permanecen abiertos, pero el sábado 26 cerrarán por completo en señal de luto. También se han suspendido todas las visitas a los Jardines Vaticanos y a la Necrópolis de la Vía Triumphalis.

En contraste, el Castillo de Sant’Angelo -a solo 10 minutos a pie del Vaticano- permanece abierto y representa una buena alternativa para quienes buscan comprender la historia papal desde una perspectiva más cultural.

Además dónde se podrá visitar bajo reserva Il Passetto di Borgo, un tramo elevado y fortificado de las Murallas del Vaticano que, desde el Palacio Apostólico del Vaticano, pasando por la parte posterior de lo columnata de Bernini, recorre Via dei corridoi y Via Borgo Sant’Angelo y termina en Castel Sant’Angelo.

Cómo visitar Roma y el Vaticano durante el funeral del papa Francisco
Plaza del Vaticano con la Basílica de San Pedro Fuente: Adobe Stock

Largas esperas, precios elevados y disponibilidad limitada

El número de visitantes en Roma ya era alto debido al Jubileo 2025, pero estos días la ciudad vive una saturación inédita. A ello se suma un fuerte operativo de seguridad que incluye bloqueos en avenidas, controles de acceso y presencia policial reforzada en zonas sensibles, especialmente alrededor del Vaticano y las principales basílicas.

Se recomienda salir con antelación a cualquier actividad programada y considerar rutas alternativas si se viaja en taxi o transporte público.

Los trenes, metros y vuelos operan con normalidad, aunque pueden presentarse demoras puntuales debido a la afluencia y al incremento del control en estaciones y aeropuertos.

Roma está bien conectada a nivel internacional gracias a sus dos aeropuertos principales: Fiumicino y Ciampino. El Aeropuerto Internacional Leonardo da Vinci, en Fiumicino, se sitúa a unos 27 kilómetros al suroeste del centro y es el más grande del país, operando la mayoría de los vuelos intercontinentales y siendo un importante hub para aerolíneas no europeas. Por otro lado, Ciampino, más pequeño y ubicado al sureste, se especializa en vuelos de bajo coste dentro de Europa, además de contar con rutas puntuales a Marruecos.

Desde Fiumicino, el traslado al centro es rápido y eficiente gracias al tren Leonardo Express, que conecta con la estación Termini cada 15 minutos. Alternativamente, existen taxis con tarifa fija (55 euros) y servicios de autobús que, por menos de 10 euros, cubren el trayecto en unos 50 minutos. Desde Ciampino, la opción más económica es el autobús (9,90 euros), con un recorrido de aproximadamente 40 minutos, aunque los taxis también ofrecen una tarifa fija de 40 euros.

Para quienes llegan desde otras ciudades italianas, la estación Termini es un punto de conexión estratégico. Ferrocarriles del Estado Italiano (FS) ha reforzado los servicios de alta velocidad y los enlaces con los aeropuertos para responder al aumento de viajeros previsto.

Como era previsible, la demanda hotelera se ha disparado, se estima que las tarifas en zonas cercanas al Vaticano han subido hasta un 75% y más del 90% de la oferta hotelera está ya reservada. Algunos hoteles en áreas más alejadas, como cerca de la estación Termini o la Plaza de España, todavía ofrecen disponibilidad a precios más moderados.

En cuanto a vuelos, se ha registrado un incremento promedio del 60% en los pasajes hacia Roma desde otras ciudades europeas. Desde Madrid y Barcelona, los billetes superan los 200 euros, mientras que desde ciudades como Valencia alcanzan los 600 euros.

Por su parte compañías como Iberia ha incrementado temporalmente la frecuencia de sus vuelos hacia la capital italiana, con 10.352 plazas entre ambas capitales desde el jueves 24 de abril y hasta el próximo domingo 27 de abril.

¿Qué hacer si ya tienes tu viaje programado?

Aunque muchos espacios vinculados directamente con el Vaticano están temporalmente fuera de servicio turístico, Roma sigue ofreciendo una amplia gama de opciones para el visitante.

Las otras tres basílicas mayores -San Juan de Letrán, San Pablo Extramuros y la misma Santa María la Mayor (cuando no esté clausurada por el funeral)- pueden visitarse, aunque conviene confirmar su apertura antes de ir.

Además, iglesias como San Pietro in Vincoli (donde se encuentra el Moisés de Miguel Ángel) o Santa Maria sopra Minerva, justo detrás del Panteón, son joyas arquitectónicas con gran valor histórico y artístico, no afectadas por las ceremonias oficiales.

Para quienes buscan alejarse del bullicio de Roma sin perder el vínculo con la historia papal, existen dos destinos destacados a las afueras de la ciudad. Castel Gandolfo, la antigua residencia de verano de los papas desde el siglo XVI, ofrece hoy una experiencia única: el Palacio Apostólico y sus jardines, abiertos al público desde 2016, permiten explorar espacios privados del Vaticano con vistas privilegiadas al lago Albano. No obstante, estará cerrado el sábado 26 de abril en señal de luto. al igual que otros monumentos.

Más al norte, en Viterbo -a poco más de una hora en tren- se encuentra el imponente Palazzo dei Papi, sede temporal del papado durante el siglo XIII. Este palacio, que hoy puede visitarse, conserva el esplendor medieval que lo convirtió en refugio pontificio durante siglos, además de estar rodeado por la riqueza termal de la región, frecuentada por pontífices incluso en épocas posteriores.

Para comentar, así como para ver ciertos contenidos de Hosteltur, inicia sesión o crea tu cuenta

Inicia sesión

Esta noticia no tiene comentarios.